GANSTER- Primera Temporada

Parte 30

Diana 

Harry se sentó en la mesa y comenzó a desayunar, sabía que los chilaquiles le picaban demasiado pero era demasiado bueno para fingir que todo estaba bien, impaciente y con una sonrisa burlona esperaba su reacción, su rostro se había puesto rojo y su frente comenzó a sudar ligeramente.

-¡MIERDA NO PUEDO MÁS!.-tomo el vaso con agua que había puesto junto a su plato y comenzó a beberlo desesperadamente, una carcajada llena de burla se escapó de mi.- ¡Oh quería Diana estas en serios problemas!.-dijo amenazante con una enorme sonrisa en los labios.

Me paré rápidamente de la silla y salí corriendo de la cocina, Harry salió corriendo tras de mi y comenzó a perseguirme por todo su departamento. La risa invadía mi rostro igual que el de Harry, en un movimiento ágil me atrapó por la cintura y ambos caímos al suelo, comenzó a hacerme cosquillas sin piedad alguna.

-¡JAJAJAJAJA! ¡NO, NO, YA PORFAVOR YA!.- Intente safarme de Harry pero la risa me debilitiba.

-Ah no señorita, ¿estabas muy divertida hace rato no?.- Harry siguió, una sonrisa encantadora y radiante invadía su rostro, jamás la había visto en él.

Harry me tenía en el suelo haciéndome cosquillas cuando el sonido de la puerta nos detuvo en seco, Harry y yo nos miramos a los ojos.

-¿Esperabas a alguien?.- susurre, el negó con la cabeza.

Harry se puso de pie y camino hacia la puerta para abrila.

-¡CARIÑO!.- Una mujer madura se colgó del cuello para abrazarlo.

-¿Madre?.-la voz de Harry era confundida, yo me levanté del suelo lo más rápido que pude cuando la mujer fijo sus ojos en mi.

-Oh cariño lo siento pensé que estabas sólo.-solto a Harry y ambos me voltearon a ver y por ese instante si me sentí avergonzada por andar en pijama.

-Diana...ella es mi madre Anne Cox, madre ella es Diana.- la voz de Harry era algo pausada por la sorpresa y los nervios.

-Hola linda mucho gusto.- camino hacia mi para abrazarme, yo correspondi su abrazo.

-Mucho gusto señora.- sonreí

-Mamá, no quiero ser grosero pero ¿Qué haces aquí?, ¿mi padre sabe esto?.- pregunto confundido.

-Ay cariño no tengo que darle explicaciones a tu padre, además quería verte ya que tú te olvidas que tienes madre y no me llamas.- lo miro sonriente.

-Ah...creo que debo irme.- interrumpí y Harry fijo su mirada en mi.

-¿No vives aquí con Harry?.-me miró.-¿No  viven juntos.-después miró a Harry.

-No madre, Diana vive en el departamento del fondo.-su sonrisa era algo nerviosa.

-Oh ya veo, bueno linda me dio mucho gusto conocerte, Harry nunca me presenta a sus novias.- me abrazo de nuevo y pude ver el rostro avergonzado de Harry.

Sali del departamento de Harry, el comentario de Anne me dejó pensando, Harry y yo no éramos oficialmente novios, ahora que lo pienso ni siquiera se que somos realmente. Entre a mi departamento y fui directo a la ducha deje que el agua caliente se llevará todos mis absurdos pensamientos.

Salí de la ducha y decidí usar algo cómodo, como estaba sola opte por no usar sostén, mis "amigas" necesitaban un respiro, me puse una playera playera blanca que me iba un poco grande y un pants azul con mis típicos Converse, deje mi cabello suelto para que se secara al natural.

Me fui a la sala y encendí el televisor, comencé a ver cuanta tontería pasaban en la tele. Pasaron casi tres horas cuando el sonido de la puerta me distrajo del televisor. Lo apague y fui a abrir la puerta. Una corriente de aire fría estremeció mi cuerpo, Harry estaba parado fuera de mi departamento, se había puesto sólo que ya se había puesto playera.

-¿Tienes frío?.-Una sonrisa de picardía se dibujó en sus labios al verme.

Baje mi mirada a al punto que el veía, mis pezones se marcaban en la blusa que traía puesta. Sentí como mis mejillas de sonrojaron y cruce rápidamente mis brazos sobre mis pechos y me hice a un lado para que entrará al departamento.

-¿Tu madre ya se fue?.-pregunté curiosa.

-Si, le dio gusto conocerte, no dejaba de preguntarme por ti.- rodeo los ojos y una ligera sonrisa se dibujó en mis labios.

-Es muy hermosa.- sonreí.

-No la veo mucho.- se sentó en el sofá y yo me senté junto a él.- Esta enferma ¿sabes?.- su rostro se tornó triste.- Hace varios años cuando yo era más niño, ella y mi padre tuvieron un accidente, ella se golpeó fuerte la cabeza y tuvo perdida pérdida de memoria, olvidó toda su vida olvidó todo lo que había vivido antes del accidente.-un suspiro se escapó de sus labios.- con ayuda y terapía logró recordarnos a mi y a mi padre, pero no lo que vivimos con ella anteriormente y sin embargo su memoria no funciona igual, a veces olvida cosas, las noticias fuertes o algo que le cause mucho impacto hace que le den grandes migrañas se ha desmayado por eso...ella piensa que vivo aquí por que voy a la universidad y piensa que mi padre es un comerciante de especias y textiles.-rodeo los ojos.- y que por eso viaja mucho....debes pensar que soy una mierda de persona.- me miró a los ojos, su mirada era triste y dolida.

-No, jamás pensaría eso Harry.- me acerqué más a el y puse mi mano en su mejilla.- Lo hacen para protegerla.- sonreí suavemente.

-Jamás le habia dicho a nadie de esto.- soltó un suspiro lleno de pesadez.

No podía creerlo, sin siquiera preguntarle Harry se había abierto de esta forma tan personal e íntima conmigo. Empezaba a conocer etapas de él que jamás había visto, este hombre es una persona tan maravillosa, pero la mala vida que lleva no le deja demostrarlo todo el tiempo.

Él miraba a un punto en el suelo, yo aproveché para contemplarlo, Harry Styles el chico peligroso al que todos temen, el chico que todas las mujeres desearían tener en su cama, el chico lleno de poder...estaba aquí sentado en mi sofá contándome cosas tan íntimas de su vida.