Fiesta de ilusiones

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VENECIA.

Desperté igual que cualquier día.
Con cara de zombi que necesita un litro de café para subsistir.
Como dije, totalmente normal, exceptuando un repentino dolor de cabeza y que ahora dormía en una habitación con tres chicas más.

Me moví para ver la hora 6:36 am, era demasiado temprano para mí, que me levantaba a las nueve, pero la necesidad de café invadió mi cuerpo.
Además el cambio de horario me estaba costando un poco de mi sueño.

Perezosamente y a paso de tortuga embarazada me levanté, pero sentí unos brazos alrededor de mi cintura.
Tenía dos opciones: una de las chicas se había equivocado de cama después de anoche, o era un chico y seguramente estaba volviéndome loca...
Esperaba que fuera la primera.

Volví a sentir como unos brazos me agarraban y me tumbaban de vuelta en la cama, dudo mucho que una chica tuviera brazos tan fuertes aún dormida, ahora tenía más miedo.

Me di la vuelta lentamente para verlo lista para golpear por si acaso, pero al ver el rostro de mi apresor tuve deseos de llorar recordando todo lo que había pasado el día anterior.

***

Después de conocer a Jazz, Terry y a la otra chica que se llamaba Daniel empecé a desempacar mis cosas con ayuda de ellas, me mostraron mi cama y que los baños eran en el primer piso de los dormitorios, lo que pensé inmediatamente es que tendría que bajar tres pisos todas las mañanas pareciendo muerta para bañarme.

¡Fantástico!

Después de terminar eran las cinco de la tarde, a las seis iba a empezar una fiesta de final del primer trimestre, una costumbre que me parece rara pero que en Peterson parece lo más normal del mundo.
Yo era consciente de eso desde que llegamos y tenía planeado quedarme en el cuarto dibujando o viendo videos de cualquier cosa, pero Daniel casi me mata cuando dije mis planes.

Ella dijo y cito sus justas palabras: no te puedo dejar sola apenas y llegas, ahora eres nuestra hermana de otra sangre y vienes con nosotras.

En realidad, no me molestaba quedarme sola, podría quedarme a seguir ordenando todas mis cosas en calma ya que toda la tarde Daniel se la paso intentando persuadir a Terry de usar vestido, lo cual no consiguió.
Al final me convenció, haciéndola saltar de alegría mientras me mostraba muchos vestidos de noche.

-Este vestido verde combina muy bien con tus ojos, mientras que este turquesa realzara tu cintura... ¡oh y este blanco te haría lucir más mayor y elegante! - siguió mencionando muchas cosas y sacando vestido tras vestido- no siempre te podrás librar de este uniforme así que elige correctamente.

Terry rodo los ojos, se puso sus audífonos y se desconectó de nuestra charla, Jazz ya se estaba arreglando con ropa más casual.

-La vas a asustar Daniel, déjala decir algo al menos.

-Bueno- refunfuño- ¿cuál quieres? - sus ojos brillaban de la emoción, me daba pena decir que no.
Tome las telas entre mis manos, todos eran muy bonitos, no solía usar vestido, pero talvez no caería mal por esta vez.

-Me gusta el turquesa- era ajustado hasta la cintura y luego caía hasta arriba de la rodilla, tenía unas pequeñas flores pintadas dándole lo necesario de adorno.
Daniel sonrió con satisfacción guardando el resto de vestidos y en una hora todas estábamos listas.
me sentía cómoda, aunque no tanto como Terry, que usaba un suéter y falda lisa, que fue a lo único que accedió a usar de parte de Daniel.
Se que seguramente me voy a quedar en un rincón viendo como ellas se juntan con sus conocidos, pero creo que lo prefiero así, la gente nueva no es mi especialidad.

El Tiempo Lo Cura Todo...¿Verdad?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora