"Sorpresas de la vida"

Capítulo 5: "Un romance secreto"

Ya había pasado tres semanas desde el inicio del romance secreto entre el par de jovencitos pelinegros. Tres semanas durante la cuál ambos ante sus amigos se portaban como siempre como los mejores amigos pero los pocos minutos que podían estar solos se tomaban las manos o se miraban con dulzura.

Gimnasio Dragón:

Un par de jovencitos pelinegros se encontraban sentados en el piso de un gimnasio platicando mientras esperaban la llegada de sus amigos.

¿Cómo qué vinimos muy temprano, no?, decía Milk sonriendo.

Si, dijo Gokú sonriendo también al tiempo que la pelinegra lo miraba y sonreía.

¿Pasa algo?, ¿tengo algo en la cara?, dijo Gokú llevando sus manos a su rostro.

No, claro que no tonto, dijo Milk sonriendo.

¿Entonces porqué me miras así?, dijo Gokú con una calida sonrisa.

Solo veo que Dieciocho y Bulma tenían razón, eres muy lindo, no sé como no pude darme cuenta, decía Milk sonriendo.

Pues tú también eres muy linda, eres bella en realidad, dijo Gokú sonrojándose.

¿Gokú, puedo hacerte una pregunta?, dijo la pelinegra con dulzura.

Claro hermosa, pero que tal si me la haces mientras vamos por los implementos al deposito, creo que es mejor que vayamos avanzando a sacar las cosas para que cuando todos lleguen no haya demora, dijo Gokú.

Si, es cierto, vamos por las cosas, dijo Milk poniéndose de pie para ir junto a su novio secreto al deposito.

¿Qué me querías preguntar Milk?, dijo Gokú sonriendo.

Quiero saber, ¿por qué no has vuelto a darme un beso?, dijo Milk con voz temblorosa de los nervios.

¡Ah¡ era eso, ahora te respondo, dijo Gokú abriendo la puerta del pequeño depósito para que la pelinegra entrara primero.

¡Gracias¡ dijo Milk pasando junto al jovencito de cabello alborotado.

De nada, dijo Gokú cerrando la puerta.

¿Qué nos llevamos para el entrenamiento?, dijo Milk.

Creo que los sacos y colchonetas, dijo Gokú mientras la pelinegra se dirigía a tomar un saco.

Si tienes razón, dijo Milk.

Milk, dijo Gokú haciendo que la jovencita detenga su avance.

Si, dijo Milk.

Responderé tú pregunta, dijo Gokú.

Que bueno, dijo la pelinegra girando a ver al jovencito de cabello alborotado.

Pues no e vuelto a besarte primero porque pensé que a lo mejor tú no querrías que lo volviera hacer y pues no quise forzarte a ello aunque yo muera de ganas por volver a besarte y segundo no hemos podido estar en ningún lugar a solas, dijo Gokú dulcemente mientras se acercaba a la pelinegra.

Pero ahora estamos solos, dijo Milk sonrojándose.

Lo sé, dijo Gokú al llegar frente a ella mientras tomaba sus manos y acercaba su rostro al de la jovencita para posar sus labios sobre los de ella y darle su segundo beso aunque era su primer beso desde que se hicieron novios.

Los pelinegros aún con torpeza se besaron por algunos minutos luego de los cuales debido a la falta de oxígeno se separaron y sonrieron mutuamente.

Me imagino que con la practica será mejor, dijo Gokú sonriendo.

Si, dijo Milk sonrojada.

Será mejor llevar los implementos al aula, ya deben haber llegado los demás, dijo Gokú dulcemente.