"SILENCIO".

"Capítulo 24".

VENTICUATROAVO BLOG:

"El miedo reapareció, entonces, volví a temer, volvieron los gritos ensordecedores de mi mente, volvió el temblar de mi pulso con tan sólo el recordar. Pero ese es el punto del miedo, deja de serlo cuando lo enfrentas ¿Me explicó? Bien, así lo hice, ese miedo que me revolvía las entrañas ahora forma parte de mis fortalezas. Todo empezó así;

Una mañana fresca, todo marchaba a su rumbo, excepto que hoy debía salir a hacer unos trámites y mis padres estaban en su día de descanso, por ende, Grecia en esta hermosa mañana estaría en manos de sus amados abuelos. 

Bien, alimenté a Grecia, me cambié y me dispuse a salir. 

Caminaba por las despobladas comenzando a poblarse calles de Buenos Aires, sin mucha importancia a lo que pasase a mis alrededores, con los aislantes del mundo que la mayoría utilizamos, si, los auriculares. Mis pasos iban al pie de Amy Winehouse, para ser exacta de Back to Black, cuando de repente alguien toca mi hombro haciendo que parase de caminar; 

- ¡Luz!-. Escuche demasiado bajo. 

Voltee, y hubiese deseado no haberlo echo nunca. 

- Ma..te..o-. Dije tartamudeando.

- Sí, el mismo-. Suspiro.- Necesito que hablemos, por favor-. Dijo aún tomándome del hombro.

- No tenemos nada de que hablar vos y yo Mateo.-Lo miré.- ¿Me puedes soltar?-. Dije dudosa.

- Si, lo siento.- Me soltó inmediatamente.- Por favor, serán sólo unos minutos-. Dijo con una mirada suplicante. 

- ¡Esta bien, lo haré!-.Hice un gesto de manos.- Pero yo pongo las condiciones-. Dije con un nudo en la garganta. 

- ¡Por supuesto! ¿Cuáles serían?-. Dijo.

El nudo de mi garganta se acrecentaba aún más, con cada segundo que pasaba. Pero mis alarmas me gritaban; "NO DEMUESTRES DEBILIDAD", "NO PERMITAS QUE SE DE EL GUSTO DE VERTE TEMER", "TEN FORTALEZA". 

-Uno; hablamos en un sitio con gente en él. Dos; luego de hablar desapareces-. Dije enumerando las condiciones con mis dedos. 

- Acepto tus condiciones.- Miro hacia abajo.- Vamos a una confitería.- Dijo.

No dije nada, comenzamos a caminar. ¿Qué quería?,¿Por qué diablos volvió a aparecer?, quizás hoy sólo fue una coincidencia, pero espero no volver a coincidir en nada con este sujeto. 

Llegamos a la confitería, ambos pedimos un café para así poder hablar sin sentirnos incómodos.

-Y bien, ¿De qué diablos quieres hablar?.- Dije mientras él ponía azúcar a su café.

-Tranquila, hay tiempo para saber el porque volvemos a cruzarnos.- Dijo sonriendo. 

- No, yo pierdo el tiempo si se trata de vos-. Blanquee los ojos.- Así que, habla rápido porque no pienso estar contigo más de una hora.- Dije mezclando mi café.

- Quiero hablar de lo que sucedió Luz-. Dijo y me ahogué.

-¡Vaya, cuanto tiempo y por fin lo recuerdas!-. Dije irónicamente.

- No ironices-. Hizo una pausa.- Tus amigas, me han dicho que tuviste un hijo y que es mío-. Dijo mirándome. 

- Primero; no son mis amigas. Segundo; es hija y no es tuya, es mía-. Dije imitando su acción. 

- Sé que soy el padre-. Dijo.

- No eres el padre Mateo, eres quien la engendro-. Dije fríamente. 

- Bueno, la engendré, pero mi punto es que soy por lo tanto el padre y quiero conocerla-. Dijo cruzándose de brazos.

- ¿¡CONOCERLA!?-. Dije exaltada.

- Tengo derechos Luz-. Dijo seriamente. 

- Derecho tenía yo de denunciarte por abuso sexual, idiota-. Dije.

- ¡Pero es tan hija mía, como tuya Luz!-. Dijo. 

- Es mía.- Hice una pausa.- No tienes el derecho de nada que sea referido a ella-. Dije.

- ¡Luz, por favor, no seas egoísta!.- Dijo. 

- ¿Yo egoísta?-. Arquee las cejas.- Egoísta eres tú, que pasaste encima de la suplica, del no, de mi inocencia y sólo pensaste en tu maldito pene y sus ganas de tener sexo.- Hice una pausa.- Abusaste de mí, Mateo. No te importaron mis suplicas de piedad. Me condenaste a un silencio que va a hacer eco toda mi vida-. Suspiré.- Y no, no tienes ningún derecho sobre mi hija; ni de conocerla ni de creer que es tuya, porque tal vez el esperma fue tuyo, pero ella no merece una persona como vos en su vida-. Dije. 

-Perdón Luz-. Dijo finalmente luego de unos minutos.- Quisiera que todo hubiera sido diferente.

- No necesito tu perdón Mateo. Yo también lo quise pero no fue,ni va a ser, ya es demasiado tarde para las falsas condolencias. No hay nada que pueda cambiar el pasado ni mucho menos reformar el presente. Las cosas son como son y tu arrepentimiento no cambia en nada  toda la mierda que hiciste sigue siendo la misma-. Suspiré.- Necesito que desaparezcas, porque para criar a mi hija no necesito nada que venga de vos ni siquiera que la reconozcas. Desaparece como en año nuevo, esfúmate. Y no te preocupes, Grecia tiene amor de sobra y de vos no va a saber nunca nada -. Dije secamente. 

No respondió, bajo la mirada. El depredador había dejado de ser depredador y se convirtió en la presa de una verdad demasiado ensordecedora que lo lleno de miedo. Y la presa había dejado de ser presa y se convirtió en la depredadora de todo eso que alguna vez la atormentó e incluso de ese chico que alguna vez ella amó. 

De todos modos, sabía que él no diría nada. No tenía que decir; entonces, yo tampoco tenía nada que hacer en ese sitio aunque tuviese que decir muchas cosas, ya no valía la pena. 

- Yo invito.- Puse el dinero en la mesa.- Ten una buena vida Mateo-. Dije poniéndome de pie para irme directo a casa.

Desde que salí de allí, no voltee a mirar en ningún momento porque quien mira hacia atrás no está totalmente dispuesto a olvidar. Pero yo si quería olvidar, todo aquello que hasta el día de hoy no había dejado de sangrar".