Hombre Lobo o Vampiro? El amor decide

CAPÍTULO 21: Yo Gano

Narra Lucas:

Frank creyó que tenía el combate ganado, lo que no sabe es que puedo saber cómo atacara y cuando atacara Harold antes de siquiera pensarlo, esa es la ventaja de mi habilidad.

- ¿Qué pasa sanguijuela? – me miró Frank divertido - ¿No piensas atacar? –

Me provocaba, eso no lo permitiría, inhalé aire por costumbre, con una velocidad vertiginosa atrape a Harold por el cuello, con solo dos movimientos de dedos lo mataría, pero él se transformó en Lobo, lo solté pues la gran garganta del lobo me abrió de golpe la mano.

- Eso no te lo esperabas ¿Cierto? – tenía razón Frank, no pude leer su mente antes de que lo hiciera, pero ¿Por qué? – Fácil, hay algo que se llama protección mental y solo la otorgan los híbridos como yo –

¡¡Maldición!! Emily no me dijo que los híbridos son inmunes a los poderes psíquicos, y menos me menciono que podían proteger a uno de sus miembros.

- ¡¡Lucas!! – el grito de Harry, me trajo de vuelta justo a tiempo para esquivar el ataque de esa poderosa mandíbula, una mordida y estaría perdido.

- ¿Qué pasa garrapata? Creí que serias más difícil de vencer –

Me concentre, no dejare que un estúpido cachorro pulguiento me derrote. Comencé a correr en círculos, en momentos soltaba un zarpazo para desequilibrarlo. Le tomé de la pata delantera izquierda y la torcí rompiéndola de golpe, un alarido resonó en toda la pradera, Frank se veía sorprendido, no esperaba ese movimiento mío. Mis ojos se tornaron violetas, era hora de terminar con esta pelea, lo acabaría rápido y fácil. Lo levante con mi poder mental y comencé a estrangularlo, lo ahorcaba cada vez más fuerte, su vida se desvanecía lentamente. No podría evitar ser estrangulado, y menos desde esa distancia.

- Transfórmate en Medio Lobo, idiota – rugió Frank molesto, él hará cualquier cosa por que pierda, y eso no lo permitiré nunca.

Se transformó en Medio Lobo librándose de mi poder. La pelea estaba por comenzar, acomodó su brazo izquierdo para que sanara y pudiese moverlo. De nada le servirá. Corrió hacia mí, me tomó un poco desprevenido y agarró mi cuello, apretando fuertemente. Con sus uñas filosas corto uno de mis brazos, mi sangre se rego por el lugar.

- ¡¡No!! – Harry se levantó de su lugar, corría hacia donde estaba pero Frank lo detuvo con la mirada.

- Si interfieres, los mataremos a ambos – esa mirada fría.

- Ha…Harry… - volteó a verme – Es…Estoy bien – dibuje una sonrisa en mi rostro.

Con el brazo que me quedaba fracture su muñeca haciendo que me soltara mientras retrocedía. Tomé mi brazo cercenada, lo coloque en su lugar y con ayuda de un poco de sangre, volvió a unirse a mí.

- Puagg ¡Qué asco! – Frank volteó a otro lado.

Aproveche que Frank y Harold volteaban por las náuseas. Con una mano firme agarre a Harold por los cabellos tirando hacia atrás, su intento por zafarse era inútil, hacia su cabeza cada vez más hacia atrás, con mis piernas junte las suyas, hice presión sobre su espalda, sentí cada hueso de su espalda quebrarse bajo mi mano. Lo derrotaría fácil y rápido, pero se transformó de nuevo en lobo, grave error, lo levante de nuevo con mi poder, lo azote contra los árboles cercanos, no pudo soportar más y se transformó en humano, tan rápido como pude, lo tomé del cuello y clavé mis colmillos en él. Bebí su sangre, hasta la última gota, y mientras lo hacía veía a Frank a los ojos. Dejé caer el cuerpo sin vida de su subordinado.

- Yo gane – exclamé victorioso – Cumple tu palabra, lárguense –

Frank desapareció de mi campo visual, un grito ahogado a mi espalda hizo que abriera los ojos como platos, me gire lentamente.

- Lu…Luc…Lucas – me miró un Harry asustado.

Frank atravesaba a Harry por debajo del estómago con un guante bañado en plata, sacó su mano tan lentamente.

- No sanguijuela ¡Yo gano! – y desapareció.

Harry cayó al suelo con un golpe sordo, respiraba pesadamente. La herida humeaba, estaba siendo envenenado poco a poco, esa es la muerte más dolorosa de todas.

- ¡Harry! No me dejes - le dije desesperado.

- Lo... siento - dijo entre jadeos.

- ¡No te esfuerces! Te pondrás bien – comenzaba a llorar.

- Lucas... Te... Amo - dijo antes de cerrar los ojos.

- No Harry ¡No Harry! - sus latidos se volvían más lentos. Su vida llegaría a su fin.

- Lucas apártate - levante la vista y vi a Ryan. Un vampiro de 1.76 de ojos redondos medianos color café, sus labios delgados y tiernos, y una nariz pequeña y chata. Su cabello castaño claro le cae a los lados.

Me hice a un lado, Ryan se arrodillo ante Harry, tomo un pequeño cuchillo y se cortó la palma de la mano, dejó caer un poco de su sangre.

- ¿Se recuperara? - pregunte preocupado.

- Lo sabremos en un par de minutos -