Mayo 27 del 2020
3:15 a.m.
Casa.
El silencio reinaba en la casa del Dr. Evan. Fue para eso de las tres que se comenzaron a escuchar ruidos, el pequeño Edward se levantó sobresaltado al escuchar unas voces desconocidas, también escucho algunos pasos ― ¡Era un monstruo! Su corazón comenzó a latir más rápido de lo normal, tenía miedo de lo que los monstruos podían hacerle, sin embargo de repente se percató que a su lado estaba su padre durmiendo pacíficamente, aquello lo hiso sentir más seguro su padre estaba ahí y no dejaría que los monstruos lo lastimaran se embrujo con la cobija de pies a cabeza, con sus pequeñas manos se aferró a su padre, lo abrazaba con todas sus fuerzas, su respiración exhalaba el miedo, por consiguiente, cerró los ojos estaba seguro de que todo estaría bien. (Pues nadie le podría hacer daño con su padre ahí) Fue entonces cuando los pasos se escucharon con más fuerza y la puerta de su cuarto se abrió y el miedo lo invadió de nuevo. ―¿Qué haría?, ¿despertar a su padre? ―. Eso estaría mal. Su madre le explico que su padre trabajaba mucho por lo que estaba muy cansado y era malo despertarlo cuando él dormía por lo que simplemente lo abrazo aun con más fuerza. ― ¡Esta aquí! Exclamo alguien. Edward se armó de valor y saco la cabeza de debajo de la manta para poder así ver a quien había hablado no se sorprendió era su tío Blake le había regalado un camión de juguete para su cumpleaños, pero después llego un hombre extraño y lo que este llevaba en la mano lo asusto de nuevo, cerró los ojos de nuevamente, pero esta vez con mucha más fuerza. ― Ya veo se ha de haber quedado dormido aquí por eso Natalia estaba sola. Dijo el hombre extraño.
―Baja la vos, acaso no te da miedo que se despierte ―dijo el tío Blake. ―Es un médico ha de tener sueño profundo. Le contesto mientras se acercaba a Evan; en la mano llevaba una inyección llena de escopolamina cuando estaba a punto de drogarlo. ― ¿Tío Blake que le van a inyectar a mi padre? ―cuestiono el pequeño Edward mientras se levantaba.
Ambos hombres se sorprendieron aquello no lo habían planeado, se lanzaron una mirada cómplice no había por qué preocuparse era solo un niño, el hombre se acercó a Edward para drogarle primero, pero este salió corriendo ¡No quería que lo inyectaran! Les tenía miedo a las inyecciones, pero no llego lejos su tío lo atrapo y el otro le coloco la inyección, la droga actuó rápido. Prosiguieron e inyectaron a Evan, subieron a la familia a la camioneta, era hora por fin su día había llegado, le había llevado tanto tiempo planearlo todo, su sonrisa aterro a Blake quien ya no estaba tan seguro de lo que estaban haciendo.
―No creo que esto vaya a funcionar digo es mi sobrino y ella mi prima si solo quieres hacerle daño a él, ¿porque tienes que llevártelos a ellos? ―cuestiono inseguro, pero se arrepintió casi de inmediato.
―Ese niño no es tu sobrino realmente y lo sabes... ―Y ya es tarde para darse la vuelta no me obligues a hacerte daño, dijiste que haríamos esto juntos, además ella y el estarán bien lo prometo. Le respondió.
―Lo siento solo déjame fuera, prometo no decir nada ―dijo mientras se bajaba de la camioneta, pero eso fue todo le habían disparado antes de que diera un paso más. No tuve opción se decía mientras recogía el cuerpo y lo subía también a la camioneta, aquello había sido un pequeño inconveniente, pero no por eso se sentía mal, no había nada que le quitara su buen humor por fin el sentiría lo que el sintió y se daría cuenta de la mentira en la que vivía.
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Eterno
Misteri / Thriller"El verdadero amor perdura para siempre" o ¿No? El Dr. Evan es psiquiatra trabaja en el hospital central del pequeño pueblo de Lost Valley, donde vive con su preciada familia. Su familia lo es todo para él y está convencido de que él es todo para...