Capítulo 15: Rumores

7.7K 415 100
                                    

Estaba a punto de subir a mi habitación, pero oí un golpe en la puerta.
Probablemente era Jazmín que olvidó algo. Abrí y no me equivoqué. Allí estaba, de pie, en él tope de la puerta, excepto que no estaba sonriendo.
Entró y la expresión en su rostro me hizo empezar a retroceder, sonrió y cerró la puerta.

-"Ja-Jazmin? ¿Que estás haciendo?"- yo tartamudeaba. La mirada en sus ojos... No podía describirlo. Estaba totalmente negra, sus pupilas dilatadas. ¿Que significa eso...

Me quedé sin aliento cuando mi espalda golpeó contra la pared, estaba atrapada y ella estaba más cerca, pero me daba una sonrisa tranquilizadora.... Me cautivaba.

Más y más, camino hasta que estuvimos cara a cara. Mi respiración se cortó cuando su rostro se acercó al mío y sus ojos fijos en mis labios.
Trague saliva y ella se rió entre dientes, era ronca y muy diferente a la que había es escuchado antes.

-"Jazmín, ¿Que estás..."-

-"Shhh"- sonrió y puso su dedo en mis labios. -"No podemos decirle a nadie Florencia"-

Abrí la boca para hablar, pero mi voz se perdió, quitó su dedo de mis labios y los pasó por los suyos. Mi mandíbula se abrió mientras la veía lamer sus labios y luego morderse el labio inferior,manteniéndolo allí un tiempo. Lamió una vez más y cerró la boca.

Miré a sus ojos verdes oscuros y me encontré inclinándome más cerca, el magnetismo entre nosotras era demasiado grande como para resistirnos por más tiempo. Oí su risa antes de cerrar los ojos y nos.......

____________________________

La alarma del teléfono sonó en la mesita de noche, indicando que era hora de levantarme.

Me senté furiosa, todo fue un maldito sueño.

Grité y contuve la almohada en mi cara, tal vez si me ahogaba en éste momento seria lo mejor. Una segunda alarma sonó y no tuve más remedio que lanzarla lejos con todas mis fuerzas, nunca había estado tan furiosa antes.

Era tiempo de prepararme para ir a la escuela. Me puse maquillaje y decidí usar un pequeño vestido negro. Una vez más, por cincuenta mil vez, me miré al espejo para comprobar que lucía caliente y sexy, tomé mi bolso y salí de casa.

Tan pronto como llegué, comenzaron las clases y fue un día de mierda, lo habitual, que por supuesto sólo mejoraría cuándo viera a Jazmín. Mi corazón se detuvo cuándo no la vi en el almuerzo, me llené de pánico.
Liz chasqueo la lengua en respuesta a mi actitud y vi a Daniel pasando por nuestra mesa, me pareció extraño, siempre se sentaba conmigo, pero en lugar de eso me lanzó una mirada sucia. ¿Que mierda te he hecho? Liz también lo vio y se encogió de hombros sin dejar de comer. Frunci el ceño tratando de recordar si había hecho algo grosero o desagradable hacia él, pero no había nada.

Me recordé de hablar con él en la clase de Jazmín antes de que ella llegara.

__________________________________

-"Yah, ¿que te pasa? ¿Por qué no te sientas conmigo en el almuerzo?"- Me enfrenté a él. Estaba sentado en su silla mirando al frente, con una mirada arrogante en su rostro. -"Estoy hablando contigo! Por lo menos ten la decencia de mirarme"- estaba empezando a enojarme, por lo general es un idiota,  pero no actuaba de esa manera.

-"Vete a la mierda"- gruñó.

-"¿Que carajos te he hecho Daniel? Vamos dime!"-

Jazmín entró y vio la tensión. -"Hey, ¿Que está pasando aquí?"- preguntó mirándome.

-"Pregúntele"- dijo él, mientras golpeaba el escritorio con sus dedos y se ponía de pie.

-"Florencia?"- ¿Esta pensando seriamente que tengo algo que ver con esto?

Mi maestraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora