Capítulo 1: Pesadillas

31.1K 1.4K 779
                                    

Pov Dipper

Era oscuro todo no podía ver nada ni oír nada, era puro silencio el cual me empezaba a volver loco.

Empezar a caminar por este espacio vacío, nada absolutamente nada encontraba o veía es como si estuviera en el espacio.

Una estruendosa risa se oye por todo mi alrededor, la cual obviamente nunca olvidare era la de aquel demonio que derrote con mi familia hace tres años.

El miedo empezó a recorrer todo mi cuerpo, no me podía mover estaba aterrado.

Cuando por fin reaccionó algo pasa, al tratar de moverme caigo en la cuenta de que fui encadenado, algo que no note hasta ahora.

Al tratar de quitarme las cadenas estas se empezaban a ajustar más impidiendo mi escape y a la vez lastimándome.

En eso siento un jalón que me hace caer al suelo, pero en vez de tocar una superficie completamente sólida, esta tenía una sustancia viscosa la cual no reconocí al momento. Pero al empezar a ver las cosas a mi alrededor quedé estupefacto esto ERA SANGRE.

No lo podía creer esto era una pesadilla de la cual yo ya quería despertar, pero no podía.

—Pero miren a quien tenemos aquí — no puede ser esa voz es... — si soy yo Pino.

—No puede ser... T-te eliminamos — dije aterrado y a la vez con furia.

—Es lo que ustedes creían, o mejor dicho lo que les hice creer, pues sigo aquí ¿No?

—¿Qué es lo que quieres?

—Lo que quiero eso lo sabrás muy pronto mi querido Pino, porque una vez que lo obtenga nunca lo dejare ir JAJAJAJA....

Y en eso me despierto todo exaltado, otra pesadilla con ese mísero demonio que me atormenta desde la infancia.

Tengo 15 años y muy pronto cumpliré los 16 junto a mi gemela, y los malos recuerdos que trae ese dorito illuminati aún me persiguen.

Lo peor de todo esto es que estas pesadillas han aumentado en las últimas dos semanas.

Mire a la mesa de noche la cual tenía un reloj 3:40 am, no creo poder conciliar el sueño tan rápido después de lo que vi.

Me pregunto si será cierto lo que oigo en mis sueños, de que en realidad Bill sigue vivo y solo espera el momento para revelarse ante nosotros.

Agh qué frustrante el no saber nada, lo pienso mientras me jaló mi pelo en modo de frustración.

La habitación se encontraba en total silencio y sola a excepción de mi presencia, pues mi hermana ya no se encontraba aquí.

Hace un año ella y yo convencimos a nuestros padres de mudarnos a Gravity Falls, el único problema fue que la casa que compraron en el pueblo no era muy grande y agregando que a nuestra edad Mabel y yo necesitamos habitaciones separadas. Tome la decisión de que yo me quedara en la cabaña del misterio y ella en casa, lo cual nuestros padres no tuvieron ningún problema por esta decisión.

Bajé las escaleras en silencio pues no quería despertar a mis tíos, salí de la cabaña y me adentré al bosque.

Así un poco de frío pues aún era de madrugada, la ventaja es que traía una sudadera.

Cómo iba caminando podía admirar la belleza del bosque nocturno, y la tranquilidad que podía representar este ambiente. Pero a pesar del hermoso paisaje sabía exactamente a dónde quería ir.

Ese lugar me ayudara a quitarme las dudas de si lo que pasa en mis sueños es verdad o solo preocupaciones de lo que podría pasar si aquel ser de maldad regresará.

Media hora después pude llegar al lugar, y para mí alivio aún seguía la estatua de Bill en donde la dejamos, aunque se me hacía algo raro que tuviera más grietas de las que recordaba, pero no le di importancia a ese detalle.

Con ya mis nervios en calma regrese a la cabaña más relajado al pensar que Bill no regresaría, que equivocado estaba...

Bueno es cierto que me había llegado a estresar un poco al pensar que ese dorito regresaría o regresará, y no me pueden culpar pues con estas pesadillas que se me han presentado todas las noches quién no estaría nervioso o asustados.

