Brown Vs Blue (Klaine boyxboy)

CAPÍTULO 15: LUCHAR POR UN SUEÑO

CAPÍTULO 15: LUCHAR POR UN SUEÑO

Artie llegó y vio a Rachel tumbada junto a su hermano. Blaine la apretaba con fuerza, en momentos como ese deseaba ser capaz de proteger a sus hermanos de todo lo malo del mundo. Junto a los dos jóvenes se encontraban Ryder, Elliot, Cooper, Kurt, Finn y Noah. El ojimiel le contó al recién llegado lo ocurrido.

– Sabes que no hago nada gratis. – Explicó el chico en silla de ruedas.

– Lo sé... ¿Cuál es el precio? – Quiso saber el mayor de los Anderson.

– Necesito a alguien de tus características. Tengo un plan que debe llevarlo alguien que no ambicione poder. Alguien que, pase lo que pase, no olvide el objetivo, alguien que quiera ayudar a los demás por encima de beneficiarse a sí mismo y creo que tú podrías ser ese alguien. – Dijo Abrams señalando a Blaine.

– Cuentame. – Ofreció el moreno.

– Tienes que llegar al poder y cambiar leyes. – Explicó el Blue.

– No puedo... Soy un Brown. – Dijo el más bajo.

– Lentillas... ¿Sabes lo que son? – Quiso saber el ojiazul.

– Una vez me las puse para parecer un green – Todos lo miraron asombrados. – Estaba en la sede con Sebastian y vino una inspección.

– Es un plan peligroso... – Comenzó a decir Kurt, pero fue acallado por el otro joven.

– Acepto.

Artie salía del hospital satisfecho. Había encontrado a la persona ideal para realizar los planes que tenía en mente. Poco a poco adquirirían poder en la sociedad y podrían cambiar las cosas. Si había alguien en el mundo en quien podía confiar, ese era Blaine. Sin embargo, mientras salía vio algo que le borró la sonrisa.

Kitty, Sam, Sebastian y Quinn entraban al hospital. El castaño había quedado con el doctor Gilbert. Se habían enterado de lo sucedido con Rachel y, en ese momento en el que habían confirmado que Cooper era un Anderson, debían plantear la manera menos dolorosa para todos de afrontar la noticia. Sin embargo, Wilde vio a Jake que caminaba por todo el hospital y se acercó a él.

– ¿Va todo bien? – Quiso saber la joven.

– Han violado a Rachel y estoy buscando a ver si puedo descubrir quien ha sido. – Dijo el menor de los Puckerman.

– ¿Crees que el impresentable tendrá un cartel en la frente que diga “violador”? – Preguntó sarcásticamente.

– No, pero espero que se le note algo. Una mancha de sangre, un arañazo... Algo, lo que sea con tal de descubrir al monstruo. – Respondió el moreno.

– Eres un buen chico. No son tu familia y te preocupas por ellos. – Dijo la rubia.

– Crecí con ellos. Son casi como hermanos para mí. – Explicó el Brown con tristeza. La ojiverde lo abrazó para intentar consolarlo. Al separarse, el joven juntó sus labios con los de la chica. Un beso tierno y de amistad. Nada pasional.

Sin embargo, ese beso, visto desde los ojos de Artie, era una demostración de amor y la ruptura de su corazón. Pudo sentir la punzada de dolor que mataba sus sentimientos y que hacía que sus ojos quemaran por el esfuerzo de contener las lágrimas...

Ryder y su madre se llevaron a Rachel a casa. Finn y Carole se fueron para preparar las cosas ya que la joven Anderson se mudaría con ellos al día siguiente. Noah volvió a su cama y Cooper y Elliot dejaron a Kurt a solas con Blaine.

– ¿Puedo pedirte algo? – Preguntó tímido el castaño.

– ¿Qué quieres? – El moreno se puso a la defensiva, pensaba que el ojiazul era su amigo y que todo lo hacía porque es un buen chico y no porque quisiera algo de él.

– Te he estado observando. Eres fuerte por los demás y admiro muchísimo tu fuerza y tu decisión de proteger a aquellos a quienes amas. Pero creo que también deberías pensar en ti. Todo esto debe estar matándote por dentro y no lo demuestras. Quiero pedirte que te desahogues conmigo, que llores, que cuentes conmigo. – Explicó el más alto. Anderson lo miró a los ojos, buscando un indicio que le indicara que realmente no había dicho eso. Buscando pruebas que demostraran que realmente quería hacerle daño y no ayudarlo. Sin embargo, esos ojos azules le enviaban una mirada sincera. Hummel se acercó y se tumbó junto a él en la cama. En cuanto se acomodó, arrastró al más bajo para que se pusiera sobre su pecho. Blaine puso cara de dolor, ya que sus heridas no habían curado. Rápidamente cambió su expresión para no preocupar a Kurt.

– Quejate si te duele. No debes ser fuerte por mí. Yo seré fuerte por ti. Llora, quejate... – Susurró el castaño. En ese momento notó como el moreno se relajaba y dejaba que las lágrimas salieran. Pronto notó que su respiración se agitó y comenzó a sentir los espasmos del otro. El ojiazul lo acariciaba y le susurraba palabras de ánimo. Deseaba de todo corazón ayudar a la familia del chico que estaba entre sus brazos. Lo primero que haría sería hablar con Artie. Tenía que haber alguna manera de liberar al ojimiel de su misión.

Los dos jóvenes no lo sabían, pero esa escena estaba siendo presenciada por Sebastian. Después de arreglar todo con los Gilbert y decidir esperar un poco para informar a Cooper se había dirigido allí para visitar a su ex novio. Llegó justo a tiempo para ver como Hummel le ofrecía su apoyo y el otro lo aceptaba sin impedimentos. Por un lado se alegraba de que Blaine tuviera a alguien a su lado, pero por otro le dolía no ser él quien le diera su amor. Si su relación era imposible, la de Kurt y Anderson lo era aun más...