(NARRA MADISON):
Esta mañana había sido de lo más extraña, estábamos desayunando todos juntos. Charlotte, Tatia, Kol, Rebekah, Klaus, Elijah, Hayley, Marcel y yo. Todos en un profundo silencio. La tensión se podía cortar con el filo de una hoja.
-Huele a… sangre- dijo Kol y todos respiraron profundamente y hallaron el olor-
-¿Se cortaron?- preguntó Rebekah a Hayley y Tatia- ¿Se lastimaron o algo? ¿Voy por banditas?-
-¡Maldición!- gritó Tatia parándose y cuando volteé a verla su vestido blanco estaba manchado-
Los hombres rieron y nosotras sonreímos sintiéndonos incómodas por parte de ella.
-La Regla- sonreí- ¡Qué momentos!-
-Por lo menos ahora hay pañales para que no te manches y estés más limpia- dijo Charlotte-
-Se llaman toallas femeninas- nos corrigió Hayley-
-Pañales- repitió Charlotte- Antes lo que teníamos era un lago y ya-
-Gracias a Dios, como vampiro no tienes la regla- lo dije en un tono demasiado alto como para que Tatia pudiera escuchar-
-Olvídalo, Madison- me dijo Charlotte mientras seguía comiendo su desayuno- No se convertirá en vampira-
-¿Por qué no?- pregunté-
-¿Por qué si?- me contestó con una pregunta, resoplé-
-Dejemos que ella lo decida- le sonreí-
-Ya te contestó- me sonrió-
-Dejamos la respuesta pendiente-
-No, tú la dejaste pendiente aunque ella ya te contesto-
-Pues esperaré pacientemente a que cambie su respuesta, yo sé que lo hará-
-¿Por qué quieres convertir a Tatia en vampiro?- me preguntó Rebekah-
-Vida eterna, familia eterna- le sonreí- Y muchas otras cosas-
-No tiene sentido- murmuró Elijah- Arruinar la bella humanidad que ha podido conservar. Ni de broma-
-No pasé mil años tratando de revivirla como para que se muera en unos 80- mentí, sería como en menos de un año-
-¡Hayley!- Tatia gritó y Hayley se paró y fue tras ella-
-¿Todavía no aprende a ponérselos?- preguntó Rebekah-
-Madison no es buena explicando- contestó Charlotte-
-No es como que alguna vez me haya puesto uno- contesté lógica- No tengo necesidad- le sonreí- ¿Qué dijiste, Tatia? ¿Cita de depilación?- me paré diciendo en voz alta para que Tatia me escuchara aunque ella no me había llamado- ¡Los vampiros no tienen que hacer eso!- le contesté y me fui tras ella-
-Va a tratar de todo, ¿no es así?- preguntó Klaus a Charlotte-
-Sí; ya trató explicándole, ahora restregándole en la cara lo positivo, yo sólo estoy esperando la parte violenta para intervenir- contestó- No se va a detener hasta que Tatia se convierta-
Estaba a punto de entrar al cuarto de Rebekah para agarrar un cambio para Tatia cuando mi teléfono sonó mostrando -Damon -como identificador de llamadas.
-Cariño, ¿ya me extrañan?- sonreí sarcástica contestando el teléfono-
-No soy Damon- escuché la voz de una mujer con un acento distinto-