Un año después
Sí, el suelo de la casa de Kyler era bonito, pero no tanto como para lanzarme a besarlo.
Me equilibré a duras penas mientras salía de la habitación con los tacones negros mal puestos y enganchándome los pendientes. Cuando terminé con los dos di pequeños saltitos para ajustar mi pie dentro del tacón. Marshall me vio y se acercó a mí con un vaso de Champagne. Agarró mi antebrazo y me pude poner bien el tacón derecho.
-Gracias, caballero. –Bromeé mientras tomaba la copa. Marshall me sonrió de manera genuina.
-Nada, Sky. Lo que sea por la chica que me va a curar el trauma que este libro dejó. –Me guiñó un ojo de manera juguetona.
-Creo que ya tuve suficientes madrugadas hablando contigo de él. Debes dejarlo ir, Mar.
-¿Estás cerca de la parte en la que Kyler y tú os peleáis en el libro? –Quiso saber. Pero su tono era completamente burlón, dado que sabía la respuesta que iba a recibir.
-¡Sí, y está acabando con mi corazón!
Ambos comenzamos a reír mientras nos dirigíamos hacia donde estaban los demás, frente a la televisión. Decidí ponerme contra la barra para ver la escena que se presentaba frente a mis ojos.
Alice estaba sentada en el suelo con Scarlett entre las piernas mientras conversaba con Evan tranquilamente. Aiden estaba abrazando por la espalda a Fleur con todo el cuidado y el cariño del mundo. Mackenzie y Marshall conversaban animadamente con Jonathan, quién después se iría de fiesta con nosotros. Todos estaban en el apartamento de Kyler, esparcidos por el sofá o los pufs, dando una escena completamente familiar y cálida.
Fuera nevaba y se veía a la gente caminar por las calles de camino a diversos bares y discotecas. Me sentía completamente afortunada de estar rodeada de tantas personas que quería para recibir el nuevo año.
Noté cómo alguien se ponía a mi lado y giré para verle con una sonrisa. A Kyler, automáticamente, se le pintó la misma sonrisa.
-¿Te lo estás pasando bien? –Preguntó. Yo asentí, revisándolo con la mirada.
Su traje negro apretado, la camisa blanca y la corbata roja, eran solo elementos que lo hacían parecer un poco más guapo de lo que realmente era. Porque Kyler no eran un chico despampanante o de los que te encuentras en un anuncio de colonia. Kyler era un chico mono, de esos que te giras a ver por la calle. Que ves una vez y no sale de tu cabeza. De la clase de chico con el que sueñas y dices que no existen.
-Menos por la parte en la que Scarlett me ha vomitado encima, sí, mucho.
Kyler echó la cabeza hacia atrás mientras reía con fuerza. Yo no pude evitar sonreír ante la imagen de su garganta completamente estirada hacia atrás. Estuve muy, muy cerca de echar a todos de ahí y hacérselo por última vez este año a Kyler ahí mismo. Pero ya fue nuestra última vez anoche. Cinco veces.
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Suicide Club
Diversos«No estoy cayendo Ya he tocado el suelo Vivo en la oscuridad Porque nadie quiere Ser mi luz» Se prohibe cualquier copia o adaptación del libro. Es completamente de mi propiedad. Obra registrada en Safe Creative bajo el código: 1908251767712