Yoin

Canción 33 Hit me (SHINee)

El tiempo pasaba, y con él las buenas y malas noticias, las decaídas y subidas, los grandes acontecimientos, los primeros pasos y primeras palabras de una pequeña niña consentida. Las visitas inesperadas...

Era un frío día de invierno, tras el éxito del grupo en Japón los chicos celebraban en casa de Jongin y Kyungsoo una pequeña reunión. Ya era conocido que Chanyeol y Baekhyun estaban juntos en una relación formal, que Tao tenía un pequeño royo con el chico de la cafetería, que la salud de Luhan había mejorado y son eso Sehun tenía más alegría.

Que la compañía en la que trabajaban Baekhyun y Kyungsoo iba a hacer contratos oficiales a estos dos a pesar de ser aun estudiantes en prácticas. Y decir también que el grupo de su amigo había tenido una oportunidad de salir en uno de los conciertos de Yoin. Eso dejó a los fans alucinados, solo fue una vez pero fue suficiente para que L.C.J-B fuera la comidilla durante un mes entero. Los fans querían que tocaran otra vez con Yoin, y que el guapo manager de Yoin subiera también al escenario. Ya las fans sabían que entre Kyungsoo y Kai había una relación, lo sabían porque Kai no se cortaba un pelo en besarlo en público. Kyungsoo recordaba que la primera vez que lo besó delante de las fans, ellos iban por la calle. Iban a comprar pañales para EunHee y entonces Kai tomó la mano del mayor y lo besó.

Se dieron cuenta que las fans los habían visto cuando esa misma noche vieron la foto en todas las redes sociales. Kai lo admitió, al igual que dijo que EunHee no era "la hija que había tenido con una ex novia la cual se la había encasquetado a ellos dos". Contó en una rueda de prensa que su hermana mayor había fallecido había menos de un año y que él y Kyungsoo era legalmente sus padres.

Todas esas noticias solo hicieron que el grupo tuviera más éxito entre las adolescentes.

El que Kyungsoo saliera al escenario era porque se filtró un video en la red de Soo cantado en una de sus pruebas de canto de la facultad de música. Una compañera de clase subió el video con el título de "Kai boyfriend sing" eso ya valió para que en menos de una hora el video tuviera más de un millón de visitas.

Kai había prometido que Kyungsoo cantaría en el último concierto de ese año, pero Soo se había negado en rotundo. Él no quería cantar, le daba vergüenza.

Pero llegando al punto importante de la noche, los chicos estaban bebiendo, ya la niña se había quedado dormida y Kyungsoo estaba con ella arropándola en la cunita cuando escuchó que llamaban a la puerta. No había nadie más en llegar, ya estaban todos en casa.

Salió de la habitación al ver que llamaban de nuevo. La niña se había despertado con el ruido.

-¡Kai! Maldita sea abre la puerta –la niña se puso más nerviosa al escuchar el grito de su Papi.

Kai llegó alarmado, él no había bebido, tal vez una cerveza pero Kyungsoo le había prohibido beber algo más. El menor se acercó y besó la cabeza de su ahora hija y tomo a Kyungsoo de la cintura para ir con él a abrir la puerta, su pequeña niña estaba chupándose el dedo de forma adorable, Kai sonreía cuando abrió la puerta, pero esta sonrisa se fue al ver la persona que había tras ella.

-Jongin, tanto tiempo sin verte.

Kyungsoo miró al hombre frente a él notando que su rostro se veía muy familiar y la voz se le hacía reconocida.

-¿No me vas a dejar pasar?

Kai seguía mirando al hombre cuyas arrugas en los ojos le delataban la edad. Aquel hombre que hacía años que no veía ahora era prácticamente un desconocido para él. Miró a Kyungsoo con su anciana mirada.

-¿Tu debes de ser Kyungsoo verdad? –luego miró a la pequeña en sus brazos- Y ella es mi nieta.

¿Nieta?

-Ella es mi hija –Kai hablaba fríamente – ¿Qué quieres?

El Hombre lo miró con una pequeña sonrisa.

-¿No puedo venir a visitar a mi hijo y a mi nieta?

-¿Cuánto tiempo ha pasado ya? ¿No deberías de haber venido a verla hace tempo? Ella ya no es tu nieta puesto que es mi hija y según tengo entendido por la última vez que nos encontramos, yo no soy tu hijo. Solo soy un pobre maricón que te ha hecho la vida imposible.

-Jongin –Kyungsoo acarició el brazo del menor con delicadeza y este lo miró -, toma a la niña y ve dentro ¿sí?

Jongin lo miró no muy convencido, pero le hizo caso a su novio, este se quedó en la puerta mirando al padre de Kai y le sonrió.

-Me alegro de conocerlo al fin señor Kim.

-Yo también Señorito Do. Hemos hablado por teléfono muchas ocasiones.

-Si –Kyungsoo se hizo a un lado -¿le gustaría pasar?

-¿Mi hijo no se enfadará?

-Técnicamente la casa es mía hasta que Jongin no cumpla la mayoría de edad. ¿Quiere tomar algo?

-Solo un poco de agua, venía a hablar contigo Kyungsoo.

-Claro, acompáñeme a la cocina.

Kyungsoo dejó que el señor Kim entrase a casa y este fue a la cocina mientras el cerraba de nuevo la puerta, vio que Jongin se asomaba desde la habitación que ahora era suya y de la pequeña y lo miraba con sorpresa, Kyungsoo le hizo un gesto para que se tranquilizase y entró a la cocina.

-Quería entregarte los papeles de cuando mi esposa y yo compramos la casa, ella me los entregó por si a ella le ocurría algo antes que a mí, es el original, el que tenía mi mujer era la copia.

Kyungsoo asintió a las palabras del hombre. Le fue explicando más cosas y Soo le respondía a todo. Al parecer había una herencia a nombre de la hermana de Kai y otra de la madre, ahora todo eso pasaba a ser de Jongin, pero este no quería saber nada de su padre.

-Me voy a ir a China por mi trabajo y me gustaría que al menos mi hijo se quedara bien amparado, sé que lo cuidaras bien, al igual que mi nieta, y por eso quiero que tu cuides de esto hasta que Jongin cumpla la mayoría de edad.

Kyungsoo miró el papel detenidamente, había una gran cantidad de dinero, mas todavía, y los papeles de la casa ya los había firmado para que quedasen bajo el nombre de Kyungsoo y Jongin para siempre.

-Jongin estuvo hablando conmigo cuando me pidió estos papeles –dijo el señor Kim -, me dijo que quiere que la casa esté a tu nombre a pesar de que al cumplir la mayoría de edad, dice que quiere que todo lo suyo sea tuyo. Me contó demasiadas cosas las cuales me sería imposible reproducir –miró a Soo a los ojos -. Mi hijo te ama demasiado. De eso no tengo duda alguna.