Mi Guardaespaldas 1° T

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XXXX

Villalobos me miró y frunció el ceño y sus manos se convirtieron en puños, lo mire y le mostré mi sonrisa más falsa, el dio varios pasos y tomo a la chica de la mano para alejarla de mi.

-Tanto tiempo sin vernos Sebas...

-Lo conoces

-No...

-Si me conoce no te conto...

-¡Callate! No estás en condiciones de hablar. Caeli me puedes esperar afuera

-¡No! ¿Quién es él? ¿De donde se conocen?

-Mira pequeña acércate para contarte la historia de cómo nos conocimos sebas y yo...

-Ni se te ocurra acercarte a ella

-Oh vamos no me digas que...

-¡Callate! No es lo que piensas,pero te conozco y sé que quieres hacerle daño

-Sebastián de que estás hablando de donde lo conoces, tú estás con el en esto verdad

Sonreí al escuchar lo que la chica dijo, había logrado mi propósito y ella estaba enfadada con villalobos.

-Claro que no estoy con el, este tipo es uno de los hombres que están tras tu papá y quiere hacerte daño.

-Y porque sabe tu nombre

-Lo conozco de tiempo atrás...

-Nos conocimos cuando tuve el placer de matar a su novia Daniela Rued...

Mire como Sebastián se tenso y me fulminó con la mirada sus puños estaban blancos por la fuerza que ejercía, sonreí y me levanté de la silla, para acercarme a la chica. Sebastián lo noto y escondió a la chica tras su cuerpo.

-Alejate de ella

-No podrás protegerla siempre, algún día fallarás y ahí estaré para notarlo Villalobos

-No me retes ya te metí en la cárcel una vez puedo volver a hacerlo.

-Y debo tenerte miedo por eso, gracias a ti aprendí de grandes personas, sé cómo cuidarme.

Regrese a donde estaba minutos antes cuando la puerta se abrió y Bautista, Zurita y Arango aparecieron en mi campo de visión me tense al ver a Sebastián Arango tenía mucho sin saber de él. Lo mire fijamente y sonrei antes de sentarme en donde estaba.

-Vaya nos volvemos a encontrar

-Asi que tú eres el idiota que me jode la vida, dime en donde esta Sergio...

-Por favor no me hagas reír en verdad crees que te lo diré no soy tan idiota como tus niños para traicionar a mi jefe.

Sonreí triunfante y mire a Bautista, el solo esquivo mi mirada, Villalobos se tenso y salió de la habitación junto con la chica.

Narra Caeli.

Sebastián me saco de la habitación y me pidió que me quedara en su recámara yo solo asentí y entre en ella, escuché como cerraba la puerta con llave y suspiré. Caminé por la habitación y me senté en un pequeño sillón de color blanco que estaba en una de las esquinas cerca de la ventana, por alguna extraña razón me sentía protegida y a salvo. Saque mi celular y perdí el tiempo en mis redes sociales. Después de unos minutos el sueño llegó a mi y por más que intentaba estar despierta no podía, me acerque. La gran cama y me tiré entregándome bajo las sábanas tome una almohada y la abrace para poder dormir un poco.