》Mi adorable maldición《

Capítulo 49

El rubio balanceaba sus pies por que estos no llegaban al suelo. Estaba sentado en las gradas del auditorio para ver como su hyung entrenaba. Vaya... era muy bueno jugando, además le encantaba ver aquel ceño fruncido por la concentración que tenia. Sin duda, amaba eso.

Pasaron unas horas, dos a decir verdad, para que acabará el entrenamiento y Jimin bajara de las gradas para acercarse a del pelinegro quien se secaba el sudor con una toalla blanca. Luego sonrió leve al ver al menor correr tras el feliz. Parecia un lindo niño. No lo diría, claro está.

-¡Hyung! -Se abalanzó a él para abrazarle y encoger sus ojos en dos finas líneas cuando sonrió. -. Jugó genial.

-Estoy sudoroso.

-No me importa. -El mayor río divertido. El bajo era un ternura de persona.

-Voy a los casilleros a bañarme.

-¿Puedo ir con usted? -Hizo un puchero cuando YoonGi lo separo y negaba con la cabeza. El quería ir a los vestidores con su hyung.-. ¿Por qué?

-Sólo esperame aquí. Vende pronto ¿si?. No hables con nadie.

-Solo estoy para usted hyung.

-Me matarás algún día. -Murmuró al ver como el menor asentía varias veces con aquella preciosa sonrisa. Un angelito.

El mayor se fue y Jimin sólo hizo un pequeño berrinche. No quería esperar, además había personas que no le quitaban ojo de encima, y eso le ponía incómodo, siempre le cohibia aquello. Ser observado tanto tiempo le ponía de nervios.

Tomó un balón para poner su mochila en el piso a lado de él. Su vista estaba en el aro de la canasta. Había visto a su mayor tirar varias veces así, y no evitó probar aquello. Se puso en la mitad de aquel círculo, atrás de la línea para asi lamerse los labios en suma concentración y tirar el balón hacia arriba. Fallando en el intento. Pues el balón había chocado con la abertura del aro y se había estrellado a su rostro, cosa que le hizo cubrirse en sus manos para así soltar un quejido que sonó más a un sollozo. Le había dolido.

-Hola cara bonita -Abrió un poco sus manos dejando ver sus ojos brillosos. Era aque chico que se le había acercado cuando esperaba a YoonGi fuera del gimnasio. -. ¿Qué haces aquí? Las clases fueron ayer, y hoy es fin de semana.

-Estoy...esperando...a...-Calló. Su hyung le dijo que no hablara con nadie.

-A YoonGi~ ya veo -Asintió para si mismo.-. ¿Por qué cubres tu rostro? ¿Te golpeaste? -Sonrió al ver como la menor desviaba su vista, el niño era sumiso.-. Debiste darte tremendo golpe con el balón si no me equivoco, déjame ayudarte.

-Alejate Wow.

El mencionado le miró divertido. -¿Por?

-Sólo aléjate. -Reiteró. Tomó el hombro de Jimin y su mochila para comenzar a caminar dejando muy atrás a Wow y salir del auditorio.

-No me alejare tan fácil YoonGi.

***

-Siento mucho incovenerle YoonGi hyung.

-Nada de eso. Pero si debiste tener cuidado. -El mayor término de poner crema en el rostro del menor, pues el balón le haba dado unos pequeños raspones, además, un poco de ardor en sí pero nada de otro mundo.

Los dos estaban en la casa del pelinegro, pues este se había ofrecido llevarlo a esta para poder curar su rostro, no fue tan grave en sí, pero se preocupó mucho al ver los ojos llorosos de Jimin.

-Estarás bien...-Suspiró. La mirada del menor era inocente, tan linda y pura como un niño pequeño. -. Para la próxima me acompañarás a los vestuarios de si o si.

-Yei~-El menor se acercó a su hyung y le beso la mejilla, pues Jimin se encontraba sentado en la cama de la habitación de YoonGi, mientras que este estaba incado frente suyo para curarlo. Se sonrojó.

-Bueno...-Decidió cambiar de tema.-. Te prometí algún decía enseñarte la libreta.

-Eres malo. Ha pasado much de eso.

-Hoy es el día, ¿listo? -Asintió. -. Esperame aquí.

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Pienso hacer una mini maratón de cinco capítulos 7u7...les gusta la idea?

Ahorita subo otro cap y tal vez más -u- así que aún no les voy a desear feliz semana Hasta acabar esta mini maratón...

La libreta wiii~ ya le va a mostrar >u< prepárense para momentos muy cute.

Los amo ;u;

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