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La luz de la madrugada comenzaba a entrar por la ventana, dando a entender que habían tenido sexo toda la noche dejándolos exhaustos a ambos. Joo hyun despertó alarmada al ver el reloj, iba tremendamente tarde al trabajo, cosa que jamas le había sucedido antes. Pero algo le impedía levantarse. Dos fuertes brazos desnudos estaban ceñidos a su cintura y recordó todo lo que había sucedido la noche anterior y parte de la madrugada. El color tiño sus mejillas y quería hacerse pequeña, aun mas. Con mucho cuidado logro deshacerse de los brazos den chico para caminar desnuda de puntas hasta su baño y tomar una ducha rápida para salir rápidamente hacia las oficinas.

Gran parte de la mañana no pudo concentrarse, debido a que varios recuerdos fugaces abundaban en su mente de la noche anterior. Sonreía involuntariamente y al llegar saludo a todos los presentes, llamando la atención de todos. Seokjin volvió a entrar sin tocar antes pero ella ni siquiera se percato de eso, en cambio le sonrió y saludo con un amable buenos días.  Seokjin la miro confundido pero igual le entrego todos los papeles y asuntos importantes de la empresa para después recordarle que nadie había tomado la vacante y retirarse de nuevo. 

Un golpe estruendoso llamo la atención de ella para después dejar ver al joven Jeon Jungkook con un café sobre su mano. Lucia mejor que nunca, con unos jeans ajustados que pedían a gritos ser despojados y no dejaban nada a la imaginación. Una playera simple blanca pero sobre ella una chaqueta de cuero negra a la par de sus jeans rotos. Y unas Timberlands amarillas. Su cabello estaba peinado hacia un lado dejando al descubierto su frente y parte de sus cejas. Joo hyun creía que iba a desfallecer. 

— Vas a venir matándome de un susto. ¿Que haces aquí? —Dijo ella tocando su corazón con su mano y mirándolo confundida.

— Recibí tu delicada nota de "Sal de aquí cuanto antes y cierra al salir" y me imagine que estarías aquí y hacerte, ademas que también pensé que no habías desayunado así que te traje un café — Estaba siendo amable y caritativo con ella. Eso quería decir que había pensado en ella.

— No tenias por que hacerlo — Respondió seria, odiaba que alguien hiciera algo por ella. No le gustaba causar lastima ni mendigar nada de nadie. Siempre fue así, de orgullosa.

— No tenia, pero quería hacerlo — Dijo el hundiéndose de hombros. Se acercó a dejarlo sobre su escritorio y sentarse frente a ella. Ella busco la manera de no mirarlo a los ojos o se notaria que estaba ansiosa de verlo.

— Deberías estar en la escuela — Dijo ella mientras tecleaba un par de cosas en su Mac de escritorio.

— Debería, podre llegar tarde. Odio la puntualidad—Dijo el restandole importancia girándose a ver todo a su alrededor.

— Y yo odio a la gente que es impuntual — Dijo ella, la frialdad sonaba en cada palabra pronunciada.

— Solo buscas llevarme la contraria, pero se como podre convencerte— La ceja de el se elevó al igual que la comisura de uno de sus labios.

— Déjate de hacerte el gracioso y ve a la escuela— Dijo por fin mirándolo a los ojos después de juntar mucha fuerza de voluntad.

— De acuerdo— Dijo parándose del asiento para encaminarse hacia el otro lado del escritorio y ella frunció el ceño confundida. Se acerco a ella y le planto un beso sobre sus labios lo cual pidió que hubiera sido menos corto-Noona.

Salio de ahí a su paso, ese caminar  que lo caracterizaba a donde fuera. Haciéndolo lucir tan sexy que tenia un debate mental entre alcanzarlo o dejarlo ir.


I Want You, Noona. ®J.JKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora