No te arrepientas ✨ S.M /CANCELADA/

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Me desperté por la alarma de mi celular como todos los días, eso ya indicaba que eran las diez de la mañana, la luz del sol cubría toda mi habitación.

De a poco fui despertándome, y me dirigí a mi baño para hacer todo lo necesario.

Cuando salí me cambié, me puse un jean celeste claro con una remera blanca y del mismo color las zapatillas.

Peiné mi pelo, y se me ocurrió la idea de pensar que en algún momento podría teñirme de rubio, aunque mi castaño claro me agradaba bastante.

Me hice el desayuno y agarré mi celular para ver que se decía hoy, y por todas las notificaciones que tenía sabia que eran muchas.

"¿Shawn Mendes y Hannah Marshall están en algo? Ayer se los vio salir de un restaurante en Brooklyn muy felices"

Ni siquiera leí la nota pero no sé porque sonreí, además de impresionarme lo rápido que podían salir las noticias, después de todo Luisa estaría feliz al saber que había fotos de nosotros dos por ahí, es más, iba a mandarle un mensaje ahora mismo.

Conversación de WhatsApp;

Hannah: Ya viste las fotos seguramente, ¿no?

Luisa: ¡SI! Me encanta porque la foto da una química impresionante, esto va a estallar por todos lados.

Luisa: ¿Como la pasaron ayer?

Hannah: Genial, me divertí muchísimo, lo que si, ¿tenes su numero? porque me olvidé de preguntarle anoche.

Luisa: Ah, picarona la nena, ahora se lo pido a Andrew.

Hannah: Porque ese comentario de más, total es todo por el contrato que me hiciste firmar.

Luisa: Contacto; Shawn Mendes

Luisa: Si, el contrato, claro

Hannah: Mejor dejamos esto para después.

Agendé el numero de Shawn y esta vez iba a mandarle un mensaje a él.

Hannah: Hola Shawn, soy yo Hannah, ¿ya viste las fotos?

Shawn: Ey hola, las acabo de ver y creo que no están nada mal, ¿vos que decís?

¿Qué se supone que debía responder?

Hannah: Pienso lo mismo, es más, hasta guarde una

Shawn: Somos dos

Y no le contesté mas porque realmente no sabía que decirle.

-¡Buenos, buenos, buenos días! -dijo Brandon mientras abría la puerta, si le había dado una llave, y traía bolsas en sus manos.

-Hola -dije mientras el dejó un beso en mi frente.

-Por las cosas que vi de ayer no fue tan mal, ¿o me tengo que preocupar porque sos buena actriz?

-Lo pasé bien, después de todo tenías razón -dije mientras trataba de alcanzar una bolsa de las que dejó enfrente mío.

-No -y arrebató la bolsa antes que llegue- esto es para después.

-Da -dije rodando los ojos- ¿qué es?

-Pollo, pan, jamón, queso, ¿te suena?

-¿Me compraste mi sándwich de Subway? Te amo.

-Ya lo sé, ¿cómo no hacerlo? Mira lo que soy -dijo y se señaló a sí mismo.

-Dale, deja de decir estupideces y trae la frazada de mi habitación, vamos a terminar esa temporada.

Dicho y echo, mientras que yo volvía al living para poner en la televisión lo que quedaba de Gossip Girl, el trajo la frazada abrigada y nos tiramos al sillón.

Hicimos una pausa solamente para ir al comedor a atacar los sándwich de pollo, tranquilamente podríamos haberlos comidos en el sillón, pero la última vez que comimos ahí estuve dos semanas tratando de sacar el ketchup que Branon tiró en el sillón.

Mi celular sonó y lo tomé para ver de quién era el mensaje.

Conversación de WhatsApp:

Shawn: Estás ocupada hoy?

Hannah: No, qué pasó?

Shawn: Me mostraste un lugar especial para vos ayer, ¿podemos hacer lo mismo hoy pero con uno mío?

Sonreí ante su idea.

Hannah: a qué hora y cómo me visto?

Shawn: a las ocho y vení con ropa cómoda.

Hannah: echo.

-¿Qué tantas sonrisa eh? -preguntó mi mejor amigo trayéndome a la realidad.

-Nada, habla con Shawn.

-Ah, ¿y qué? -dijo en un tono distinto al que veníamos hablando, lo dejé pasar por alto.

-Nada, a la noche vamos a volver a salir.

-Pensé que no te gustaba esta idea de idas y vueltas con él -dijo antes de tomar coca-cola.

-Y vos me dijiste que le diera una oportunidad a eso.

Y ahí se terminó la conversación porque ninguno de los dos tenía que decir.

Después que terminamos de comer levanté las cosas de la mesa.

-Me voy Hannah, tengo que acompañar a mamá al médico, nos vemos más tarde -dijo mientras me mostraba una sonrisa triste de su parte.

-Mandale saludos a Rosa -dije mirándolo.

-Le voy a decir -dijo y salió por la puerta y mi casa quedó en completo silencio.

No sabía que hacer, eran las dos de la tarde y realmente no tenía que hacer nada, así que mi tarde se basó en lo siguiente: releí lo que me quedaba del libro de trono de cristal, mi saga favorita, después tomé mi guitarra y empecé a tocar notas al aire, luego me di cuenta que ya tenía una melodía echa, así que tomé el cuaderno pentagramado y anoté las notas.

Cuando me di cuenta eran las siete, así que me bañé rápido pero esta vez no lavé mi pelo, una vez cuando era chica me quedé con el trauma que me dijeron que lavarme la cabeza todos los días sacaba hongos, nunca supe si es cierto, pero desde entonces me lavo día por medio.

Una vez que salí y me puse otro jean celeste claro, un top rosa pastel y las zapatillas eran las adidas superstar, estaba enamorada de esas zapatillas.

Terminé justo, porque apenas agarré mi celular para matar el tiempo tenía un mensaje suyo diciendo que estaba abajo.

Lo encontré en la entrada y apenas me vio sonrió y se acercó un poco a mí.

-¿Vamos? -preguntó extendiéndome su mano.

-Vamos -dije tomándola y saliendo con él a su coche.