Capítulo 15: Pequeñas cosas.

23.1K 2.1K 229
                                    

"Podre ser un demonio, pero yo disfrutó de lo que hago"- Alucard-hellsing

¿Estoy haciendo bien?,  ¿Por que lo hago?,  ¿Lo hago por mis padres o lo hago para vengarme de Albert?, ¿Qué pasara ahora?, ¿Ya no tengo vuelta a atrás?

Realmente no quiero salir con Annie, no quiero tener que ver nada con ella si era posible, por las simples razones de que:

1.- No me gusta Annie.

2.- Me gusta Albert.

3.- Soy gay.

4.- Annie es una cínica.

5. NO QUIERO SALIR CON ANNIE..

Me quedé viendo la puerta podrida y corroída por el pasar del tiempo de la iglesia, adentro estaba Annie quien se encargaba de vigilar el lugar y donde dormía en realidad. Estiré mi mano pero sorpresivamente unos grandes brazos me envolvieron y un aliento cálido golpeó mi nuca

-No lo hagas- Susurró con agonía, pronto comencé a moverme para tratar de liberarme de él porque sabía que si él me miraba a los ojos...simplemente me arrepentiría.

-¡SUÉLTAME!-le grité al borde del llanto.

-No.- Me sujetó más fuerte, mis brazos me pulsaron al cortarme la circulación de tan fuerte que me sostenía, era obvio que no iba a poder irme de él pero...

-¡Albert, me lastimas! 

De pronto de un movimiento rápido me sujeto por los hombros para verme pero ¡no quería que viera mi debilidad en mi mirada!

¡Pum! 

Sentí como sus labios se habían posado en los míos con fuerza, no se movió, no fue un beso lindo, pero fue lo suficiente como para calmarme y darme cuenta que el sentía algo; aunque sea algo muy pequeño en su corazón por mí. No hizo ningún movimientos de labios, solo fue un beso de piquito que duro mucho; él se separó y me miró a los ojos.

-No lo hagas...

-Pero tu lo hiciste...- respondí a la defensiva sin siquiera pensarlo.

-Harry no es nada para mí.

-Annie tampoco lo es para mí.- Sonrió un poco, como calmado, como si realmente un peso de encima se le quitara ante mis palabras.

-¿Fue tu primer beso?

-Qué te importa.- Avergonzado de mi poca experiencia baje mi mirada al suelo calmado, aun tenía la cara húmeda por las lagrimas y segura mis ojos estaban terriblemente hinchados.

-Me alegro.- Rió. 

Narra Albert.

Caminábamos juntos en la soledad de la calle, sostenía su mano contra la mía más que nada para brindarle aunque sea un poco de calor. El beso había sido de los más simple (me quede bloqueado ante la textura de su boca), pero estaba seguro que de toda mi vida, ese había sido el mejor de todos.

-Entonces, ¿estoy perdonado?- Le sonreí para ponerle incomodo.

-¿Crees que si no te hubiera perdonado estuviera tomándote la mano?

Caminé al parque junto a él a pesar ya ser de noche y que un frío que calaba los huesos nos abrumara, me senté con el en una banca aún con nuestras manos unidas.

-¿Por que querías salir con Annie?- pregunté tratando de no sonar molestó- Digo, ella es hermosa y todo, pero...eres gay ¿no?

-Mis padres quieren que consiga novia.- Alzó la mirada al cielo, su piel brillaba de una manera encantadora ante la poca luz que había. El ambiente se hizo tenso al momento en que dejamos a hablar, así que le saqué el tema sin mas.

- Me encantan tus ojos de colores, el azul y el lila te quedan a la perfección. 

-"Uno en un millón"- repitió.- Es lo que siempre me dice.

-Sin duda eres especial.- Tomé su mano besándola con cariño, su mirada se abrió tanto de sorpresa...-¿No quieres ser el sentido de mi vivir?

-llegan las fujoshis directioners y le pegan.-
Sí antes Albert le cantaba la canción de "Little Things" de One Direction.
Pero ahora..no sé, no me gustaba como se veía esa escena en que porque sí le cantó la canción. 

Lo siento :c
Pero ahora se queda sin canción, lel


Me enamoré de un demonio. (Yaoi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora