¡Eres un psicópata! ➝ Jungkook

1. ¿Hotel?, ¡Trivago!

Di un último suspiro y cerré la puerta de mi ahora ex habitación. Todavía no puedo creer que mi padres me hayan conseguido un trabajo de pediatría fuera del país y más encima al otro lado del bendito universo.

Corea, Seúl. Lugar donde se encuentran los coreanos o como yo les digo "chinos", dicen que es tranquilo y muy hogareño... La verdad no tengo ni idea, lo único que conozco de ese país es a mi amigo de la infancia: HoSeok. Desde que nos fuimos de vacaciones con mi familia a Corea, hemos mantenido contacto, es más; prometió ir a buscarme al aeropuerto y dejar que me quedé en su casa, solo me dijo que vivía junto a otros chicos, de seguro son dos o tres... Me conformo con tal de que me den mi espacio.

Me abroche el cinturón mientras que mi padre acomodaba mis maletas en el maletero y di un suspiró, me espera una nueva vida en Seúl.

En el trayecto hacía el aeropuerto les contaré un poco de mi vida: mi nombre es HyeSun, vivo junto a mis padres y dos de mis hermanos, mi madre es latina y mi padre asiático, yo heredé todo de mi madre: cara, cuerpo, manos, TODO.

  — Ya llegamos Sun.

Sonreí en mis adentros y baje del carro, tome mis maletas y me adentré al aeropuerto junto a mi padre, quien venía chequeando cual era el vuelo que debía tomar: hoy será un día genial.

  — Hobi te buscará en dos días, por mientras te quedarás en un hotel, ya pensaré en cual.

Nos miramos con una sonrisa y dije:

 —¿Has buscado alguna vez un hotel en internet?

  — ¿Has visto la cantidad de precios que hay para la misma habitación?—Me siguió.

  —  Trivago te ayuda a comparar...

  — ¿Hotel?, ¡Trivago!

Reímos por la tontería que acabamos de decir, pero todo se esfumo cuando anunciaron mi vuelo: besé su mejilla y corrí hacía el avión.

   ☯   ☯  ☯

Baje del avión y el viento chocó en mi rostro, provocando que me de un escalofrió y frote mis brazos intentando darme algo de calor. Pedí un taxi y me dirigí al hotel que me había dicho mi padre por mensaje. 

Cuando entré la recepcionista se comportó muy bien, y luego de una charla amistosa me dió el número de la habitación en la que me hospedaría en lo que HoSeok llegue a buscarme. Coloque la maleta a un lado de la cama: opte por no desarmarla ya que solo eran dos días, me di una refrescante ducha y me coloque algo más  para invierno, me encantaría recorrer Daegu en lo que me queda del día: me despedí de JiSee la recepcionista y salí a dar un breve paseo.

Camine por un callejón y sonreí al leer la siguiente frase graficada en la pared:

"Él era aprueba de balas. Ella era el arma"

-Una buena frase: como para ponerla en una canción, no en la pared-Reí por mi pensamiento.

Las chicas comenzaron a gritar como locas, ¿a caso llegó Obama a Corea?... Me acerqué un poco y una de esas chicas me empujó logrando que cayera de trasero: genial.

  — ¡Apartensé!  —Se acerco a donde me encontraba—. ¿Estas bien?

Agarre su mano y me levante lentamente, ¿quién es el "príncipe" que me rescato?... Creo que debo dejar de ver películas.

  — ¿Conoces a BTS? —Lo mire confundida.

  — ¿Bitiez?, no.

Bufó.

  — Mi nombre es YoonGi, me tengo que ir —Salió corriendo.

Raro...

Seguí mi recorrido sin tomarle importancia a esa "charla", cuando vi que estaba anocheciendo me volví al hotel: donde me duche y coloque un pijama.

Primer día en Corea: ¿normal?, me recosté y caí en los brazos de morfeo.