Después de pasar la noche en nuestro refugio secreto contando el dinero y dividiéndonos cada parte correspondiente a cada una, a eso de la una de la mañana fuimos hasta nuestros dormitorios para darnos una merecida ducha antes de irnos a dormir. Normalmente los dormitorios del campus son de a 2 integrantes cada uno y son camas cuchetas, pero digamos que nosotras con un poco más de dinero tenemos nuestros privilegios e hicimos una gran remodelación en el lugar. A cada cuarto, los 5 cuartos, los unimos todos en casi uno como una especie de mini casa, obviamente no estaban todos definitivamente juntos, pero si unidos por una puerta que dirigía a todos los cuartos en cada cuarto. También habíamos pagado un cuarto de mas, 6 en total, para hacerlo nuestra mini sala de estar y nuestra área de desayuno. Cada una con una cama de 2 plazas y un armario inmenso. Definitivamente todas morían por tener lo que nosotras teníamos, pero si nos había costado un montón de verde, aunque, siempre conseguíamos más de ello todas las semanas.
Después de ducharme, me puse mi babydoll y me fui a acostar a la cama, la cuál me quede dormida muy rápida y profundamente.
Al día siguiente...
Sentí que unas manos me sacudían lentamente mientras decían mi nombre. Empecé a abrir los ojos lentamente. Sentí que no había dormido nada y los ojos me pesaban. Ayer había sido un día agotador.
- ____ (tu apodo) despierta. - Me di vuelta y por el sonido de su voz supe que la que me estaba hablando era Doll, mi mejor amiga. Me sonrió y se paró correctamente. - Ven a desayunar. - Dijo antes de salir de la habitación y cerrar la puerta.
Me levanté de la cama sin ganas y froté mis ojos con mis manos mientras bostezaba. Me dirigí hasta mi armario y pensé en que podía ponerme. Ya era casi primavera, así que no pensaba ir muy cargada de ropa al colegio. Moví los jeans, y los shorts buscando entre los vestidos hasta que vi uno que me había comprado hace un mes y nunca lo había usado. Era un vestido rojo de fibra y gamuza corto con forma de v en la delantera tapada por una fina capa de hilo negro transparente en la parte faltante que me había comprando en Forever 21. Encima de eso me puse un chaleco gris con pequeñas deshilaciones de Unreal Fur y en los pies unas botas de plataforma de cuero negro y partes grises. Busqué en mis cajones una pulsera que combinará y me la puse en la parte de arriba de mi brazo derecho, ya que yo soy diestra.
Al terminar, fui hasta la sala de estar y me senté en la mesa sin haberme maquillado o peinado aún. Mad sirvió el desayuno para cada una y se sentó con nosotras. Hoy era su turno, cada día nos íbamos turnando por quién preparaba el desayuno. A mi siempre me tocaba los viernes, pero hoy era jueves.
Comí de lo que me había servido Mad y con las chicas comenzamos a hablar de chicos como era costumbre. Doll no paraba de hablar de Calvin y de lo obsesionada que estaba con él. Comenzó a decir cosas como "Hoy le preguntaré si quiere tener una cita conmigo" "Hoy le guiñaré el ojo y el se derretirá por mí" "Hoy le voy a preguntar si algún día me lleva a ver como hace ejercicio" "Hoy... hoy... hoy" uy... estaba insoportable. Si tan solo ella supiera que Calvin había hecho todas esas cosas conmigo.
Al terminar, dejé los platos en el lavabo y me fui al baño a maquillarme y peinarme.
Luego de unos 20 minutos, todas juntas bajamos por el elevador hasta planta baja y de ahí caminamos menos de 100 metros hasta el colegio. Al llegar nos juntamos con los mismos de siempre. Louis se acercó a mí y pidió poder hablar conmigo. Nos apartamos un poco del lugar.
- Oye ____ (tu apodo), no creerías lo que encontré al lado de mi cama ayer cuándo volví de mi entrenamiento de los "Wild Tigers". - El equipo de fútbol del colegio.
- ¿Qué? ¿Una nueva muñeca inflable? - Pregunté burlándome de él y este negó con la cabeza.
- Tú sabes que yo no necesito esas cosas. - Me guiñó el ojo. Yo los rodé. Abrió su mochila y de ella sacó algo muy personal que me pertenecía. Era una de mis bragas negras de encaje de Victoria's Secret, la que me había sacado en la habitación Calvin antes de... tener un poco de acción entre los dos.
Se la quise arrebatar de la mano pero este no me dejó.
- Así que si es tuya, ¿eh? - Preguntó, y ahora él era el que se estaba burlando de mí. - ¿La quieres? - Preguntó alzándola en el aire mientras la gente comenzaba a ver nuestra escena.
- Sí, es mía. - Dije firme evitando sentir las miradas de mis amigos en nosotros dos. - Dámela. - Le ordené pero este ni me escucho.
- Entonces el "yo con Calvin Roots, ni ahí, please" era puro verso. - Dijo imitando mi voz mientras me miraba fijamente.
- Yo no habló así. - Dije molesta por la voz aguda e infantil que había hecho. - Ya dámela. - Volví a repetir. - Todo el mundo esta mirándonos. - Dije cuándo me di cuenta de que Calvin también nos observaba desde lo lejos con los brazos cruzados intentando descifrar que estábamos platicando. Él acercó la bombacha de encaje negra a mi mano depositandola en ella. Sonreí. La verdad no pensaba que me la iba a devolver, quién sabe que estuvo haciendo con ella. Diugh... pensé.
- Pero antes... - Dijo antes de dejarme ir. - Me merezco un agradecimiento por traer tu ropa interior hasta ti y no haberlo publicado en las redes sociales. - Con brusquedad me tomó de la cintura atrayéndome más a él tratando de acortar la poca distancia que había entre nosotros. Intenté zafarme de su agarre, pero por alguna razón no podía. Se acercó lentamente a mí sin dejar de mirar mis labios; y me besó... lenta y desaforadamente mientras sentía como su lengua intentaba adentrarse en mi boca. Lo separé de mi inmediatamente mientras observaba como Calvin nos miraba hirviendo de celos. Sonreí victoriosa, y rápidamente decidí que la única forma de hacer que él me dejara de buscar era demostrándole que me interesaba otro chico. Pasé mis brazos en el cuello de Louis sin dejar de mirar a Calvin, y Louis abrió los ojos sorprendido por mi respuesta. Junté nuestras narices y esta vez la que lo besó lenta y dulcemente fui yo. Inminentemente recibí una grata respuesta de él, y vaya que el beso me estaba gustando. En el medio del beso sentí como Louis intentaba morder mi labio inferior, y con unas de mis manos libres mientras nos besábamos guarde mi braga en mi bolso procurando que nadie la viera.
Al tocar el timbre, ambos nos separamos y él no paraba de mirarme con un brillo de deseo en sus ojos mientras que su rostro mostraba una gran sonrisa de satisfacción. Definitivamente lo había dejado sorprendido. Sin decirle ni una palabra entré al colegio mientras veía como atrás mío venían mis amigas a paso apurado seguramente para preguntar que diablos había sido eso.
Pero en el medio del camino me choqué con él, el chico nuevo del colegio, Harry Styles, quién no se disculpó por chocar conmigo y aún así mantenía su mirada fija en mí.
ESTÁS LEYENDO
Muy Encubierto |Harry Styles & Tú|
FanfictionEl colegio puede convertirse en el lugar más peligroso.