CAPÍTULO 30: NO VOLVERÁS A ESTAR A MI LADO

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CAPÍTULO 30: NO VOLVERÁS A ESTAR A MI LADO

Kurt, Cooper y Elliot estaban compartiendo confidencias en la casa de los Gilbert cuando unos hombres enmascarados y armados entraron. Agarraron a los tres Blues, Finn, Rachel y el bebé y los sacaron de la casa. Todos estaban asustados mientras eran introducidos en el remolque de un pequeño camión.

– ¿Dónde nos llevan? – Quiso saber Hudson mientras rodeaba con sus brazos a su mujer y su hijo.

– No tenéis que saber donde nos dirigimos. Tenéis que estar tranquilos. No os vamos a hacer daño. – Uno de los desconocidos contestó.

Después de dos horas de viaje, pararon en un lugar y los llevaron hasta una fábrica que parecía abandonada. Allí estaban muchos de sus amigos, junto a sus padres.

– ¿Qué hacemos todos aquí? – Preguntó Hummel.

– Nos han descubierto, poco a poco irán viniendo todos. – Informó Artie.

– ¿Y Blaine? ¿Dónde está Blaine? – Gritó el castaño. Abrams miró a los tres hermanos del ojimiel y a su madre antes de volver la vista al joven que estaba delante de él.

– Lo han matado. Lo han descubierto. Pensaba que lo torturarían durante un tiempo, lo suficiente para que pudiéramos sacarlo de allí pero... No sé si saben que tengo infiltrados allí o qué pero... Uno de mis hombres ha tenido que sacar varios cuerpos hace unos minutos y estamos convencidos de que uno de ellos es de Blaine.

El ojiazul se apoyó en la pared y se dejó caer, sentándose en el suelo, en estado de shock, Rachel se escondió entre los brazos de su marido que la apretó con fuerza contra su pecho. Marley se acercó a Ryder para consolarlo y Cooper acudió junto a su madre biológica.

– ¿Estáis seguros? – Elliot intentó mantener la calma. El ojimiel era el cuñado y mejor amigo de su hermano biológico y el hermano de su otro hermano, además de la pareja de uno de sus mejores amigos y hermano de la pareja de otra de sus amigas. Si lo pensaba seriamente, era un lío, pero así era su familia.

– Sí. Han matado a varios presos y las celdas donde lo retenían están vacías. – Comentó el líder de La Revolución del Árbol con semblante muy serio.

Comenzaron a escucharse los gemidos y sollozos de Kurt. No podía soportar el pensar que no podría volver a ver a su novio. Comenzó a temblar e hipar mientras sentía los brazos de Brittany rodeándolo. Pero por mucho que su amiga se esforzase, en esos momentos lo que deseaba era que le abrazara otra persona. Quería sentir unos brazos que no volverían a rodearlo nunca más, al igual que no volvería a ver esa sonrisa que le hacía suspirar o esos ojos que, incluso con lentillas, eran capaces de transmitir amor. Se agarró la muñeca con fuerza, presionando la pulsera que él le regalara días atrás, como si Blaine fuera capaz de abrazarlo a través de ella.

– ¿Qué vamos a hacer a partir de ahora? – La señora Gilbert entendía el dolor de todos, al final era hermano de su hijo, pero tenían cosas más importantes en las que pensar.

– Acelerar el plan. Ya no tenemos tiempo ni capacidad para hacer el cambio de forma lenta. Tendremos que hacerlo de la manera que quería evitar. Debemos empezar la guerra. – Comunicó Artie.

– ¿Tendrás el valor de pedirnos que luchemos después de haber perdido a Blaine? – Quiso saber Mandy mientras miraba con preocupación a sus tres hijos vivos. Había perdido a dos de sus pequeños y a su marido, no se sentía con fuerza para perder a nadie más.

– Tengo un lugar seguro para que os refugiéis hasta que todo pase. – El joven de la silla de ruedas informó. – ¿Quién quiere ir allí?

Ryder se adelantó antes de que nadie pudiera decir nada. Quería hablar.

– Antes de nadie se aparte de la guerra, quiero que penséis bien en lo que vais a hacer. Blaine ha muerto por un objetivo, la libertad. Si queremos que su memoria siga presente, debemos hacer que su muerte haya servido para algo. No voy a dejar que su sacrificio quede impune. Van a pagar por lo que le han hecho y vamos a conseguir que su sueño se haga realidad, por él.

Nadie dijo nada más, Finn convenció a su madre y a Mandy para que se llevaran a Devon al lugar seguro y lo cuidaran mientras él y su mujer luchaban por el futuro del bebé. La señora Gilbert también se unió a ellas, aunque su marido se opuso, a pesar de la insistencia de sus hijos. Los señores Hummel, Rose, Smythe y Evans decidieron luchar por sus ideales mientras que el resto se fueron. Antes de que salieran, Kurt se acercó a la madre del joven que ocupaba su corazón y le mostró la pulsera.

– Entenderé que te la quieras llevar. Pertenece a tu familia y Cooper o Ryder querrán dársela a alguien. – Dijo el Blue.

– Blaine te la dio a ti. Me lo contó y sé que sabes lo que significa. Eres un Anderson, pase lo que pase es tuya. Aunque no la quieras llevar porque no tiene valor, es algo que te pertenece a ti. – La mujer acarició la cara del joven mientras este lloraba.

– Blaine se parece mucho a ti. Me dijo lo mismo. Para mí es lo más valioso del mundo. Me hubiera dolido devolverla pero pensé que era lo correcto. – Los dos dejaron de intentar retener las lágrimas y se abrazaron.

Todos los que no querían formar parte de la revolución se fueron y Ryder y Rachel se acercaron a Hummel y lo rodearon con sus brazos.

– Eres un Anderson Kurt, no lo olvides. – Susurró la chica.

– Siento romper un momento tan mágico, pero tenemos que ponernos a trabajar. Hay mucho que hacer y cuanto antes empecemos, antes cumpliremos nuestro objetivo... – Artie comenzó a decir pero en ese momento entró Schuester, uno de sus aliados.

– Tenemos el anuncio del gobierno. Ha sido emitido por la televisión hace unos minutos. – El hombre mostraba un DVD.

– Ponlo para que lo veamos, tendremos que contra-atacar. Parte de la batalla la vamos a vivir en la prensa. Esa va a ser una de las maneras de conseguir soldados para uno u otro bando.

– No creo que sea algo que deban ver los Anderson. – Dijo Will.

– Será mejor que salgáis...

– No lo haré, si tiene que ver con Blaine me quedo. – Por primera vez desde que escuchó la noticia, el castaño mostró entereza.

No tardó en arrepentirse de su decisión. El video contenía imágenes de tortura hacia su novio. Entre ellas, una realmente preocupante que parecía que suponía la muerte del Brown. Todos contuvieron las lágrimas y prefirieron sacar su rabia. Tenían ganas de luchar y eso harían todos. Cooper, Kurt, Ryder, Marley, Finn y Rachel se cogieron de las manos. Lucharían por la libertad y por vengar a un joven que lo dio todo por ellos.

Brown Vs Blue (Klaine boyxboy)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora