My Bad Boy 2 [Eunhae +18]

Antónimos

Play a la música , cuando veas éste —> señalamiento ♩♫♩♫ 

-¡Eunhyuk!- gritó el peliazul con la garganta ronca, de puños cerrados a más no poder sobre las sábanas y una capa de sudor frío cubriendo su frente. Se retorcía con dolor aparente, pateando las cobijas y cerrando los ojos con fuerza, así como su mandíbula en total tensión 

El aludido despertó de inmediato ante tal grito, girándose para encontrarlo de aquella forma; por un momento sintió el frío recorrerle el cuerpo y al siguiente estaba incorporado, viéndole sin saber exactamente cómo actuar -Donghae -le llamó apenas audible, con la angustia atorada en la garganta 

El peliazul meneó la cabeza de lado a lado mientras sollozaba -¡Eunhyuk! -volvió a llamarlo y de pronto, fue fuertemente sacudido por manos ajenas

El mayor le tomó por los hombros, meneándolo con fuerza hasta casi levantarle de la cama. Sólo entonces, le vio abrir los ojos, aterrado, pareciendo extraviado e indefenso, fijando su vista en él con las lágrimas resbalando por cada lado de sus mejillas 

No supo qué decir, cuando sus frías manos le rodearon por el cuello y lo obligaron a pegarse fuertemente a su cuerpo en un abrazo desmedido. Sentía como Donghae escondía su cara en su hombro y continuaba llorando, temblor tras temblor. Se quedó estático

-Hyuk -le escuchó sollozar. Cerró las manos en puños, a cada lado de su cuerpo para no caer sobre él. Guardó silencio, hasta que supo el momento exacto en que la realidad le golpeó, sólo entonces su cuello fue liberado, dejando la sensación de vacío en él. El mayor se incorporó lentamente, mirándolo durante un segundo a los ojos, viéndolo atrapado entre él y la cama, entonces acabó por regresar a su lugar, aún descolocado 

El peliazul limpió los restos de sus lágrimas y respiró para controlar su pulso. Imágenes de su sueño le asaltaron, haciéndole morderse el interior de los cachetes para no sollozar. Cerró los ojos y sumido en el silencio incómodo, giró para verle un instante. 

Sus ojos se encontraron en la oscuridad de la habitación, le vio entre abrir los labios con la intención de mencionarle algo, pero finalmente volvió a cerrarlos y a girar, dándole la espalda para recostarse 

Donghae dejó salir un suspiro retenido. Sin darse cuanta, dejó de respirar cuando pensó que le diría algo. Pero no había sido el caso. Su respiración se normalizó y volvió a recostarse. Se concentró en las hebras rubias frente a él. >Las había visto muchas veces de la misma forma, compartiendo la almohada< Cerró los ojos dolido y se dispuso a continuar durmiendo. Inhalando cada vez su almizcle  

Al cabo de unos minutos, Eunhyuk escuchó la respiración acompasada. Sólo entonces, se rindió al cansancio

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Sintiendo la cabeza pesada, Donghae entre abrió los ojos parsimoniosamente, cerrándolos casi al instante en que capturó la luz. La noche anterior había olvidado cerrar las cortinas con lo agotado que estuvo. Soltó una exhalación aún dormitando y con las imágenes borrosas de sus sueños aún deambulando por su mente, se acomodó dentro de las cobijas. 

Las sentía cálidas. Últimamente habían estado tan frías que consideró comprar un calentador. Sin pensamientos firmes, volvió a sumirse en el sueño por un instante. No supo cuanto tiempo transcurrió, pero su cuerpo realmente lo necesitaba.

Cuando volvió en sí, se levantó sin ganas de la almohada, y con mayor consciencia, sintió algo húmedo bajo él. Bajó la mirada. Parecía haber babeado, entonces, la vergüenza irradió sus mejillas