1864

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(NARRA MADISON):

1864-Mystic Falls, Virginia

-¡¿Qué?!- grité con todas mis fuerzas ocasionando que Yasamin se cayera de la silla- ¿¡Cómo que ha muerto?!- dije levantándome de la silla y acercándome a Lucas- ¡Te dije que la cuidaras!- grité- ¡No que dejaras que muriera en un incendio!- dije aventando lo primero que tenía en mi mano, un baso con whisky-

-Lo siento, Señorita Petrova, en serio, es que, todo fue una locura esa noche y…- no soporté y de un golpe le volé la cabeza, miré a los demás vampiros que se encontraban presenciando la escena-

-¿Alguien más quiere perder la cabeza hoy?- dije gritando y con sarcasmo en mis palabras-

-Señorita Petrova, el Señor Mikaelson ha llegado- dijo entrando la criada al salón-

-¡Lárguense!- le dije a los vampiros- Hazlo pasar, Sonia-

            Había convertido a varios vampiros para que me sirvieran. Sabía que Katerina había huido y decidí protegerla, ya que era el recuerdo físico de mi hermana Tatia. Charlotte empezó a aplaudir lentamente.

-¡Ese es el carácter Petrova!- me sonrió- ¡Eres toda una Petrova, hermana!- dijo abrazándome-

            Mi relación con Charlotte mejoró desde la última vez. Nos dedicábamos a poner el apellido Petrova en alto. Las hermanas Petrova, como nos habían nombrado, éramos de los vampiros que más temían, destruíamos pueblos y hacíamos atrocidades sólo por diversión.

-Madison- dijo Kol agarrando mi mano y besándola- Te ves preciosa- dijo acercándose al comedor donde estábamos - ¿Qué eran esos gritos?- dijo sonriendo y volteando a ver el cadáver- Creo que ustedes si saben cómo divertirse-

            A los segundos alguien vino y levantó el cadáver.

-Yasamin, Charlotte- las volteó a ver- Mis saludos, hoy se ven radiantes- dijo acercándose a ellas-

-Gracias Kol- dijeron ambas-

-Madison hacía unos corajes esta mañana- dijo Charlotte- Y ponía en su lugar a uno de sus vampiros- Kol rió-

-¿Qué hicieron ésta vez?- preguntó Kol-

-Dejaron morir a Katerina- dije enojada recordando lo estúpidos que podían ser los vampiros recién convertidos- En un incendio-

-Todavía no entiendo porque te empeñabas a protegerla- dijo Charlotte-

-Ella era como recuerdo a Tatia, bueno, lo era, al menos cuando era humana- dije- El peor castigo que pudo tener, era ser la Doppelgänger de Tatia, ella no se merecía esa vida-

-No es tu problema, Madison-

-Si hubieras conocido a Tatia, no pensarías lo mismo-

-¿Cuándo nace la siguiente?- preguntó Kol-

-Como en menos de 200 años- contestó Charlotte-

-Madison- dijo Damon Salvatore al verme- Necesito que me ayudes-

-¿Qué sucede Damon?- pregunté-

-Es Stefan, es todo un destripador-

            Me encontraba en los jardines botánicos de mi hogar, estaba tan concentrada en Katerina que nunca había sentido la presencia de Damon.

-Entonces es necesario llamar a una vieja amiga…-dije sonriendo-

-¡Lexi!- dije abrazándola- Tiene años que no te veo…-

-¡Porqué no te dejas ver!- gritó regresándose el abrazo- ¿Cuál es el problema?-

-Empieza con Stefan y termina con Salvatore- dijo Damon tras mío-

-Se que eres un vampiro y te gusta hacer esas cosas de aparecer y todo eso, pero vuelves a meterte en mis pláticas y te saco el corazón en menos de lo que parpadeas- dijo Lexi-

-Wow… es por eso que son tan amigas- dijo sonriendo- ¡Son idénticas!-

-Necesito que controles a Stefan- le dije a Lexi ignorando el comentario de Damon-

-¿Quién es Stefan?- preguntó Lexi-

-Un juguetito de Katerina- dije revoleando los ojos- Sólo porque ella es la Doble de mi hermana, sigo arreglando sus desastres-

-A ver, Damon, necesito que me presentes a Stefan-

-Encantado- dijo Damon-

-Lexi, necesitas usar un poquito más de violencia- dije al ver a Stefan amarrado-

-¿¡Porque hacen esto?!- dijo gritando- ¡No me importa su opinión!- gritó Stefan-

-Lo siento, pero es por tu bien, Stef- dije acercándome- Luego me lo agradecerás, eso espero- dije saliendo de ese lugar-

            Me recordaba en mis días oscuros, en los que yo misma tuve que causarme dolor para aprender. Ver así a Stefan Salvatore me daba lástima, solo era otro que tenía que pagar por los platos rotos de Katerina. Sólo porque esa mujer es la Doppelgänger de mi hermana no la mato, porque si no, ella habría muerto años atrás, y no ahora en un incendio.

1899

            Me encontraba en Luisiana, Yasamin había decidido irse por un tiempo y luego nos volveríamos a ver. Eso me dejaba sola con Charlotte. Kol y yo no nos veíamos desde 1895.  Justamente hoy me encontraba en el parque principal de Baton Rouge.

-Kol- salí corriendo y lo abracé- No esperaba verte tan pronto- dije sonriendo-

-Sabías que te necesitaba-

-He oído de ti-

-Bueno, he estado en África y digamos que no me gustaba quedarme sin hacer nada-

-A mí tampoco, pero estos años he estado más calmada, decidí darme un poco de tranquilidad, ahora que no tengo que preocuparme por un Doble suelto- dije dándole un beso-

            Entramos a mi carrosa y fuimos a mi mansión. Al entrar vimos a Niklaus en la sala.

-Hermano- dijo Kol dándole un apretón de manos- No te veía desde ¿1700?-

-Mas o menos- dijo sonriendo- ¡Madison!- dijo acercándose para brindarme un abrazo, a lo que yo me permanecí seria-

-No esperaba verte, Niklaus- el río- Vamos directo al grano-

-Sabías donde estaba Katerina y no me dijiste-

-¿Para que? ¡¿Para cazarla?!-

-Así es-

-No iba a dejar que hicieras eso-

-Lo sé, Madison, pero en verdad eres una gran molestia-

-No la llames así Niklaus- dijo Kol acercándose a el- Te vuelo la cabeza, hemano-

-Quiero verlo- dijo Klaus sonriendo-

-Además, tu me debes algo Niklaus- dije interponiendome- Katerina no fue sacrificada hace 300 años, como me prometiste- dije acercándome más- Mientras yo este de pie, nunca podrás tocar a ninguna Doble Petrova-

-Entonces…- dicho eso me lanzó un golpe y choqué con la pared, me acerqué y le enterré un vidrio de un frasco que había roto al caer, el gritó y empecé a profundizar-

-¿Qué demonios quieres?- dije en su oído- Niklaus…- dije en lo que seguía profundizando hasta que empecé a meter mi puño-

            El se aferró de mi mano y empezó a aplicar fuerza para que sacara mi brazo, pero yo me negaba, Kol sonreía al igual que Charlotte. Mientras yo ponía más fuerza. Estaba furiosa, no solo su madre había matado a mi hermana, sino que ahora el quería matar a toda su descendencia. Entonces algo me tomó por atrás y me sacó volando haciendo que me golpee el cuello y me lo fracture.

Love Since HumanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora