El Tiempo Lo Cura Todo...¿Verdad?

Déjame ayudarte

Venecia.

Estos últimos tres días han sido muy tranquilos, todos los días he tenido que estar yendo a detención con Phoenix, no hay nadie más a parte de nosotros y el profesor Tremblay que siempre se queda dormido. Nosotros hacemos el trabajo diario y luego hacemos cualquier cosa, hablamos bajito para no despertarlo, jugamos juegos de mesa que llevamos en la mochila, escuchamos música compartiendo los audífonos, o simplemente nos apoyamos en el hombro del otro y apostamos cuantos ronquidos hará el profesor Tremblay por minuto.
Ayer hasta hicimos un mini picnic en el aula, el llevo unos panecillos de vainilla y café en un termo, usamos nuestros abrigos como manta y fingimos ser de la alta sociedad tomando el café de la tarde.
Debería pedirle a Charles que se vuelva a meter con nosotros, esto es muy divertido.
Hoy ya estamos a jueves, hoy mi papá invito a Phoenix a ver el partido y a cenar, y como siempre tengo miedo de lo que Jean pueda decir o hacer.

- ¿Venecia?

- ¿Sí?

-Estábamos pensando con Jazz y Terry salir esta noche al cine, aún no sabemos cuál vamos a ver, pero eso lo veremos luego, podemos invitar también a Elanna ¿te gustaría venir con nosotras? - Daniel me miraba pensativa mientras era peinada por Jazz, Terry estaba jugando con su teléfono a mi lado, el comedor se miraba bastante más tranquilo hoy.

-Me encantaría, pero tengo un compromiso está noche.

- ¿Ah sí? ¿de qué?

-Cena familiar.

-Bueno, entonces seremos sólo nosotras ¿crees que Elanna quiera venir?

-Yo creo que sí, le preguntaré luego.

-Bueno, ¡oh! mira ahí viene Phoenix- me giré y definitivamente ahí venía el, con su estilo tan él que es inclasificable.

-Hola palillo chino, hola chicas- me dio un beso en la mejilla, mis compañeras sonreían fingidamente reluciendo todos sus dientes y dejo frente a mí una cajita con unos mini croissants.

-sabes, he subido cinco libras está semana.

- ¡Pues bien por ti! sé que tu mamá quiere que subas de peso.

- ¿Cuándo hablaste de eso con mi mamá?

-Cuando estuve en tu casa la última vez, te recuerdo que te dormiste varias horas, me contó cosas interesantes, por cierto ¿está noche a qué horas llegó? Necesito mi tiempo para arreglarme para tu madre, no quisiera decepcionarla.

-Después de detención nos vamos juntos ¿te parece bien?

-Perfecto.

-Ahora escupe lo que te dijo mi madre o te mato aquí mismo cartoncillo.

-Será para otra, palillo chino, nos vemos muchachas- se despidió y se fue rápidamente.
Suspiro pensando en lo que le pudo haber dicho mi mamá acerca de mí.

-Entonces... ¿ya fue a tu casa? - las tres me miraban con esa expresión que ya reconocía era la cara "aquí pasa algo"- ¿y va a ir a tu casa está noche?

-Emm si- Jazz y Daniel gritaron como locas, Terry fue más disimulada y sólo sonrió de lado.

-He Daniel ¿recuerdas nuestra apuesta?

- Si, pero no ha pasado nada... ¿¡o si!?- sus grandes ojos me miraban con demasiada intensidad.

-No y no va a pasar.

-Por favor Venecia, el tipo es listo, se gana primero a los suegros para luego no tener que lidiar con ellos después, ahora que ya completo eso seguro que hace otro movimiento.