Capitulo 35.

38 2 12
                                    

Este vendría siendo el capitulo 71.  

—: ¡Ok, señoritas! Llamó el entrenador Scott. —: Acérquense. Hoy usaremos esto — Explicó, mientras les mostraba una báscula. —: Sin preguntas, ni quejas... ¿De acuerdo? No será nada del otro mundo, es necesario que hagamos esto, así las obligo a cuidarse un poco más, sobre todo cuidar lo que comen y lo que no. Vayan haciendo una fila, no quiero llamarlas por lista, no son niñas pequeñas.

Kharem supo inmediatamente que aquella situación era por ella, por el comentario que le había hecho la otra vez. Sabía que él descubriría que efectivamente había bajado considerablemente de peso.

Aunque los demás lo notaban sin usar la báscula, ahora tendrían la certeza y sabía que aquello le garantizaría una larga charla con el entrenador y realmente ella no tenía ni la más mínima intención de explicarle a él nada.

La rubia no pudo evitar su incomodidad al ver el objeto y esto no pasó desapercibido para el entrenador. Se colocó rápidamente entre las últimas de la fila, sabía que igual tendría que pasar, pero haría lo posible por alargar el momento de pesarse. La mayoría de las chicas habían mantenido su peso y el entrenador les proporcionaba algunos consejos para que continuaran de esa manera.

Kharem respiró hondo cuando llegó su turno. Sus piernas temblaban un poco, pero consiguió el valor para hacerlo.

—: Arráez. Hace dos meses aproximadamente pesabas unos 52 kilos, veamos... —Dijo y ella asintió temerosa. —: 5 kilos...—Soltó él en un susurro y ella lo miró, él le sostuvo la mirada y Kharem pudo sentir como la reprendía sin siquiera decir nada. —: Has bajado 5 kilos. Es extraño, ¿no te parece?

—: ¿Por qué?

—: Desde nuestros inicios, te has mantenido. Subes uno o dos, pero de 57 no pasabas y a 50 no llegabas. ¿Qué pasó?

—: Me he estado ejercitando un poco más.

—: Eso lo puedo notar, pero no creo que sea para tanto. ¿Está usted alimentándose adecuadamente?

—: Si claro— Dijo ella rápidamente.

—: ¿Segura? —Preguntó y Kharem solo asintió. —: No encuentro una razón para esto. ¿Te sientes bien, has estado enferma?

—: Estoy bien y no, no estoy enferma, de verdad— Ya estaba empezando a molestarse.

Él le dio una última mirada y la dejó ir. 

Acabado el entrenamiento, las mandó a las duchas, pero no sin antes acercarse a la rubia, en realidad le preocupaba la joven futbolista, pues la notaba agotada últimamente, algo le estaba afectando y no se quería entrometer demasiado, pero no quedaría de su parte no haber hablado con ella al respecto.

—: ¡Kharem! —Llamó él y ella se detuvo en seco, pues primera vez que la llamaba por su nombre. —: Quédate un momento.

—: Tengo algo de prisa.

—: Dame unos minutos —Pidió él amablemente. —: Escucha... No sé qué pasa contigo, no me parece normal tu pérdida de peso, te he notado un poco desconcentrada y desanimada últimamente— Dijo y Kharem evitó rodar sus ojos. No necesitaba esta charla ahora — Sé que tu vida personal no es mi problema, pero me preocupa tu estado físico, ya no quiero que te desgastes mas, ya no te quiero aquí diez minutos antes, ni diez después ¿de acuerdo? — Preguntó y ella sólo lo escuchó sin hacer ningún gesto o soltar palabra — Vienes al entrenamiento como todas las demás y luego te vas. Siempre te dije que no te excedieras, no quiero que saltes tus comidas...

—: Yo no hago tal cosa— Interrumpió la rubia.

—: No te quiero con las defensas bajas — Continuó Scott sin prestarle mucha atención — Debes dormir ocho horas y tus ojeras me dicen lo contrario. No te lo tomes a mal, sólo me preocupo.

Rompecabezas (Puzzle life) Continuación...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora