•Leon Heart• [BNHA]

•7•

—Hoy, para el entrenamiento básico de héroes será una clase con tres instructores, All Might y yo, y una persona más.— Todos en la clase exclamaron intrigados. Menos Tomoe, ella sólo tenía sueño y estaba apoyada en su mano mirando con aburrimiento todo.

Sus compañeros comenzaron a comentar entre ellos sobre lo que su profesor les acababa de decir, hasta que Sero preguntó que harían.

Aizawa les mostró una tarjeta que tenía la palabra "Rescue" y comenzó a explicar.

—Desastres, catástrofes y todo eso. Es entrenamiento de rescate.— los alumnos comenzaron a emocionarse y los ojos miel de la castaña comenzaron a brillar por lo que había dicho su profesor. Su sensei les llamó la atención y les informó sobre que podrían utilizar sus trajes esta vez a elección.— El entrenamiento será fuera del campus, así que iremos en bus. Es todo. Prepárense.

Fue la primera en levantarse de su asiento y con una velocidad sobrenatural tomo su traje y salió disparada a los vestuarios, ganándose en el camino un regaño del presidente de la clase.

***

Ya en el transporte, a Fukuoka no se le escapó el notable nerviosismo de su compañero peliverde cuando Asui comparó su kosei con el de All Might. Izuku se relajó cuando Eijiro desmintió lo que la del kosei de rana acababa de decir.

No pudo evitar soltar una risa cuando Aoyama fue bulleado por Ashido.

—Bueno, hablando de kosei brillantes y fuertes serían Bakugo, Tomo-chan y Todoroki, ¿no?— exclamó Kirishima. Tomoe negó con la cabeza divertida, Bakugou se limitó a bufar y Todoroki solo los ignoró olímpicamente. Tsuyu asintió con entusiasmo.

—Me intriga lo que dijo Aizawa sensei sobre Tomo-chan kero — Asui puso un dedo en su barbilla y miró a la castaña que se encontraba mirando por la ventana del autobús.

—Es verdad, ¿que tan fuerte eres, Tomo-chan? ¿todavía tengo la oportunidad de vencerte? — De un momento a otro todas las miradas se posaron en ella.

—Descúbrelo cuando peleemos, Kirishima-kun.— Sonrió con sorna y todos exclamaron un "Oh". El pelirrojo sonrió y se levantó de su asiento.

—¡Ten por seguro de que te venceré!— ella asintió y sus compañeros se dedicaron lo que sobraba del camino en burlarse de Bakugo. Ella se reía de vez en cuando ganándose una que otra amenaza de muerte del rubio ceniza. Para cuando llegaron, una persona dentro de un traje de astronauta los recibió.

—Chicos, he estado esperando por ustedes.— Tomoe reconoció al héroe al instante y sus ojos eran comparado a unos focos por lo mucho que brillaron en el momento en que lo reconoció.— ¡Vayamos dentro de una vez!— todos saludaron y procedieron a entrar.

Cuando estaban dentro, Tomoe observó todo con mucha atención y cada vez se emocionaba más. Le encantaba Trece y le encantaba la idea de poder rescatar a alguien de una catástrofe.

Trece comenzó presentando el lugar en donde se encontraban, el llamado "El lugar de simulación imprevisto", o resumido "USJ".

—Veamos, antes de comenzar les diré unas cuantas cosas. Chicos, estoy seguro de que la mayoría conoce mi particularidad, Black Hole, puedo absorber todo y convertirlo en polvo.— Midoriya le respondió positivo, agregando los logros que había conseguido el héroe con él.— Si, pero es un poder que puede matar fácilmente. Algunos de ustedes también tienen particularidades como esas, ¿no?— La burbuja de felicidad en la que estaba la castaña se rompió sin escrúpulos provocando que se pusiera realmente tensa, cosa que no paso desapercibida por uno de sus compañeros.
Por breves momentos, recuerdos del pasado inundaron su cabeza. Sobre todos, las miradas de horror que alguna vez le habían dedicado.

—En la sociedad, las particularidades han sido adaptadas para no ser tomadas como algo de peligro, sino como un beneficio. Pero, no deben olvidar que hay particularidades que pueden matar con un mal paso.— Sintió que el aire se volvía un poco más pesado, mareándola un poco. Trece reiteró lo que habían logrado con los entrenamientos dados hasta ahora por sus profesores.

—¡Esta clase es un inicio! Deben aprender a utilizar sus particularidades para salvar las vidas de las personas. No deben tener poderes para lastimar a otros. Espero que entiendan que con sus particularidades pueden ayudar a los demás.— Fukuoka asintió para si, recobrando la postura y con el pensamiento de que el héroe que se encontraba en frente suyo era genial
— ¡Eso es todo! ¡Gracias por escuchar!— todos comenzaron a aplaudir y elogiar las palabras de héroe.

Sintió que una mano se posaba en su hombro y se giró a ver quién era. Se sorprendió al ver que Bakugou era quién lo había hecho.

—Oe, perra.— la mirada de Bakugou expresaba una pregunta que Fukuoka logró entender, ella sonrió para luego asentir. Katsuki bufó y apartó la mirada.— No es como si me importara igual.— murmuró alejándose hasta Kirishima.

Aizawa cortó con el bullicio nuevamente para comenzar la clase cuando las luces se cortaron de un momento a otro. La chica sintió que un escalofrío le invadía.

—Esto no tiene buena pinta.— susurró Tomoe para sí pero su compañero rubio cenizo logró escuchar.

El agua de la fuente que se hallaba en el medio de todo comenzó a salir entrecortada y una bruma negra se formó en frente a ésta. Aizawa se tensó y se puso sus lentes.

—¿Sensei?— logró decir Fukuoka. Personas comenzaron a salir de la bruma negra-violeta, liderados por un peliceste al que no se le lograba ver la cara ya que estaba cubierta por una mano.

—¡Trece! ¡Cuida de los alumnos!— nadie entendía nada, hasta que su profesor habló.— Son todos villanos, reúnanse y salgan de aquí lo más pronto posible.