Es Nuestro Secreto. [KookV]

XXVII: Razonando indiferencia.

Narra JungKook.

Sin darme cuenta, los días habían pasado más rápido de lo que acostumbran a hacerlo. Y eso, no sé hasta que punto es bueno.

Desde aquel día, donde metí la pata a niveles insospechados en aquel ensayo... Nam y Jin han estado algo distantes, o más bien este último. 

El mayor ha sido indiferente con todos nosotros, no nos dirige más de las palabras necesarias, y mucho menos las miradas. Él moreno es el que más sufre respecto a el comportamiento del mayor.

Ya me he planteado varias veces disculparme, mi impertinencia ese día, fue demasiada. Y estoy más que seguro de que todos lo notaron... En especial Jin.

- Amor, ¿Crees que deba hablar con Jin? - despegué mi mirada de la pantalla cinematográfica, esperando una respuesta por parte de mi novio. 

- Haz lo que te parezca correcto, cariño. - dirigió su mirada exclusivamente a mi persona. - De todas maneras, no lo veo necesario... Simplemente está enojado con Namjoon por no haberlo defendido. - se encogió de hombros, restando importancia a sus propias palabras. 

- Es exactamente por esa razón que quiero disculparme... Con ambos. - terminé diciendo aquellas palabras con un tono más intranquilo del que me hubiera gustado. 

- Sea lo que sea que hagas, estaré contigo, te lo aseguro.  - de alguna manera, esas palabras me habían brindado confianza. 

- ¿Lo prometes por el dedito? - pregunté, mientras alzaba mi dedo meñique en su dirección. El sonrió con ternura y asintió, imitando mi acción. 

(...)

Ya pasadas medianoche, ingresamos en silencio a nuestra casa.

Dejando nuestros abrigos en la entrada y luego adentrándonos en la sala, donde estaban los chicos... Todos excepto Jin. Como venía siendo, desde aquel día.

Suspiré con un deje de pesadez y culpabilidad.

El apretón en mi mano, que Tae me provocó. Me dejó en claro que sabía como me sentía y porqué lo hacía.

Me sonrió, tratando de tranquilizarme. Más no logró nada más que una sonrisa de mi parte.

- Hey! - saludó Namjoon. - ¿Qué película vieron?

- No recuerdo el nombre... Pero actuaba Will Smith. - contestó Taehyung.

- Oye Nam, ¿Jinnie Hyung está en su habitación? - pregunté.

- Sip... Cenó con nosotros y se encerró ahí. Nuevamente. - suspiró.

Un pinchazo en mi pecho.

Culpabilidad.

- Iré un segundo con él... Ya regreso.

Sin esperar una respuesta de su parte, caminé en silencio hasta la habitación del rubio, una vez en la puerta, largue el aire que tenía retenido en mis pulmones, buscando tranquilidad en dicha acción. Aunque resulto inútil.

Toqué.

Esos tres segundos de espera se hicieron eternos a mi parecer, pero cuando la puerta se entreabrió, el aire y la tranquilidad, regresaron a mi de manera inmediata.

- ¿Si? - él fue el primero en hablar.

- Jin... Emm, ¿Podemos hablar? - pregunté, mientras mi mano, era llevada a mi nuca, debido al nerviosismo que me provocaba la situación.

- Claro, pasa. - se movió dejando paso a mi persona.

Una vez dentro, hablé. - Quería disculparme por la otra vez, no debí haber dicho que eras un novio celoso... No es de mi incumbencia. - no pude mirarlo a los ojos luego de ello, tenía mucha vergüenza.

- No te sientas culpable... Sé que lo dijiste en broma, me ofendió más el hecho de que Nam no me defienda. Y si es verdad, está perfecto, así piensan de mi. - elevó sus hombros en despreocupación. - Solamente trataré de no serlo.

- Espera... ¿Eso has estado haciendo? Fingir que no te importa lo que NamJoonie Hyung hace... - ahora todo calzaba.

- En voz alta suena peor, pero si... Es exactamente eso. - dijo avergonzado.

- Él está mal por ello, piensa que quieres terminar... Jin, quizás no es lo mejor. - la situación estaba empezando a ser controlada más fácilmente, ahora que se la razón de su indiferencia.

- ¿Él te lo dijo? - una ola de temor se reflejo en sus ojos.

- Lo he escuchado cuando hablaba con Tae, la otra noche en mi habitación. - elevé mis hombros con despreocupación.

- Oh...

- De nuevo, esto no es de mi incumbencia... Pero de mi punto de vista, podrías hablar con él y aclarar las cosas, o no estar tan indiferente con nosotros. Es extraño. - hablé.

- Quizás tengas razón. - razonó.