Antes de que todo acabe [Nishinoya yuu]

Capítulo 17

La voz del entrenador dando fin a la práctica me sacó de mis pensamientos. Al salir para ir a casa vi a Iwaizumi esperando en la puerta de la preparatoria. Antes de irme con él de vuelta a casa me voltee un momento a ver a Tanaka y a Nishinoya, que también salían para volver a su hogar. El más alto se despidió de mi, mientras que el otro ni siquiera me miró. Idiota.

Volvía hablando con Iwaizumi de cosas random, nada demasiado importante, evitando hablar de la razón por la que no había sido mi hermano el que me esperaba para ir a casa, pues por desgracia ya me imaginaba la razón. A tan solo un par de metros por detrás andaban los dos mencionados antes.

-Escucha- Empezó el mayor- Hay algo que deberías saber sobre por qué no ha ido Tooru.

-No necesito explicaciones...-trate de decir lo mas calmada que podía.

-Si- Su tono era frió y serio. Se quedo parado dos pasos por detrás de mí. me dí la vuelta para poder verlo, apretaba los puños y ni siquiera me miraba. Tanaka y su amigo se quedaron parados cuando llegaron a la altura del amigo de mi hermano.

-¿Qué es lo que pasa?- retorcía las asas de la mochila que llevaba al hombro.

-Esta en tú casa, ha venido.- me quedé estática mientras mi mente procesaba la información- El quiere...

-Vamos a tu casa- no le dejé terminar de hablar, la idea de tener que verle me revolvía el estómago.

-Escucha tienes que...

-No- ¿Porque estaba llorando otra vez?-si tu idea es que vea a esa persona que se supone que es mi padre ya te puedes ir olvidando...

-Tienes que ir- ya no tenía ese tono tan serio, era más bien uno tranquilo.- Él es...

-Me voy a dar una vuelta...- dije dándome la vuelta para irme a algún lado, no sé donde, pero peor no podría ser.

-No- volvió a usar ese tono que en otro momento habría hecho que no me moviera de mi sitio. Sin embargo solo hizo que empezara a correr, sabía que no correría detrás de mí, pues el día anterior se había hecho daño en la rodilla.

-¡No corras idiota!- Su voz empezó a hacerse distante. Sin embargo el sordo sonido de unos zapatos golpeando el asfalto a un ritmo más acelerado que el mió me dio a entender que sí que estaba siguiéndome. Lo que provoco que mi ritmo acelerara hasta que sentí que se me iba a caer un pulmón, bueno, de paso una pierna, el bazo y algo más, pero bueno...

- Coño...- ese no era Iwaizumi- corres mucho ¿Sabes?

Me dí la vuelta a ver a aquella persona que me hablaba, era bajito, con un peinado aerodinámico y con unos brazos llenos de moratones.

-Dame un segundo- pidió mientras trataba de normalizar su respiración.

Claro, el se recuperó enseguida, pero yo debía de estar cerca del infarto,bueno eso, y creo que en algún momento de la carrera se debió de caer el alma, la vida y mi orgullo.

-No necesitas contármelo si no quieres- continuó para erguirse y mirarme directamente a los ojos- pero a un par de manzanas hay un parque, por si quieres ir un rato.

Mi querida respiración no me permitió responder; nota mental: debería volver a entrenar; por lo que me limité a asentir.

Caminamos en silencio hasta llegar a el antes mencionado parque.
Era un parque, sin nada que destacar, con un par de columpios y un tobogán; algunos árboles y arbustos.

Llegamos y nos sentamos en los columpios.
Estuvimos balanceándonos en silencio, tuve que reprimir a mi niña interior para no columpiarme como si pareciera que iba a salir volando.
Mientras me concentraba en mantener la poca dignidad que me quedaba.

-Mira... -Comenzó a hablar él más bajo- No sé por qué estas pasando, tampoco sé mucho sobre el tema- lo miré mientras el hablaba, absorto en mirarse los pies- pero creo, que eres fuerte. He visto muchas facetas tuyas, te he visto llorar, reír, enfadarte y mil cosas más.

-No es verdad...- dije sonriendo tristemente mientras él se giraba a verme.

-Aquella vez... Cuando de vuelta a casa hablabas con Tanaka y le contaste lo de la hija de tu padre...- Se quedó en silencio mirándome; tenía los ojos llorosos otra vez, empezaba a tener claro que sí iba a morir de algo sería de deshidratación- estuve pensando, creo que no sería capaz de poder, ya sabes... Estar tranquilo

No pude impedir que las lágrimas comenzarán a caer por 5738579 vez en el día. Escondí mi cara entre mis manos. Sentí unas manos agarrando suavemente mis antebrazos para separar mis manos de mi. No me dió tiempo a reaccionar cuando sentí unas brazos rodearme.

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Lo siento por no publicar, estoy de finales y realmente se me va la vida. Gracias por leer. Ya son 2.24k!!!😱😱😍