«Neighbors» (Namjin)

Capítulo 37.

Bastardo idiota.

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—Perdón...—Dijo de repente, llamando la atención de Jung.—Perdón por no llamarte, no quería llenarte con mi mierda también.—El brillo de sus ojos lucía apagado, su rostro se encontraba menos radiante, sus facciones eran menos alegres NamJoon realmente la estuvo pasando mal pensó Jung con sólo analizarlo un poco. Le brindó una sonrisa comprensiva.

—Ah—Suspiró.—NamJoon eres un idiota. Sabes que puedes contarme todo lo que te atormente ¿entiendes eso? Somos amigos, siempre estaré allí para ti. Aún cuando seas obstinado y no quieras.—Esto último lo dijo dando referencia al hecho de que NamJoon nunca le comentó nada. Por su parte el moreno se sintió conmovido y le sonrió siendo enternecedor.

—¿Por qué ustedes son tan buenos conmigo cuando yo he sido un idiota?—Cuestionó bajando su mirada, sintiéndose avergonzando de repente, porque él era tan afortunado y no lo había notado hasta ese momento.

—Porque los amigos hacen eso. No ofreces tú amistad con el objetivo de que la otra persona te dé lo que tú le das, simplemente lo haces porque es algo que te nace del alma. Es...—Se detuvo meditando mejor sus palabras.—es lo mismo en una relación. Das todo de tí, porque te nace, porque quieres hacerlo, aún si la otra persona se encuentra indispuesta. Aún cuando la otra persona se marcha...porque tienes la esperanza—NamJoon captó de inmediato que rumbo estaban tomando las palabras de HoSeok.
—Nunca le dí a Jin menos que eso.

—Pero ¿a qué precio NamJoon? Lo destrozaste al irte.—No era un reclamo, de hecho la voz de HoSeok sonaba completamente calmada.

—Lo sé, demonios lo sé. Por eso no merezco nada de él.—Su voz salió algo quebrada, el recodar a Jin esa última noche realmente lo atormentaba, tan roto y débil. NamJoon sacó lo peor de SeokJin, y él se odiaba por ello.

—Debes hablar con él.

—Yo no haré tal cosa.—Se vió alterado, el joven frente a él tomó su mano queriendo transmitirle confianza.

—NamJoon, necesitas hablar con él. Ambos lo necesitan.—Y él sabía que su amigo tenía razón. Él debía hablar con Jin, pedirle perdón por todo el daño causado y decirle lo mucho que aún lo amaba.

—Jin jamás te echaría a patadas NamJoon. Su corazón es demasiado noble para hacer tal cosa.—Kim sabía que lo que decía no era una total calumnia, y apreciaba el intento de HoSeok de darle ánimos para hacerlo, pero al mismo tiempo se sentía inquieto porque no estaba muy seguro sobre que ese hecho no sucedería.

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Cafetería And here, Jin y Ken pasando el rato. 4:37 pm

Días después SeokJin había estado totalmente ocupado con su trabajo. Iba de un lado a otro, Ken ya se encontraba estresado debido a Jin ya que él le transmitía su jodido estrés. Últimamente de lo único que hablaba era de trabajo.

Allí está el viejo Jin pensaba el hombre cuando se iban por ahí a tomar algo y Jin se mantenía contándole sobre su día laboral. Ken odiaba admitir que extrañaba al Jin enamorado, porque ciertamente era divertido verlo estando en las nubes. Lamentable para su amigo la caída a la realidad fue bastante dolorosa, pero al demonio con eso. Se veía que Jin lo iba superando, a su manera, pero lo hacía y eso era lo que importaba ahora.

Jin tuvo semanas difíciles, realmente lo fueron. Habían días en los que se dedicaba a llorar en todo el día, luego tenía otros días donde se llenaba de valor y mandaba todo al demonio, pero sus lágrimas siempre regresaban. Llegó a tal punto que él no sabía como mejorar la situación de su amigo, él simplemente se quedaba allí ofreciéndole su hombro para llorar. Cuando Ken tenía a Jin en su regazo llorando como si no hubiera un mañana, en lo único que podía pensar era en matar a NamJoon.