CAPITULO 21

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-. Buen día Regina ¿podrías traerme un café y comunicarme con el reportero de la revista? – le pido a mi secretaria al entrar a mi oficina

Esta mañana definitivamente estoy de mejor humor ¿y como no estarlo? Si luego de la tarde y noche de ayer me cambio la vida, jamás pensé que de verdad podría estar con Diego, se que fue un error estar con el mejor amigo de West y aunque parezca que fue por venganza la verdad es que no, como le dije a él quería tener por lo menos la decisión de con quien iba a estar y aunque no se si hice o no lo correcto me siento bien y feliz; por otro lado aunque Diego me asegurara que solo sere para el se bien que no es así West en algún momento me forzara a acostarme con él y no tendre mas remedio que hacerlo y además aunque Diego también dijo que será solo mio no puedo creerle ¿Cómo hacerlo? Momentos antes de estar me había confesado su amor por una mujer y luego va y esta conmigo y por si fuera poco tiene una larga lista de mujeres esperando su oportunidad para estar con el así que ¿Cómo puedo confiar en que será solo mio? Desde hace mucho deje de creer en el príncipe azul, ese que es fiel a la mujer que ama y que jamás la defraudaría por lo tanto lo mejor es que mantenga al margen todo sentimiento hacia él, claro que al ser nueva en esta situación no se como hacerlo y lo mejor seria hablarlo con las chicas para que me den algún consejo, por lo que rápidamente les envio un texto pidiendo que nos reunamos en el piso de Amanda esta tarde, pasados unos minutos me responden encantadas de poder tener una tarde de chicas.

-. Señorita, aquí esta su café y el reportero esta en la línea de espera – me informa Regina entrando a la oficina, asiento y coloca el café en el escritorio

-. Gracias Regi – tomo un pequeño sorbo a mi café y luego tomo la llamada

-. Buen dia señor Montes

-. Buen dia señorita Meyer es un placer escucharla – habla y puedo notar la emoción en su voz

-. Le llamo para informarle que la entrevista será aplazada para el dia de la boda, como entenderá tengo una agenda ocupada y ya solo faltan unos días para la boda por lo que no dispongo de mucho tiempo libre ¿le parece bien? – le pregunto pero suena mas a una orden, ese dia será mejor ya que así estaremos West y yo juntos y no me acribillaran solo a mi con preguntas incomodas

-. Entiendo Señorita, por mi encantado ¿para cuando es la ceremonia? – inquiere

-. El dia 12 de Julio Señor Montes, le agradecería total discreción ya que solo su revista tendrá el derecho de entrada y no quisiera un tumulto de reporteros en la entrada de mi casa

-. Por eso no se preocupe sere totalmente discreto – responde

-. Bien, hasta entonces – me despido y corto la llamada

Una vez finalizada la llamada me enfoco en los pendientes de los hoteles y aunque no son muchos no deseo tener nada acumulado ya que ya falta nada para la boda y quiero tomarme unos días lejos de aquí, de West, de todo en realidad, unas dos horas mas tarde cuando me dispongo a dar un recorrido por el hotel entra Regina con enorme y hermoso ramo de rosas violetas a mi oficina

-. Señorita llego este arreglo para usted – dice y lo coloca sobre mi escritorio, me mira y antes de salir me da un guiño, supongo que de seguro debe de saber que son de West y al yo pensarlo de pronto me siento un poco mal luego de lo de ayer, ella sale y cierra la puerta, rápidamente busco la tarjeta y me sonrojo al leerla

"Cada rosa palidece estando en tu presencia, recuerda siempre sere tuyo y tu siempre seras mia, no veo el momento de tenerte nuevamente entre mis brazos"

Eras Tú - EditandoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora