CAP. 3 [MI DIA A DIA]

2.3K 80 7
                                    

{ANNIE}

Suena la alarma de mi iPhone a las 5:20, hora a la que me levanto para comenzar de nuevo mi mediocre vida. Me levanto y paso por enfrente de un espejo, pero regreso a el para verme como amanecí hoy. Gorda, como todos los días, como lo que en el bachillerato me dicen cada mañana: obesa. Las lágrimas demandan salir de mis ojos, pero yo no lo permito, yo solo sigo caminando hasta mi armario para escoger la ropa que me pondré hoy. Tomo unos jeans oscuros ajustados, una playera celeste y un suéter blanco para ocultar mis marcas. Después tomo mis converse y voy directo a darme una ducha.

15 minutos después estoy fuera de la ducha y cambiada. Voy a mi habitación a ponerme una colonia de vainilla, y me aliso el cabello con un cepillo. Al terminar, tomo mi celular y bajo a la cocina. Me ruge el estómago de hambre, así que voy a frigorífico a ver que encuentro. Tomo el pan y el tarro de nutella, pero en ese mismo instante suelto el pan y la nutella al recordar las voces del bachillerato que me insultan. Todo termina en el piso. Al final decido prepararme un jugo, escojo entre las frutas y verduras una manzana y una zanahoria, lo pongo en el extractor de jugo y prendo la máquina. Cuando ya esta hecho, lo pongo en un vaso, y camino hacia la sala de estar. Ahí me encuentro con mi padre dormido, y por lo que puedo notar hay muchas colillas de cigarro en la mesa.

"Cuantas veces te he dicho que te harás daño." susurre para mi.

Tomé mi mochila con algunos libros de hoy, mi billetera con el pase del bus de la escuela (este pase hace que nos dejen subir gratis al bus) y un poco de dinero. Ya estoy lista. Camino hacia la puerta, salgo y busco las llaves en mi mochila. Cierro la puerta de la casa. Guardo las llaves y me cuelgo la mochila en el hombro izquierdo. Salgo de la propiedad de mi casa y comienzo a caminar por la banqueta pateando una que otra piedra. Llego a la parada de autobús, saco el celular y miro la hora: 6:34 am. Si el bus no llega pronto, tendré que irme corriendo, pues me tardo 10 minutos de mi casa a la escuela en el bus. Desbloqueo mi iPhone, voy a la carpeta de juegos, y escojo el CandyCrush. No soy muy fanática de ese juego pero es de los pocos que tengo y me gustan. Juego unos 6 minutos y llega el bus. Al subir muestro mi pase y me siento a primera fila. Es increíble que desde donde estoy yo se escuchan claramente lo que murmuran de mi:

"Creo que cada día esta más obesa."

"Mírala, ni maquillada sería bonita."

"¿Por qué no se muere de una vez?"

No lo soporto más, y siento ganas de llorar, pero aquí no, así que saco mis audífonos y pongo mi canción favorita: "Paradise" del grupo Coldplay. Hacemos todas las paradas de siempre, ya que muchos de mi bachiller toman el mismo bus. Y es lo mismo de todos los días: Suben poniéndome mala cara, insultándome o burlándose. Esta vez me entra por un oído y me sale por el otro, hasta que entra Zoe.

"¡Hola perdedora! ¿Cuántos kilos subiste hoy? Ja. Nadie te quiere, ¿por qué no te suicidas de una vez? Jajajaja". Esta vez es imposible ignorarla. Y estoy a punto de romper a llorar, pero me percato que hicimos una nueva parada, una que nunca habíamos hecho...

Víctima de Todos ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora