"Los monstruos son reales, los fantasmas también, ellos viven dentro de nosotros , y muchas veces ellos ganan"- Stepth King
Ahí estaba yo, viéndolos como un idiota. Por la poca luz que apenas había en el lugar a causa de la espontanea lluvia no podía ver claramente que sucedía en realidad allá adentro y esperaba con toda el alma que lo que creía que veía fuera una simple y cruel alucinación. Harry estaba acorralando a Albert mientras lo besaba sin más; o eso creía.
-¿Se le ofrece algo?- El profesor habló de pronto sin si quiera voltear a verme.
-¡oh!- exclamé como si me acabarán de dar un dura bofetada hacía la realidad.-No, no. Lo siento, siento interrumpir...
No esperé más antes de azotar la puerta de nuevo mientras mi corazón latía con rapidez por la adrenalina. El agua me cayó de un golpe sobre la cabeza congelándome toda la piel sin importarme realmente que fuera a pillar un resfriado o algo por el estilo, solo quería huir de ahí, quería alejar esa jodida imagen de mi cabeza. No me gustaba sentirme así. La gente pasaba corriendo a mi lado, mirándome con extrañeza por mi cara de idiota bajo la lluvia, otros me veían un tanto preocupados por estar caminando a la mitad de un diluvio como si nada mientras que todos huían a cubrirse del agua. Sólo quería salir de ahí...
Caminé hasta un pequeño parte que se situaba a unas cuantas calles y al primer algo que se viera lo suficientemente grueso para aguantar mi peso me subí y ahí fue cuando me di cuenta que no sólo era lluvia la que me mojaba mi cara. Estaba llorando con amargura.
¿Por qué me dolía tanto?
¿Por qué me sentía de esa forma?
¿Por qué me oprimía tanto el pecho?
¿Cómo llegue a esto?Narra Albert.
Sabía totalmente que Harry me estaba besando contra la pared del salón con pasión, lo sentía claramente toda su boca sobre la mía, pero no podía reaccionar...Mi cuerpo no reaccionaba a ninguna orden de empujar a Harry, estaba en otro lugar.
Estaba hace mucho tiempo atrás con Harry, no, con Noah.- ¿Los vas a dejar morir ?- pregunté intrigado mirando al ángel rubio al lado mío, aquella gran ciudad pronto desaparecería sin que ellos pudieran comprender por qué, sin nadie que les advierta, sin nadie que los salve en realidad.
-Si, no es mi deber para el volcán de Pompeya, pasará lo que tenga que pasar.- Contestó dándose la vuelta sin más totalmente desinteresado de la cantidad de muertes que habrían en el lugar.- Tendrá mucho trabajo que hacer Azrael.*
- Ey, ¿No quieres follar?
- los ángeles no "follan", hacen el amor - sonrió como un enamorado que sueña que el amor de su vida llegase para estar juntos para siempre, me provoco asco.- y solo lo hacemos con nuestras parejas
-¿Quieres ser mi novio?- pregunte ya enojado de tanto jodida cursilería, sabía que me amaba, ante tal propuesta no se negaría aunque estuviera la obvia razón de que solo le quería como objeto sexual.
-Sí, pero quiero que esto sea a escondidas...
- Aw, que lindo.- Comencé burlón a andar a su alrededor entre risas maliciosas.- Me dijiste que sí, aun sabiendo que tal vez te cueste tú entrada al cielo.
- ¡Por eso te estoy diciendo que a escondidas!- Gritó con temor mirándome, respiraba agitado por el miedo.- Azthart, no quiero ser un caído...
- Bien, será a "escondidas"...
Ese recuerdo fue más fuerte de los demás que se revelaban ante mis ojos abrumándome, me daba la sensación de que en cualquier momento me colapsaría ahí.
-Eres mio- susurró en mi cuello mientras comenzaba a besarle lentamente.
A la misma velocidad en la que me había bloqueado volví a reaccionar, me di cuenta de la terrible situación en la que me hallaba y todo lo que sucedía y sucedió a mi alrededor: Esteban había entrado y vio la escena del beso con Harry, vio que no hice nada y Harry me estaba tocando.
-¡Suéltame!- Lo empujé con una fuerza que ni si quiera yo conocía, lo hice volar estrellándose con mesas y bancas en un fuerte y estrepitoso sonido. Poco me importó y salí corriendo haciendo que mi preocupación aumentará al ver la lluvia que cernía sobre mi cabeza.
Las ideas me llegaban a la mente a medida que corría sobre la lluvia. Me daba cuenta de que mi vida antes de olvidarle fue una vida llena de malicias, me di cuenta que poco me importaban los sentimientos, me di cuenta que realmente sentía repulsión a todo ser humano que no fuera Esteban.
Esteban...
Ese chico había entrado como una estrella en mi vida y aunque no supiera quién realmente era yo, lo que sí sabia era que a ese chico yo le había conocido antes, yo había estado con él antes, yo había tocado su piel antes. Yo sé que ese chico lo amaba antes, la pregunta era, ¿Lo amaba ahora?
Pronto lo visualice dándome alivio de que estaba bien, corrí donde él hasta quedar bajo la copa del árbol igual.
-Esteban, oye yo...lo siento. No quer-
- ¿Por qué me pide perdón?- me interrumpió abruptamente sin si quiera dirigirme la mirada - no tienes porque hacerlo.
-¿Esteban? ¿Oye, estás bien?
-Volvamos a casa, tengo frío.- Contestó con simpleza sin contestarme nada en realidad.
Sí no arreglaba nada, se iría todo a la mierda.
*Azrael: Arcángel Azrael, significa "a quien Dios ayuda", se le conoce mejor por ser el "Ángel de la muerte" porque acompaña a los difuntos al otro lado.
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Me enamoré de un demonio. (Yaoi)
Fanfiction-¿Crees en Dios?- preguntó curioso ladeando la cabeza, prestándome la suma atención mientras caminaba sigiloso a mi dirección moviendo la cola de un lado a otro tal y como una serpiente. -No.- mi respuesta no fue más que un susurró de pánico conteni...