VENGANZA // Ross Lynch

Capítulo 2

Me encontraba atendiendo a un cliente.

Michelle terminaba de guardar en una caja algunos panecillos que una señora había pedido minutos antes.

Le entregué su cambio al cliente y una caja con un par de donas que había ordenado.

Me sonrió y le sonreí de vuelta.

Escuché la campanita de la puerta son como cada vez que se abría.

Kaylee entró con una sonrisa de oreja a oreja.

Probablemente traía una buena noticia.

Vino hasta el mostrador, donde me encontraba yo terminando de cobrarle a una señora.

Y finalmente me desocupé y pudo saludarme.

Me dejó un beso en la mejilla.

-Necesitamos hablar.- Me dijo emocionada sonriendo.

-¿Quieres tomar algo?- Le pregunté riendo.

-Si, dame un mocha frappuccino.

Asentí sonriendo.

Le pedí a Michelle que lo preparara y fui con ella a sentarme en una de las mesas de la cafetería.

Se sentó dejando su bolsa encima de la mesa.

-No lo vas a creer, ¿lista?- Me dijo casi en voz alta.

Asentí sonriendo.

Me mostró su mano izquierda dejando ver un bonito anillo en su cuarto dedo.

-No puede ser. ¿Cómo pasó esto?- Dije emocionada, casi dando brincos pequeños en mi lugar.

-Ni yo me lo creo, siempre pensé que tú serías la primera de ambas en casarse.- Dijo casi llorando pero manteniendo la sonrisa.

-Cuéntame.- Dije, obviamente pidiendo detalles de la propuesta.

-El viernes por la noche, Ross me llevó a cenar y me dijo que nos iríamos a Miami temprano, ese fin de semana, y el sábado, arregló todo en un restaurante y pidió una mesa en la playa. ¿Puedes creerlo? ¡En una playa Noah!

Dijo casi gritando.

-Cenamos comida italiana, estuvo delicioso todo y después me dio un enorme discurso que me hizo llorar como tres horas seguidas y me lo pidió. Oh, se me olvidaba contarte que contrato a una violinista, fue la mejor noche de todas Noah. Y cuando regresamos al hotel tuvimos el mejor sexo en estos cinco años de relación que llevamos.

Terminó de contarme.

Reí y la abracé sintiéndome bastante feliz por ella y por Ross.

Ambos eran mis amigos y me ponía bastante bien saber que eran tan felices.

-Tienes que ayudarme a planear todo amiga, quiero que sea la mejor boda de todas, quiero el mejor vestido, quiero el mejor salón, quiero la mejor fiesta, y obviamente serás mi dama y mi madrina de bodas.

Me dijo sonriendo.

Asentí a todo lo que me dijo.

-Esta bien, esta bien. Estoy muy feliz por ti, felicidades. 

-Gracias, ahora solo falta que Jacob se de prisa y pronto ambas seremos la señora Lynch y la señora Brown.

Dijo riendo.

Asentí riendo y Michelle nos interrumpió.

Le entregó su bebida a Kaylee y se retiró después.

Kaylee sacó dinero de su cartera para pagarme.

-No, déjalo así. Es tu regalo de compromiso.- Le dije riendo.