Defensor

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Regresé a mi oficina y tenía en mi escritorio un ramo de flores precioso, con ese eran 6 en total los que me había enviado a mi casa mientras estuve enferma.

Leí la tarjeta y mi corazón se encogió.

<<Ya estás de regreso y espero que te cuides mejor preciosa. Déjame verte hoy.>>

Agradecía lo que estaba haciendo por mi pero no seguiría dando riendas sueltas a mi corazón. Iba a olvidar lo sucedido en el pasado. Aunque me doliera como nada en el mundo.

Y como había hecho todos estos días, no le contesté.

Mientras estaba en junta con mi equipo Ruth entro corriendo. -Jefa, El presidente y Jackie vienen hacia acá.

Los nervios me atacaron pero aprendí a controlarme. -Gracias por avisar. Y segundos después ellos hicieron su entrada.

-Buenas tardes Estimada. Saludó mi amor.

El me estaba estudiando preocupado y le indiqué con mi rostro de que ya estaba bien.

Respiró profundo y miró a Jackie. -Directora, podría dejarme a solas con la subgerente?

Ella asintió y me despedí de mis subordinados. -¿Qué cree que está haciendo señor?

Estaba tan precioso como siempre y cuando iba tomar mi mano lo rechacé. -Recuerdo como ahora que usted no desea ningún comentario sobre supuestas parejas en la empresa, se le olvida que las paredes aquí son de cristal y que desde que usted entra a esta planta todo el mundo tiene los ojos puestos en usted?

Levantó sus manos rendido. -Quiero darte un insignificante abrazo! Te extraño en mis brazos aunque sea un minuto. Expresó molesto.

-Necesito que se marche ahora.

Sin mirar atrás así lo hizo y llegó el gran día de la presentación al Presidente para luego ser mostrado a los clientes.

Mi madre me sonrió tierna. -¿No le devolverás la chaqueta a ese pobre hombre?

-No. Ese es y será mi único recuerdo de él.

Atrapó mi cara. -¿Por qué te mientes a ti misma? Haciendo esto lo único que haces es enamorarte más de él.

La miré rendida. -Tienes toda la razón pero aunque tenga el corazón triturado no puedo estar con alguien que no me quiere.

Y me sinceré conmigo misma. Creo que estoy perdiendo la batalla, lo amo demasiado. Eliezer es un hombre difícil de querer pero ya no puedo más.

———————❤️
Silvester entró a mi oficina y esta vez lo miré con rabia. -Te voy a rogar que cuando desees hablar conmigo que me lo dejes saber con Ruth. Esta no es tu oficina.

Se sentó como si no le importara mi reclamo y me sonrió. -Solo te quiero decir que tienen el plan de pasarte a uno de mis clientes y con eso te declaro la guerra. Si yo no soy elegido por el presidente, tú tampoco.

Se marchó y apreté mi cabeza.

Por primera vez fuimos citados al salón de conferencias presidencial y mi equipo estaba nervioso. Jackie nos esperaba allí y sentí celos al ver la mirada que le dio al presidente cuando entró. No quería ni podía competir con ella.

Sin embargo, él solo me miró a mi.

Jackie le entregó la carpeta que había sido supervisada por ella y él la revisó. Se acomodó como el rey que era y se dirigió a nosotros. -La carpeta es para mi, quién hará la presentación que se le entregará al cliente? Imagino que tienen la campaña anexa?

COMO EL VINODonde viven las historias. Descúbrelo ahora