Capítulo 7

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Bien, trato de respirar con calma y en mi mente sólo se refleja paz, "mentira" eso es lo menos que siento ahora al saber que lo voy a ver después de lo que pasó, después de la tontería que hice por que eso si que lo es, no entiendo como pude reaccionar de esa manera tan inmadura, luego me quejo de que breth es un niño y la primera que se comporta así soy yo.

Seguro debe de odiarme, o no se ya no le gusto.? Si eso fuera cierto... como me sentiría? La verdad no lo sé, sería algo que nunca se dio entre nosotros asi que no debería afectarme en lo absoluto.

Lo más seguro es que me caiga mal porque para malas experiencias en el amor yo, tal vez a mi no me gustaría que me dejara con las ganas de un beso o afecto de alguien que me guste o por así decirlo, me atraiga... pero el no me atrae, el me encanta en todos los sentidos de la palabra, y por eso me condeno a mi misma hoy... y afrontar lo que pasó.

Abro la puerta y a la primera persona que veo es a mariam, ella me sonríe y yo se la devuelvo.

–Es hermosa tu casa amiga.–dice ella con una sonrisa y me abraza creo que en las manos de Jason hay una apetitosa lazaña.

–Jason.–digo alegre y mariam me da una botella de shampange.

Esta gente vino equipada a una cena donde yo ya tenía todo listo, o comen mucho o simplemente son muy cordiales al saber que yo tengo la comida y ellos traen más.... conozco a mariam y es una mujer hogareña le gusta ayudar en todo, es una de las cualidades de las cuales yo carezco.

Finalmente entra breth, el no me mira, como sospechaba. Me odia, digo no me ha dirigido la palabra pero es como se supone debe ser no?

–Buenas noches.–dice el al entrar, y aun no me miraba, su atención esta en su teléfono.

Algo dentro de mi se estruja y digo que me lo merezco, por dejarlo ayer... tiene el pómulo morado y un labio roto, al verlo así me causa tristeza, me duele a tan poco tiempo de conocerle, eso que no soy persona de encariñarme con alguien así... pero el vino a revolver mi vida, y en ella se está metiendo poco a poco sin siquiera saberlo o sospecharlo.

–No tuvieron que haber traído esta comida, mande a hacer mucha.–les dije con una gran sonrisa.

–Solo quise taer mi especialidad, y te la vas a acabar.–dice ella y yo río, ella deja las cosas en la mesita de la sala de estar y se dirige a nosotros.

–Podemos negociar tu casa?–dice jason mirando cada rincón de mi hermana mansión.

–No esta a la venta, pero te la dejo de herencia.–le dije entre risas, a Jason siemprelo tomare como un bromista.

–Falta mucho para que quede para mi.–dice el chistoso.

–Ni que estuviera tan joven.–dice mariam y yo río, se ven bien juntos.

–Tampoco me quieras tanto cariño.–dijo de la misma manera.

Veo como breth tiene una expresión seria, no me mira... quiero que lo haga por dios, por lo menos para poder decifrar su mirada y saber como se siente, pero en cierto modo entiendo por qué está de esa manera, las empeladas les dan copas de vino menos a breth el cual no tomo ninguna.

–Puedo usar su baño?–me pregunta breth, me mira a los ojos y en estos ya no está el mismo brillo de cuando me miraba. El desvía su mirada a otro lado.

–Sube las escaleras, el segundo pasillo a la derecha –le dije y el sin decir nada se fue.

Esta situación me pone triste.

–Esta muy afectado desde anoche, no ha querido salir de su cuarto ni decir palabra.–dice mariam, tengo unas inmensas ganas de ir tras el, pero sería muy sospechoso.

Joven Tormento©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora