Diana
Abrí los ojos lentamente, me exalte un poco al ver que Louis no estaba me había quedado dormida en el sofá y no escuche mi alarma. Talle mis ojos suavemente y vi que en la mesa de centro habia una nota.
"Enana tuve que ir al hospital temprano, no quise despertarte. En la cocina deje pan tostado con mermelada y un licuado para que desayunes, te amo. Louis"
Una ligera sonrisa se dibujó en mi rostro, tome mi celular para ver la hora y la eran las 11:00am, no puedo creer que haya dormido tanto. Fui a la cocina y en efecto el pan tostado con mermelada y el licuado estaban ahí. Moría de hambre así que literalmente lo debore.
Lave los pocos trastes sucios y me fui a mi habitación mi vista se clavó en la chaqueta de Harry que colgaba de una silla. Rodee los ojos y me metí a la ducha, deje que el agua caliente se llevará mis malos pensamientos.
El día era soleado, asi que aproveche la oportunidad para usar un lindo short a juego con una blusa color vino y mis "típicos Converse blancos".
Aún era temprano yo entraba a la universidad hasta tarde así que aproveche la mañana para salir a caminar un poco. Salí del departamento. Camine por el pasillo rápidamente sólo así pude evitar mirar al departamento de Harry.
Cuando salí del edificio comencé a caminar si destino alguno, pensaba en las posibilidades de que Harry hubiera pasado la noche con Nicoll y lo patética que había sido por creer que Harry "era bueno". Caminaba por las calles hundida en mis pensamientos. Cuando por fin reaccione me encontraba caminando en unas calles estrechas que parecían laberintos, mierda creo que me perdí.
Trate de ubicarme con la mirada sin embargo nada me parecía conocido, jamás había andado por aquí antes. Un poco de pánico me invadió.
-¿Diana?.- la voz me era vagamente familiar gire lentamente para encontrarme con un rostro conocido.- Mierda, si eres tú...¿qué haces en esta zona?.-la mirada de Zayn estaba fija en mi.
-Zayn...ah...yo...creo que me perdí.- sonaba literalmente confundida.
-Vaya lugar que escogiste para perderte, este barrio es peligroso.- se acerco un poco más a mi.
-Si bueno, pensaba algunas cosas no em fije por donde andaba.
-Vamos te llevaré a casa, no es bueno que estés aquí y mucho menos sola.- le sonreí tímidamente y comencé a caminar a su lado.
Llegamos hasta un auto rojo ligeramente empolvado.
-Sube.- sonrió yo sólo asenti con la cabeza y me subí en el lado del copiloto.
Zayn echo a andar el auto, de cierto modo me sentía agradecida de haberlo encontrado de no ser así seguramente me hubiera perdido más. Avanzaba a una velocidad considerable cuando dos autos se cruzaron en su camino para cerrarnos el paso.
-¡Mierda!.- dijo entre dientes.- Diana pase lo que pase no te bajes del maldito auto.
-¿Q-Qué pasa?.- el nerviosismo y pánico se había apoderado de mi esto no pintaba para algo bueno.
Zayn no me respondió, rapidamente saco de la guantera una pistola similar a la de Harry y el pánico me invadió aun más, se fajo la pistola en la parte trasera de sus pantalones y bajo del auto, todo en cuestion de segundos. Cuatro tipos armados bajaron de los autos que nos habían cerrado el camino, ni siquiera se en que momento mi cuerpo comenzó a temblar.
Zayn se paró enfrente de su auto para enfrentarlos, no podía escuchar lo que decían pero estoy segura que no hablaban cosas lindas, Zayn tenía todo el tiempo la mano en su arma, lo cual me hizo pensar que estos tipos podían comenzar una balacera en cualquier momento.
La puerta del copiloto se abrió de golpe, un tipo obeso y desagradable me saco de un golpe del auto, intente forcejear pero fue completamente inútil.
-¿Qué tenemos aquí?.- pego mi cuerpo con fuerza contra el auto de Zayn y apuntó a mi cabeza con una pistola.- Eres muy bonita.- susurro en mi odio una sensación de asco y terror me invadieron.
-¡MALDITO HIJO DE PERRA MAS VALE QUE LA SUELTES!.- Zayn saco su pistola y apuntó al idiota que me sostenía, su voz era molesta e intimidante yo intentaba soltarme de su agarré pero era inútil.
-Vaya, vaya, veo que eres de interés.- dijo el tipo que me sujetaba.
-Si le haces algo Styles va a matarte y yo lo disfrutaré tanto.- Zayn sonaba intimidante sin embargo el otro tipo no parecía importarle.
-Dale a Styles mi mensaje, Ferguson pudo haber aceptado que mataran a sus colegas pero yo no aceptó que los haya matado.- ¿Quién mierda es ese Ferguson? Pensé.
-Ferguson es tu jefe, si se entera de esto igual te matará...
-Ya no sigo las ordenes de ese idiota, el autorizó que mataran a mi hermano y cobraré mi venganza.- la voz rasposa y molesta del tipo que me sujetaba me ponía los pelos de punta, el miedo invadía todo mi cuerpo y las lágrimas comenzaron a salir.
-Haces más fácil matarte.- dijo Zayn.
-Dale este mensaje.- el tipo jalo de mi cabello con fuerza y me azotó contra el suelo. Mis manos y parte de mi rostro golpearon el suelo con fuerza.
Los tipos que nos habían cerrado camino subieron a sus autos y se fueron. Zayn corrió hacía mi. Mi visión era borrosa el golpe me había aturdido por completo.
-¡DIANA!.- Zayn me alzó suavemente mis manos sangraban por los raspones al igual que mi mejilla.- Ese hijo de puta va a pagarla muy caro.
Yo seguía aturdida, Zayn me tomo en sus brazos y me metió al auto, rodeo el auto por enfrente. Subió en el y lo echo a andar a una velocidad muy elevada. Zayn tomo su celular para hacer varias llamadas y sin embargo lo único que pude escuchar fue "Dile a Tom que vaya al departamento de Styles".
El dolor de cabeza está matandome, puedo jurar que voy a desmayarme en cualquier momento. Al poco rato llegamos al edificio en el que vivía, Zayn me tomo entre sus brazos para bajarme del auto.
Entramos al edifico y me ayudó a subir cuidadosamente las escaleras. Por un instante creí que me llevaría a mi departamento pero no fue así. Del bolso de su pantalón saco una llave y abrió el departamento de Harry y me recosto sobre el sofá. El mismo sofá en el que me bese con Harry...
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GANSTER- Primera Temporada
Fanfiction•Harry• Sólo tengo unas cuantas reglas: 1. No puedes reterme. 2. No preguntes sobre mi vida personal. 3. No puedes pedirme explicaciones, razones o motivos del porqués hago las cosas. 4. Y la más importante, no me enamoro jamás.