Canción 21 1stp Klosr (The Humble Brothers ft. Jonathan Davis)

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Kyungsoo miró a la pequeña niña que había entre sus brazos que no dejaba de mirarlo. Llevaba ya cuatro meses como manager de Yoin y en esos cuatro meses, que supuestamente solo iba a ser unas semanas, vivía en la casa de Jongin.

Iba a dejar a la niña en la cuna pero cada vez que hacía el intento, la pequeña hacía el gesto de romper a llorar, y eso le partía el alma al chico.

-Te tiene totalmente controlado.

Kai se acercó a su hyung y le acarició el pelo mientras le ponía caras a su sobrina.

-Es solo que la habéis acostumbrado a los brazos.

-¿Y qué quieres que haga yo? Es culpa de Noona.

Kyungsoo caminó hasta la cocina con la pequeña en brazos y miró el calendario que había colgado con un imán en el frigorífico.

-El lunes tenemos una entrevista.

Se oyó un bufido desde el otro lado de la cocina, donde Kyungsoo se pudo imaginar que estaría Kai con los brazos extendidos en el aire como suplicando y con el rostro decaído.

-¡Por favor hyung! –Exclamó –Acaba de empezar mi maravilloso fin de semana y tú me recuerdas que el lunes tenemos que trabajar.

-¡Pues haberte metido en la universidad! Si no te hubieras dejado los estudios al terminar bachillerato ahora no tendrías que ir a "trabajar".

-¿Cómo sabes eso?

-Hablé con tu madre Jongin. Y me contó como decidiste dejar atrás tus estudios e irte de aventura a un país el cual desconocías.

-Estados Unidos es el mejor sitio donde se puede triunfar. Nosotros no triunfamos, pero sí firmamos un contrato con una compañía.

Kyungsoo se giró aun con la niña en brazos.

-¿Y para qué te ha servido? Si nada más llegar vuestro manager se largó –Kai iba a decir algo, pero Kyungsoo levantó una mano para detenerlo -. Pero mira el lado positivo –dijo con una sonrisa, se acercó a él y poniéndose de puntillas le dio un ligero pico en los labios -, si tu no hubieras hecho locuras, no nos habríamos conocido.

Kai se puso colorado y se giró para evitar que Kyungsoo se burlara de él:

-No...no digas esas cosas hyung... seguro que de una manera u otra nos habríamos conocido.

Kyungsoo sonrió y abrazó a la niña, aunque la verdad era que se moría de ganas de abrazar a ese niño mimado y engreído.



Al final de la tarde se dejó caer sobre el sofá. Era sábado, uno de los pocos días libres que tenía y a Kai le hubiera encantado pasarlo con su pequeña presa, pero a su hermana no se le había ocurrido otra cosa que largarse todo el finde y dejarles a la niña.

Y como su madre había ido a visitar a su otra hermana no podía dejarle la niña a ella y allí estaba Kyungsoo y Kai jugando a "papas y mamas".

Sintió una presión caer sobre él y cuando abrió los ojos se encontró con Kyungsoo abrazado a él. Se había acostado sobre su cuerpo estirado en el sofá y hundía la cabeza en su cuello, dándole pequeños besos que lo estaban provocando.

-¿Y la pequeña?

-La he dormido, por fin –esas últimas palabras las dijo con un eje de alivio.

Kai acarició la espalda del mayor, el cual ronroneó como un gatito y se frotó contra él, moviendo la cadera de forma provocativa.

-Pareces un gato en celo –le dijo con una sonrisa. Kyungsoo levantó la mirada y apoyándose sobre el pecho de Kai gateó hasta que ambos rostros quedaron a pocos centímetros.

-¿No te gusta que te provoque? –se incorporó quedando sentado sobre él y se quitó la sudadera y pronto le siguió la camisa.

Kai alzó una ceja divertido.

-¿No era yo el pervertido?

Kyungsoo bajó las manos desde el cuello, hasta el pecho de Kai, metiéndolas por el interior de la sudadera del chico para poder tocar su piel ardiendo.

-Será que me muero de ganas de tener un poco de acción –se mordió el labio cuando vio la cara del otro -, desde que tu hermana nos pilló no hemos vuelto a hacer nada.

Kai se incorporó y lo abrazo por la espalda con una mano mientras la otra iba a su nuca atrayéndolo a él. Sus labios se rozaban y sus respiraciones ardían en el rostro ajeno.

-Y de eso hace ya tres meses y medio.


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