22 - Una Idea

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Narrador

Los días de Applejack, luego de la boda de su hermano, se tornaron cada vez más pesados. Últimamente viajaba de allá para acá, tomando decisiones, aprobando planes, asistiendo a reuniones, haciendo papeleos... con suerte paraba en su apartamento para comer, otros días ni siquiera comía. Y entre todo ese ajetreo de su vida la rubia no podía ver a Rarity, cosa que la mantenía con desanimo durante toda la jornada... y no era la única.

Rainbow por su parte, luego de mantener su primer puesto en aquella competencia, entró en un ciclo interminable de competencias entre ella y su rival, Índigo Zap, quien no tenía intención de darle un respiro a la peli-arcoiris. Entre viaje y viaje para ir a una competencia u otra, con suerte lograba estar unas horas con Fluttershy.

- Es que ya... ¡Ya no lo soporto Dash! - exclamó Applejack a la peli-arcoiris por medio de su celular - prácticamente no pasa un minuto sin que... ajá, si... ¡Si si, eso está bien, sólo recuerda sacar la cantidad de copias que necesitamos!... ¿en dónde estaba? Ah si, ¡que no pasa un minuto sin que me pidan algo!

- ¿Y qué esperabas AJ? El mayor de los hermanos, que es el que mayor cantidad de responsabilidades tenía, se fue de luna de miel, es obvio que tus deberes se multipliquen... - dijo Rainbow antes de tomar un trago de su botella de agua - Ahora no creas que no soy comprensiva porque yo tampoco tengo tiempo para nada, esa novata de Índigo Zap no ha dejado retarme en cada pequeño o gran evento que se anuncia, un día de estos ni ella ni yo vamos poder resistir contras los principiantes si seguimos así.

- Debe ser muy duro la verdad, aunque yo daría lo que fuera por poder salir de esta oficina y estirar las piernas - dijo la rubia mirando con resignación el reloj de pared - Supongo que en algún momento las cosas se calmaran.

- Ojalá... oye, dijiste que estás muy atareada, ¿verdad? ¿Porque no le pides ayuda al tipo ese que nos presentaste en la boda de tu hermano? Dijiste que ya los había ayudado antes - sugirió Rainbow al venirle el recuerdo a la cabeza.

- Hmm... ¿Te refieres al señor Whooves? ¡Si! Es una gran idea Dash, gracias.

- No hay de qué, AJ.

- Yo también quiero sugerirte algo. Ya que dices que un día de tan agotadas que estarán no podrán competir ni contra los principiantes, ¿por qué no haces una tregua o un acuerdo con ella? Como que sólo compitan en los grandes eventos, esos que se hacen una vez al año...

- Hmm... la verdad no es una mala idea. Se ve que esos informes aún no te queman del todo el cerebro AJ, gracias - dijo la peli-arcoiris provocando que la rubia ría junto a ella - Bueno, debo colgar, gracias por tu consejo.

- Gracias igual, nos vemos - dijo Applejack antes de cortar la llamada - Y ahora, veamos si puedo contactar con el sr. Whooves...

- Disculpe señorita Applejack, me preguntaba si podía revisar y firmar esto - dijo un hombre luego de golpear la puerta de la oficina y entrar. Applejack tomo las hojas y las leyó detenidamente.

- Primero corrige esto de aquí, vuelve a imprimirlo y lo firmaré - dijo devolviendo los papeles al muchacho.

- Si, enseguida - dijo antes de salir de la oficina de la rubia.

- Ahora... ¿en qué estaba? - dijo Applejack mientras marcaba un número para llamar, esperó unos cuantos segundos hasta que le tomaron la llamada - ¿Hola? ¿Señor Whooves?

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Mientras la tarde poco a poco llegaba a su fin, en los vestidores del estadio donde acababa de finalizar la competencia, Rainbow se encontraba recogiendo sus cosas, lista para volver a casa y darse una ducha relajante. Pero sus planes tendrían que esperar, pues Índigo Zap la estaba esperando en la salida.

Be Yourself ~ Canterlot love story (MLP)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora