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La gerente miró a mi equipo de trabajo y luego a los  otros equipos. No hablaba ni pizca de español y esa era la desventaja del último equipo. Mis manos sudaban de los nervios.

-Bien... se detuvo antes de proseguir. -Ustedes son buenos y lo digo en serio. Sin embargo, solo puedo elegir a dos equipos para que vayan a las oficinas corporativas en Los Ángeles. Esa estadía no es un juego chicos, de ella dependerá su estadía en esta empresa.

-El primer equipo es el de Amelia Freid y el segundo, el de Valentino Lares.

Mis compañeros dieron saltos de alegría y me daban abrazos. Les sonreí.

-Bien, todos regresen a sus puestos. Exceptuando a los dos líderes.

Ella se sentó y nos señaló que la imitáramos.

-¿Cómo se siente Miss Freid? -Tener solo 7 meses en la empresa y ser una líder de un equipo de 6 empleados y ahora ir a trabajar con los dueños por 6 meses.¿ Es maravilloso, verdad?

Asentí sin duda alguna. -En realidad es más que maravilloso. Es un sueño hecho realidad.

-Su creatividad y dedicación han impresionado a nuestros superiores.

Le hizo la misma pregunta a Valentino. El sujeto era todo un personaje. Siempre usaba rosado lila o morado. Sonrió y contestó con su desvanecida hombría. -Esta es la mejor noticia que recibo en toda mi vida.

La extranjera nos miró concentrada. -Okey, el lunes nos vemos en el aeropuerto. Vayan a recursos humanos para que les preparen todos. No quiero que me fallen.

Regresé a mi departamento y cuando me iba a sumergir en mi oficina, un pie detuvo la puerta. Por el color de los zapatos, me imaginé el personaje. -Qué suerte tienen los principiantes!

Alexa pertenecía al equipo de marcas y no había sido seleccionada para la estadía. -Lamento que no hayas sido seleccionada. Espero que el próximo año te tomen en cuenta.

Me sonrió a punto de querer matarme. -Mosquita muerta! Espero que fracases.

La dejé con la palabra en la boca y le cerré la puerta.

Edith aplaudió desde su escritorio. -Es una bruja! Se lo tenía merecido.

-A veces siento lástima por ella. De verdad.

Mi asistente negó. -Ella ha hecho de todo para que te saquen de la empresa y aún así, eres la mejor. You rock Boss!

Le sonreí. -Keep practicing! Espero que pronto tengas una mejor posición. El inglés es esencial para ello.

Bufó. -La verdad, no me entra para nada. Los Latinos no nacimos para eso.

-Yo soy de Marte? Soy dominicana, latina!

-Eres una excepción.

La dejé allí y continué con mi trabajo. Edith es especial.

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Abrí la puerta de mi casa y la mujer de mi vida estaba acariciando a Nuestro perrito. -Mamá!

La abracé y no pude evitar las lágrimas de la emoción.

Ella adivinó. -¿Te seleccionaron? ¿Irás a Estados Unidos?

Asentí.

Dio varios saltos. -Mamá, esta es nuestra oportunidad. Tengo el trabajo de mis sueños y me han ascendido. Trabajaré con los reyes de la industria manufacturera. Todo esto es gracias a ti...

COMO EL VINODonde viven las historias. Descúbrelo ahora