LOVE IS A BITCH

Capítulo 12

Its a new day
But it all feels old.
Its a good life
That's what I'm told.
But everything
It all just feels the same
And my high school: it felt more to me
Like a jail cell, a penitentiary.
My time spent there
It only made me see

Good Charlotte - The Anthem

Derek mantiene sus ojos sobre mí durante cinco segundos. Cinco segundos que se me hacen eternos, en los que yo no se qué hacer, y simplemente me quedo paralizada intentado desviar la mirada de esos dos enormes ojos azabache. Cuando por fin decide apartarlos, se sienta en el sillón marrón del otro día y yo evito volver a mirarle para no tener que lidiar con esa mirada penetrante.

-¿No te ibas de fiesta con Eddy y Danny?- pregunta Liam, dejando su confortable postura abrazado a Nate para sentarse erguido en su sitio.

-No les han dejado entrar y nos hemos tenido que ir- responde sin tan siquiera mirarle a la cara mientras juguetea con el piercing de la ceja.

-Y, ¿dónde se ha quedado los otros dos?

-Les he dejado atrás, estarán al llegar.

La sala se queda en silencio. Derek se levanta dirigiéndose a la cocina y coge una cerveza de la nevera, la abre y después de tirar la chapa a la basura vuelve al mismo sitio de antes. Intento mirar con el rabillo del ojo sin que él se de cuenta. Desde lo de ayer no he cruzado palabra con Derek y, por lo que veo, no tiene muy buen humor, así que se me hará difícil poder entablar ningún tipo de conversación con el moreno.

En medio de todo el silencio, se escucha el susurro de Liam pidiéndole disculpas a Nate, supongo que él tampoco se esperaba que viniera toda la tropa. Esta le sonríe y le da un corto beso en la comisura del labio... Esta amiga mía me va a matar un día de lo romántica y ñoña que se pone con su querido amorcito.

Liam coge el mando y pone la tele para romper un poco la increíble tensión que se esta acumulando en este pequeño salón. Hace zapping una y otra vez y al final se decide por dejar un Reality Show de unos cuantos adolescentes de 18 años, los cuales se dedican a salir de fiesta, emborracharse y desmadrarse, básicamente un "sexo, drogas y rock and roll".

Me quedo embobada mirando el Reality. No me interesa ni una mierda, pero prefiero tragarme esta basura antes que cruzar mirada con nadie. Después de quince minutos viendo el programa, se me empieza ha hacer interesante, así que estoy completamente sumida en la historia de desamor que tienen dos de los participantes. De repente, el timbre suena y me saca de mi ensimismamiento. Liam se levanta a abrir y Nate aprovecha para decirme el buen culo que le hacen esos pantalones a Liam. Intento no mirar por respeto a mi amiga, pero mi instinto de cotilla me traiciona y le miro las nalgas. Nate tiene toda la razón: esos pantalones se adaptan perfectamente al cuerpo de Liam haciéndole un culo de lo más atractivo y que nunca me hubiera esperado que tendría. Nate me pilla mirándole el culo a su novio y me da un codazo acompañado de una carcajada, yo me rio y le guiño un ojo juguetonamente.

Por la puerta se asoman Eddy y Danny, que entran a casa y, como era de esperar, los dos saludan a la vez. Estos chicos hacen todo al mismo tiempo, no les entiendo, pero me hacen mucha gracia. Son como un matrimonio, solo que sin sexo. Por lo que Nate me ha contado, al pasar bastante rato con Liam, son inseparables y tiene discusiones de pareja cada dos por tres, aunque no aguantan más de una hora sin hablarse. Estos chicos...

-¡Joder, no me digas que teníais plan romántico...!- exclama Danny dejando un paquete de tabaco sobre la encimera.

-Eh... Sí, bueno, solo queríamos ver una película tranquilos- responde Liam frotándose la nuca.