COMO EL VINO

¿Me recuerdas?

Nos había tomado dos días concluir con nuestros atuendos y estábamos complacidos con los resultados.

No sentía ninguna emoción por ir a la actividad. Tenía sentimientos encontrados con solo saber que era mi última noche en USA. No era una de las tantas personas que haría todo por dejar su país, yo amaba ser latina, ser dominicana pero para nadie era un secreto el nivel de inseguridad y de problemas económicos que nos invaden.

Quisiera poder quedarme aquí pero con mi madre. Si ella es lo único que tengo en este mundo, nunca la dejaría.

Valentino pasó a recogerme y se quedó boquiabierto. -Vine a recoger a mi compañera. ¿Què hiciste con ella?

Reí de sus idioteces.  Llegamos al lugar del evento y nos sorprendimos.

-Guau! Expresamos los dos al mismo tiempo. Cuantos divinos lujos. El escenario parecía un castillo sacado de un cuento de hadas. Lo único difícil era poder identificar a los invitados por los antifaces.

Le seguí el juego a mi compañero y nos sentamos a tratar de identificar a cada uno de los presentes.

-Aquel buenazo es nuestro vicepresidente. Ese se puede esconder bajo tierra y lo reconozco. Quién
pasa en alto esa figura y ese color! Emitió saboreándose los labios.

Lo miré incrédula. -Eres un depravado.

Prosiguió como si no me escuchara y esta vez peor. -Me imagino que aquel que está a su lado es el presidente. Mira es figura...

En serio tuve que mirar, no dejaría que el
Pecara solo.  Podía apreciar al vicepresidente y al otro individuo riendo y con una copa en mano.

-Si están de espaldas, cómo sabes que es el presidente?

Me miró como si no pudiera creer mi pregunta. -Porque yo a parte de trabajar también investigo. Mira que fácil es de identificar. Me señaló a los que estaban a su alrededor... -Todos están fijos en ellos dos, y pronto verás a las hermanas con ellos.

Era cierto. Y como si la hubiesen invocado, apareció la despampanante Jackie sin antifaz. Se acercó a ellos y Mateo intentó despeinarla como lo había hecho en otras ocasiones, pero el otro señor " el presidente" la defendió. Luego le indicó algo a los dos y ambos subieron al escenario.

Miré a Valentino y al parecer tenía razón.

Y el vicepresidente empezó con su discurso de bienvenida al lado de nuestra directora.

Muy buenas noches estimados compañeros de trabajo. Es un placer enorme poder celebrar nuestra tradicional fiesta navideña. Y lo mejor de este año es que aunque ande bien disfrazado nuestro Presidente nos acompaña. Bienvenido señor Presidente.

Toda la sala se levantó y le aplaudió como a tal rey. Y por Dios! Valentino tenía razón. El sujeto que podía medir unos 6 pies y 2 pulgadas, levantó gentilmente su mano y luego apretó su puño en forma de agradecimiento por el caluroso aplauso.

Fue el turno de Jackie. -Tal como ha dicho nuestro vicepresidente, es un placer tenerlo con nosotros. Gracias por asistir. 

De inmediato Jenney se colocó al lado del presidente y mientras Jackie continuaba con su discurso ellos hablaban.

Ha sido un año lleno de nuevos retos y frutos. Un año en el que tuvimos 9 grandes nuevos contratos internacionales y todos quedaron satisfechos. Es más, desde ya están solicitando trabajar las temporadas con nosotros.