Rebelde con causa

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Donghae desde aquella noche en Daegu ya no pudo dormir tranquilo y si lo hacía un sueño inquieto lo invadía, uno donde Hyukjae se alejaba cada vez más dejándolo solo en medio de un bosque oscuro. Donghae supo que ese sueño era pesadilla de su realidad.

El escritor desde aquel día parecía alejarse ¿Qué fue lo que le paso realmente? Porque por más que hacia memoria no recordaba haber hecho algo para enfurecer de ese modo al alto. Ese día todo había sido perfecto, Hyukjae había hecho hasta lo imposible para verlo feliz, llevándolo a ver a su madre, comprándole un pastel y hasta cantándole a viva voz el feliz cumpleaños con un montón de desconocidos. Donghae había visto la sonrisa despreocupada y la mirada cariñosa ¿entonces por qué?

Se encontró repitiéndose una y mil veces que pronto todo volvería a ser como siempre y que como si nada entraría al departamento de su vecino y este lo miraría con fingido enfado para luego sin darse cuenta charlar y cenar hablando de todo y a la vez de nada... Pero nada de eso paso.

- Donghae - el escritor lo miro desde adentro sin abrir la puerta del todo.

-Hola- intento pasar propia manía que tenia de entrar sin ser invitado.

-Espera – el alto impidió su entrada, logrando una verdadera confusión en el menor –
Yo estoy saliendo de viaje... y debo terminar de alistar...

-¿De viaje? – los ojos felinos se entornaron. 

-Sí, debo presentar el libro en algunas ciudades...

-Veo - el más chico se giró como si en verdad no le importaba – Que tengas buen viaje – sin mirarlo siquiera se metió en la puerta vecina.

Hyukjae tomo todo lo preparado y salió. Era una decisión tomada, era la mejor salida... por un tiempo se alejaría de él... por un tiempo no lo vería, en ese momento donde parecía que el solo respirar su mismo aire le accionaba una colisión en los sentimiento pensó que la única manera de superar eso era alejándose... sentir tanto por alguien que se había jurado cuidar era frustrante.

Donghae tiro la mochila a un lado pateándola con fuerza, se sentía vacío. Varias semanas habían pasado desde que el alto se había ido. Al principio intento tomarlo con calma. Intento pensar que era normal. Que no había nada de extraño que el escrito presentara su libro en diferentes ciudades... pero Donghae sabía que algo había cambiado, Donghae era un especialista en sentir los cambios de ánimos y el de Hyukjae de la noche a la mañana había cambiado... Hyukjae era un mentiroso, él le había prometido que todo estaría bien y que estaría a su lado para apoyarlo, sin embargo se había ido y lo había dejado solo.

Estaba dolido, herido y se sentía traicionado, porque después de muchos días de pensarlo lo había entendido... en verdad el alto no lo quería a su lado, tal vez porque no deseaba llenarse de problemas la vida con un niño maleducado como solía decirle.

Donghae, con un dolor que lo hacía temblar, con una furia que lo obligaba a reprimirse a llorar lo comprendió. Comprendió que Hyukjae había pensado mejor las cosas y la resolución saltaba a la vista... Hyukjae le había mentido cuando le había dicho que todo estaría bien.

-Tenemos que hablar – la voz carente de cariño de Emma le atrajo a la realidad.

-No, no tenemos nada que hablar - se paró para ignorarla.

-Entonces... solo te diré que tienes una semana – sonrió complacida.

-¿De qué rayos hablas?

-Que la próxima semana iras a un internado – sonrió victoriosa cuando vio como la cara de Donghae se desdibujaba.

**

-Dios Hyuk ¿cuánto más...? - Kyuhyun se quejo.

-¿Cuánto más qué? - se defendió molesto.

 El es un problema ☁️ EHDonde viven las historias. Descúbrelo ahora