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-Sólo hay un problemita.

-Es cierto.

-¿Qué?

-Hiro, tenemos hasta el amanecer para irnos y encontrar a tu hermano.

-Si le pones límite de tiempo, ya deja de ser divertido.-dijo con sinceridad.

-Lo sé, pero hay que hacerlo.

-Bien, adelante.

Siguieron avanzando por el puente hasta llegar al otro lado, dónde Héctor notaba las miradas de el resto por estar con dos niños vivos.

-Ah...¿Miguel?-dijo Hiro nervioso.

Miguel volteó y vió a Hiro cerca de Dante, el cuál lamia y mordía sus patas, que se tornaban de colores vibrantes.

-Tranquilo, ya se hizo algo normal.-se acercó a el riendo.

Para terminar el nuevo diseño de Dante, crecieron unas casí pequeñas alas.

-¿E-Es...?

-Un Alebrije, ¿no amigo?

Dante ladraba y ponía en marcha sus alas, demostrando ser algo torpe con ellas.

-Necesitas un poquito de práctica amigo.-Hiro rió y acarició la cabeza del perro.

Luego de un rato, comenzaron a buscar a la famiiia de Hiro. No tenían muy claro por dónde empezar, pero sabían que tenían que ocultar el hecho de que dos niños vivos estaban merodeando por la Tierra de los Muertos.

Héctor, como hizo con Miguel la primera vez que estuvo allí, a ambos les pintó la cara y les puso las gorras de sus chalecos, un disfraz sencillo.

-Esto está loco.-Hiro miro su rostro.

-Descuida, te acostumbrarás.

-Ya lo creo, bueno... Al menos...-suspiró.-Al menos Estoy contigo...

Miguel no dijo nada, al escuchar lo que dijo Hiro, se quedó congelado.

* * *

-Imelda, ¿Estás segura que Héctor puede con dos niños vivos?-preguntó Victoria.

-Si.-afirmó.-Pero me preocupa el muchacho.

-¿El amigo de Miguel?-dijo Rosita.

-Si... Hay algo en él, que no me agrada...

*-*-*-*-*

Un Héroe MusicalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora