Una semana antes...
Me desperté en medio de la noche, no como las otras veces, no, esta vez era otra cosa la que me mantenía despierta desde hace dos días. A mi lado en la cama Rob dormía boca abajo con la cabeza debajo de la almohada, una mano colgando fuera de la cama y la otra extendida en mi dirección, todavía no se sacaba esas mañas de vivir solo y siempre ocupaba mi lugar.
Me levante con cuidado de no despertarlo y a la vez intentando no saltar de la emoción, había tenido una súper idea. Pero a pesar de sus mañas de vivir solo Rob también vivía alerta por mi, según él por que ya me había escapado varias veces (No tengo idea de donde saco ese fundamento pero no me quejo).
Hice dos pasos fuera de la habitación con mi nuevo teléfono en mano.
-¿Solcito?- Llamo Rob desde la habitación, lance un par de malas palabras por no ser mas sigilosa aun, si es que se podía, y me asome por la puerta sólo un poco para que me vea.
-¿Emmmh?.
-¿Que haces allá?.-Se quejo ahora sentado sobre el colchón con las sabanas a medio cubrir su cuerpo. Inhale aire para no pensar en como le quedaban esas sabanas.- Son las dos de la mañana veni a dormir...-Y extendió una mano hacia mi, me mordí el labio para no sonreír.
-Ahora voy.- Me volteé con el teléfono en la mano ignorando su suspiro cansado, y marque el numero de Mica. Uno, dos tonos y luego la contestadora. Volví a intentarlo dos veces más hasta que atendió.
-¿Quien habla?.-Pregunto una voz muy dormida.
-Yo pendeja...-Bufe caminando hacia la cocina casi saltando.-¿Quien sino?.
-¿Que queres?.- Gruño contra mi oído, abrí la heladera sintiendo nostalgia por los recuerdos de nuestra niñez en el instituto pero lo suplante con un dedo de dulce de leche.
-Que amable.- Mi sarcasmo no le gusto y luego me colgó. Volví a llamarla.-Está bien...-Rodé los ojos y volví a meter el dedo en el pote de dulce de leche, ahora con algo de culpa por comerlo, mientras bajaba la voz.- ...quiero organizar un cumple sorpresa para Rob.
-¿Y no podías esperar hasta que la gente normal se despierte para eso?.- Se oyó un bostezo.-¿Sabias que tengo una hija?¿Y que hace sólo una hora logre que se durmiera?.-
-Jodete, vos quisiste.- Bufe mientras me lavaba la mano y ella me volvió a colgar. Intente llamarla en vano, no me contesto y mas que ignorarme supe que se quedo dormida. Marque el teclado y le escribí un texto: "Está bien, mañana hablamos."
No sabia si era buena idea, pero si algo sabia era que quería hacerlo y si fuera por mi ya estaría comprando los globos y haciendo la torta, pero no podía, los negocios estarían cerrados a las dos de la mañana.
-¿Que paso?.-Pregunto Roberth cuando volví a la habitación, me subí a la cama y él se recostó boca arriba para que yo me cueste con la cabeza sobre su pecho, su brazo me envolvió.
-Una pesadilla.-Mentí mientras él me acurrucada más cerca suyo y yo escuchaba cada uno de sus latidos hasta quedarme dormida.
(...)
-¿Que le hiciste a mi planta?.-Pregunto Rob cuando fue a la cocina a preparar el almuerzo, yo era muy buena cocinando pero Rob debía aprender también y no iba a hacerlo mirándome. Me volteé en el sillón y mire por arriba de la encimera que me señalaba la maseta con Albahaca, intente no reírme. Él se quejo.-¿De que te reís? Mataste a mi planta.
-Es una planta de Albahaca...-Le quite importancia con la mano mientras volvía a sentarme en el sillón a ver Los Simpson.-Se usa para condimentar la comida.
ESTÁS LEYENDO
Cazadores de Sombras Argentina: Sangre Derramada (#2)✔️
FanfictionAyelen cree que todo termino, que por fin podrá descansar pero ¿será así?. Nuevas revueltas entre los subterráneos y miles de problemas con su familia, Roberth y las nuevas responsabilidades. Gracias a la muerte de Iris muchos lideres tienen vía...