18.Noodle

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Narra 2D

-¡2D! -dijo ella riendo y le sonreí

-Cálmate

-Estás demente

Seguimos caminando, la grabación ya había finalizado y estábamos paseando por la playa, la brisa era cálida. Yukimi es divertida y sabe escuchar, pero... No es ella.

Cada vez que la recuerdo un nudo se arma en mi garganta impidiéndome el habla. ¿Por qué es tan complicado hablar o pensar en ella?

-¿2D? Oye...

-Oh, sí, lo siento. ¿Que decías?

-Decía que ya debo irme

-Oh...

-tengo tu número, tal vez podamos salir otro día -sonrió

-Claro que sí -le devolví el gesto. Me despedí de ella con un beso en la mejilla y entré a la casa. Me senté en el sillón y encendí la televisión

-Por favor, ¿P-podrías apagarla? La luz me molesta mucho -oí un susurro y volteé a ver. Era Noodle recostada en el otro sillón, estaba roja.

-Oh, claro, lo siento... ¿Que haces aquí, Noodz?

-No quiero levantarme, me duele la cabeza

Caminé hacia ella y toqué su frente

-Dios, Noodle, estás hirviendo.

Inmediatamente la cargué hasta su habitación y la recosté sobre la cama, puse una bolsa de hielos en su cabeza y me senté a su lado

-Vas a estar bien. -susurré y besé su frente

Narra Noodle

Veía todo borroso, me dolía mucho la cabeza, Stuart apagó la luz y se recostó a mi lado. Dijo que se quedaría aquí hasta que me sienta mejor, pero eso no pasará. No creo que pueda mejorarme en una noche.

-Ve a tu habitación, Stu. Yo estoy bien, en serio

-No.

-Puedo decirle a Cyborg que me cuide

-Yo quiero cuidarte. -habló mirándome. No supe que decir, las palabras no salían, me perdí en la oscuridad de sus ojos.- descansa, Noodle.

Sin más que decir me tapé con las sábanas e intenté dormir, pero era imposible. Cuando me tapaba sentía calor y cuando no, sentía frío. La noche fue una eternidad, una larga tortura.

.   .   .  

Sentí como 2D se paraba de la cama. Se estiró y se acercó a mí, vio la bolsa de hielos ya derretida en el suelo y luego me miró a mi

-Creí que dormías

-No pude dormir en toda la noche -hablé

-Oh, Noodle, ¿Por que no me dijiste?

-Por que no quería molestarte, grabaste con Yukimi y seguro estabas cansado.

-Nunca estaré cansado para ti, Noodle.

Me volteé de tal manera que le daba la espalda. No quería hablar con él, no quería darme falsas esperanzas de algo que jamás pasará.

-Noodle

-Estoy, bien. Ya me curé, puedes irte. -hablé

-... Noodz

-Por favor, 2D, vete.

Su sombra dejó de cubrirme y salió de mi habitación cerrando la puerta con delicadeza.

Me duele hacer esto, pero me duele más no poder hacer nada para curar mi dolor.

Narra Murdoc

-¡HEY, STU! -grité

-Hola... Mudz...

-¿Que tal? ¿Follaron?

-¡Qué? ¡No!

-Oh, ya veo. Bueno... será para la próxima, suerte

-Gracias... por la cita, Murdoc. Gracias por reservar un lugar en un restaurante muy lindo.

-No hay de qué, tonto -bebí

Él se sentó en el sillón al lado mío

-Noodle está enferma

-¿Ah, sí? ¿Que tiene?

-Fiebre.

-Ya se le pasará, dejala.

Susurró algo que no entendí bien

.¿Dijiste algo, face-ache?

-N-n-no, nada. Nada...

Alcé los hombros y seguí viendo la televisión

-Descanza, Murdoc.

-Ajá

No sé que tiene exactamente ese idiota, pero la verdad es que me estreza verlo con la cabeza baja todo el tiempo.



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