La pelirroja

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Sean.

Era gracioso que ese par de chicas nuevas fueran tan diferentes. Llevaban dos meses en el instituto y la verdad que había entablado una buena amistan con Lucy. La otra chica, Mel era lo que viene a definirase con una chica un tanto suelta. Cada dos por tres la veías con un chico diferente pero a la vez sabía perfectamente que esos chicos no significaban nada para ella. Simplemente los usaba como juguetes ¿Quién se creía? No comprendía como Lucy era capaz de aguantarla. Porque ella era siempre tan cálida y agradable mientras que la otra a veces parecía salida de la Familia Adams.

-Sean, necesito que me hagas un favor.-era Lucy.

-Sí, claro ¿Qué pasa?

-Quiero que vengas a comer con Mel y conmigo.

-¿Estás de broma?

-No, será divertido

-Claro, sería divertido para ella si yo fuera la comida

-Exagerado, ella solo es complicada

-¿Para qué quieres que vaya?

-Para que os conozcaís

-No entiendo a qué viene esto...

-Quiero que sepa que puede ser amiga de un chico quiero que deje de hacer lo que hace. Ella no es mala y quiero ayudarla aunque crea que no necesite mi ayuda pero necesito hacerlo ahora o a saber como acabará.

-Pero creo que deberías buscar a otro. Yo no la caigo bien

-Eso me da igual, yo te conozco un poco y por eso se que puedes hacer que ella cambié un poco. Al menos por intentarlo...

Se la veía preocupada por su amiga y yo no me podía resistir a esa mirada que te gritaba ''POR FAVOR'' además, podía ser interesante conocer los secretos de esa misteriosa chica. Había dos opciones o me mandaba a recoger margaritas o me dejaba conocerla. En cualquier de los casos no perdía nada y me parecía divertido recoger margaritas.

-Vale, te ayudaré.

-¡¿Enserio?! 

-Sí aunque no sé si me arrepentiré

-Pues luego cuando acaben las clases ve al McDonalls la convenceré de ir. Por cierto, ¿la has visto?

-La última vez que iba la vi con Lucas.

-Ese chico me cae mal es un cabeza hueca.

-Esas son las víctimas perfectas para tu amiga, ¿no?

-No hables así de ella no la conoces, luego cuando hables con ella verás que no es así.

-Si tú lo dices... Me voy ya

-Sean, por cierto

-¿Qué?

-Consisté en que si tienes que acabar en su cama no sea algo sin compromiso. Si eso pasara antes enamorala.

-Creo que esto se está desmadrando

-Solo te advierto. Sabe como hablar a los chicos, adiós.

¿Por quién me tomaba? Estaba claro que Lucas caería con cualquiera pero la sola idea de que pensara que yo caería en su red me ponía enfermo. Fui al baño a mojarme la cara con la esperanza de que fuera todo una pesadilla. De la que entré salió Lucas, hablando del rey de Roma. Pero mierda Mel estaba también cuando entré. Era obvio lo que acababa de suceder y eso me ponía enfermo ¿Tan poco se quería esa chica? La verdad que la pelirroja era terriblemente sexy y si yo hubiera sido una capullo puede que hubiera aceptado su petición y hubieramos acabado en el baño. Era gracioso porque Lucy me lo advirtió por eso no pude evitar salir riéndome.

Cuando acabaron las clases estuve apunto de huir corriendo a mi casa pero le había dado mi palabra a Lucy y yo era un blando.

-Joder Sean no aprendes.- mierda, lo dije en alto y una señora se me quedó mirando. Perfecto ahora se creía que era un loco. Solo faltaba que alguien me diera en la espalda y me dijera ''Enorme tigre'' 

Llegué al McDonalls y ellas al poco, Lucy nos hizo el lío de desaparecer un rato y la verdad que con lo poco que hablé con Mel me hizo saber que la trama de su amiga no serviría. Luego fuera me sorpredió con su deseo de un globo.

-¿qué pretendes hacer?

-Preguntar al chico amablemente si me da un globo.

-¿Tú? ¿Amable? Ahora en serio, ¿qué pretendes hacer?

-Lucy recuerdame el por qué estoy aquí.

-Porque teníamos hambre

Lucy empezó a reírse mientras la pelirroja puso los ojos en blanco. Fue donde un chico del McDonalls y no sé lo que le dijo pero consiguió el globo. 

-Consigo lo que me propongo.

-Bueno chicos ahora que hacemos.

Yo no sabía que hacer o que decir así que opté por esperar a que la pelirroja se mencionase y por suerte no tardó demasiado.

--Juguemos a yo nunca he..- lo dijo mirándome a los ojos. ¿Se había vuelto loca? Igual le echaron algo raro a la hamburguesa y esperaba queyo me volviera una chica más. Un momento ¿lo próximo sería pintarme las uñas? ¿Hacerme mechas californianas? OMG se me iba la pinza.

-¿Estas de broma?

-Bromeo poco pero mi otra opción es subirme al tobogán y echar a todos los niños.

-¡Yo quiero!- estas dos chicas estaban locas

-Pero pobres mirar lo felices que son.

-¿Felices? Si parecen demonios chillones además de que viendo a estos niños los padres muy agraciados no deben de ser. Mirales 7 años y ya tienen cara de brujas y amargados. Menos McDonalls y más irse a ver Pepa Pigg o Bob Esponja.

Decía todo esto mientra subía, Lucy la siguió y yo con ella. La verdadque era gracioso ver que hasta disfrutaban. Lucy bajo la primera y yo esperaba a que Mel se tirara.

-No se lo que pretendes pero solo te advierto para mi todo es un juego. El niño bueno corre peligro de caer en mis redes.- examinó mi rostro mientras yo permanecía asombrado, se mordió el labio y se tiró

Nunca seré tu princesaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora