Una de las empleadas de la casa de Milk entraba a la habitación de la pelinegra tras haber estado tocando la puerta de la misma por varios minutos.
Señorita Milk, dijo la mujer alarmada mientras se acercaba a la jovencita que estaba en el piso.
La mujer al tocar la piel fría de la jovencita empezó a gritar pidiendo ayuda.
Ayuda, ayuda, ¡por favor¡ la señorita Milk, la señorita Milk se nos muere, decía la mujer alarmada haciendo que algunos de los empleados que estaban realizando la limpieza cerca de la habitación de la pelinegra fueran inmediatamente a esta mientras otros fueron por le padre de la jovencita.
Señor Ox, señor Ox, decía un par de empleadas mientras tocaban la puerta del despacho del gigantesco hombre.
¿Qué sucede?, dije que no me molesten que estoy esperando una llamada importante, decía el señor Ox.
La niña, la niña, decía una de las empleadas con voz entrecortada.
¿Qué le paso a mi hija?, dijo el señor Ox desconcertado poniendose de pie.
La niña esta como muerta en su habitación, dijo la otra empleada.
¿Qué?, eso no puede ser posible, llamen ahora mismo una ambulancia, dijo el señor Ox al tiempo que se iba a la velocidad de un rayo a la habitación de su hija.
Ya lo hicimos señor, decía la otra empleada.
El señor Ox llego a la habitación de la pelinegra al tiempo que una ambulancia se estacionaba frente a la casa de los Ox.
Habitación de Milk:
Mi niña, dijo el señor Ox tomando en sus bazos a la jovencita al tiempo que miraba sin comprender el la ropa húmeda de su hija con un liquido amarillento con rasgos de sangre a nivel de las piernas de la jovencita.
La ambulancia llego, dijo una empleada que venía junto a un equipo de enfermeros y dos médicos que traían consigo una camilla.
Súbanla, dijo el médico al tiempo que los enfermeros con ayuda del señor Ox colocaron a la pelinegra en la camilla.
Aún está viva pero su pulso es muy débil, dijo una de las enfermeras que estaban allí.
Pobrecita, es tan jovencita, dijo otra.
Canalícenle rápido una vía recuerden que está en juego dos vidas, dijo el médico dejando desconcertado al padre de la pelinegra que creyó haber escuchado mal mientras caminaba tras la camilla que trasportaba a su hija a la ambulancia.
¿Dos vidas?, pensaba el señor Ox.
¡Eh¡ si, si, dijo una de las enfermeras.
Señor, suba, dijo uno de las enfermeras mirando al gigantesco hombre que estaba junto a la ambulancia desconcertado.
Las enfermeras y enfermeros junto al médico trataban de mantener con vida a la pelinegra mientras el padre de esta, miraba desconcertado al médico colocarle un extraño objeto en le vientre de su hija mientras miraba una pequeña pantalla que había en la ambulancia.
Sus latidos son muy débiles, dijo el médico mientras observaba algo en el monitor que el padre de la pelinegra no logro a ver.
Minutos después:
La ambulancia se detuvo en un hospital, la pelinegra fue bajada rápidamente con ayuda de la camilla y llevada a emergencia mientras el señor Ox se quedaba con uno de los médicos.
Necesitamos que nos firme unos documentos el estado de su hija es muy grave, ella podría perder al bebé, dijo el médico dejando boquiabierto al gigantesco hombre.
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"Sorpresas de la vida"
FanfictionCuando se es joven se comete muchas equivocaciones llevados por la adrenalina de vivir la vida y pues con el tiempo la vida puede darte algunas sorpresas. Gokú y Milk tuvieron un romance de adolescentes producto de ello ambos llegan a tener un hijo...