Al inicio las quise ignorar, pero al ya haber pasado una semana se las conté a mi hermana la cual según ella dijo que eran por el estrés o solo malos recuerdos por el Raromagedon.

Quise creer pues igual dijo que desaparecerían con el tiempo, pero no fue así, seguían y seguían hasta que decidí contárselas al tío Ford el cual le tomó más seriedad.

Que el igual, al inicio dijo que podrían ser episodios del trauma, pero al ver que eran demasiado recurrentes y que se relacionaban mucho al demonio, decidimos investigar un "poco" según nosotros.

Pero no encontramos nada que lo relacionara, para luego optar en crear una máquina que las bloqueara. Esa máquina nos tardamos en construirla tres días seguidos sin casi dormir, y el día de la prueba pasó algo bien raro, al ponerla a funcionar todo estaba acorde lo planeamos, me fui a dormir con mi tío Ford vigilando que nada malo pasara, pero justo en el momento en el que cierro los ojos, esta se empieza a descontrolar rayos, ruidos y más empezaron a salir de esta, para que en el monitor que vigilaba mis sueños en un breve momento se viera el círculo de Bill resaltando su figura y la del Pino, para luego explotar.

Pues todo ese trabajo se fue a la basura y al parecer tendría otra buena temporada de pesadillas, vaya mi suerte nótese el sarcasmo.

Enserio ya no sé qué más hacer y tampoco el tío Ford, esto es muy estresante que incluso ya ni quiero dormir.

Pero al final una idea llego a mi mente y es que, si no puedo evitar mis pesadillas porque no mejor comprenderlas y descifrarlas, con esto en mente fui con mi tío para explicarle el asunto, y el con gusto accedió, y para nuestra suerte esta vez no tuvimos que construir nada ya que él ya contaba con un aparato que revelaba los sueños.

Pero enorme fue mi sorpresa al ver la cara del tío Ford al despertar, él estaba aterrado y preocupado, no entendía nada hasta que salió de su trance para mirarme con cara de preocupación.

—Dipper — empezó hablar y digamos que el tono que utilizó no era el más alentador de todos — estás en muy grave peligro.

—De qué estás hablando tío.

—Es que Bill no quiere nada en realidad, sino que quiere a alguien y ese alguien eres tú.

—Pero es imposible si él nunca a dicho tener interés en mí en absoluto, agregando de igual modo que está muerto, pues su estatua sigue donde la dejamos, ¡EL NO PUEDE ESTAR VIVO! — grité exaltado y aterrado.

—Tal vez, pero a lo que pude notar al monitorear tus sueños, es probable que siga vivo y que aún conserve sus poderes, y de que te quiere a ti, pues se notaba por la forma en la que te hablaba te ataba te atrapaba más los pequeños juegos de palabras que utilizaba, junto al modismo al hablar de ti como su Pino el cual es tu símbolo pues recordando te dijo " mi querido Pino" o "mi Pino" definiendo de que eres suyo.

—Entonces qué haremos tío.

—No lo sé ...

Eran las palabras que dijo al final para después darme un abrazo, y en ese justo momento empecé a llorar, pues las posibilidades de que Bill regrese aumentaron demasiado ya no sé qué hacer me siento en parte indefenso.

Pero una cosa sé bien y es que no dejaría que Bill obtenga lo que quiere, y que ese algo sea yo me da un poco de ventaja, pues nunca seré de él, ¿Verdad?

—o—o—O—o—o—O—o—o—O—o—o—O—o—o—O—o—o—O—o—o—O—o—o—O—o—o—O—o—o—

Una nueva historia aquí se presenta y esta vez de temática Billdip, y ustedes que podrían esperar de lo que se avecina.

Espero que les guste y apoyen este proyecto y perdonen si este capítulo está más corto de lo que acostumbro hacer si es que han leído mis otras historias cuales podrán ver que son un poco más largos los capítulos.

Pues gracias por leer, adiós.

Nunca te dejaré ir [billdip]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora