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—¡Stiles! ¡Por favor, para! —sollozo mientras sentía como la mano del contrario apretaba su cuello con una gran fuerza, los brazos de Stiles estaban cubiertos de su sangre y en su rostro se mostraba una gran frialdad mientras asfixiaba a Theo.

—¡Esto te lo ganas por traicionarme! —rugió Stiles y clavo el cuchillo de manera profunda en el pecho del rubio.

Abrió los ojos de golpe, sintió su cuerpo sudado y como la camiseta se le pegaba al cuerpo. Aún estaba recostado en Stiles por lo tanto no sabía si sentir un alivio o un profundo miedo, estaban todavía en aquella oscura habitación por lo tanto la luz que se reflejaba era muy poca, pero lo suficiente para ver al castaño a los ojos. Tenía la mirada fija como si la tuviera perdida recordó entonces lo que le había dicho El Vacío la primera noche: “Nunca duermo por eso, no quiero que mi consciencia me traicione, podría volverme loco.”

¿Era posible que nunca pudiese dormir por lo que hizo? Theo entonces pensó en Stiles teniendo una pesadilla, su subconsciente engañándolo mostrándole imágenes de su ex novia y su ex mejor amigo asesinados por su propia mano, ambos diciéndole cosas para alterar su mente, para que se quitara la vida, para oírlo gritar.

—¿Mantendrás tu mirada en mi? —Preguntó El Vacío haciendo que Theo se sorprendiera ¿había notado su mirada?

—L…lo siento…

—No estoy muy acostumbrado a que me miren a los ojos por muchos períodos de tiempo, de hecho, hasta a veces odio el contacto visual —confesó el contrario mientras que de sus labios soltaba un largo suspiro.

—¿Por qué?

La mirada de Stiles se encontró con la mirada curiosa de Theo, hasta este pudo sentir que le miraba el sudor de su frente y su cuello por lo tanto no le importo tanto que el castaño limpiara su frente con su mano de una manera casi hasta cariñosa.

—¿Sudas mucho al tener pesadillas? —Preguntó Stiles, esta vez pasando su mano por el cuello ajeno.

Theo solo asintió.

—¿Por qué no te gusta el contacto visual? —Volvió a preguntar el rubio esperando que no le molestara que le preguntara.

—Digamos que a veces la gente te mira por la calle y puede pedirte ayuda, o favores, y son cosas que no tolero en esta sociedad de hoy en día. El ser humano llega a ser un sujeto realmente despreciable —en su voz Theo pudo localizar un cierto odio al pronunciar cada sílaba.

—Pero…tú eres un ser humano —Stiles solo sonrío, pero como era típico en él; aquella sonrisa que irradiaba algo de terror y psicosis.

—No soy el más cuerdo de todos.

Hubo entonces un gran silencio en la habitación y Theo miro hacia el techo de aquella muy inusual habitación, era de noche por lo que podía notar y sentía su cuerpo cansado, incluso adolorido. Partes de él aún le dolían por aquella paliza que había recibido, pero Stiles estaba incluso aún peor que él y no decía nada al respecto “el no le importa ni siquiera el dolor, Theo, por algo su apodo” se dijo a si mismo y cerró los ojos.

—Será mejor que sigas durmiendo, Theo. No hay mucho que hacer en este cuchitril —Y el mencionado solo río.

—Estoy casi seguro que nadie de mi edad dice “cuchitril” —Incluso sobre aquella oscuridad pudo sentir a Stiles sonreír.

—Pues ya conoces a uno.

Y no hubo mas conversación, por su parte Theo mantuvo una sonrisa en sus labios se podría incluso decir que le gustaba eso de que Stiles lo hiciera sonreír, o viceversa. Volvió a recordar el callejón como se había entregado a él, como de alguna manera se sintió completamente seguro cuando lo besaba o incluso lo hacia suyo. Por una parte Theo debería sentirse asqueado partiendo por el hecho de que aquel hombre lo violo sin ninguna piedad, pero por otra ignoraba ese hecho hasta podía admitir que le gustó, que era lo que en realidad había deseado: estar con él.

Finalmente Theo se dio por vencido, no tenía nada de sentido pensar en aquello en ese preciso momento, solo dio una última mirada al techo y a los barrotes para finalmente quedarse dormido sumiéndose en un profundo sueño.

(...)

La puerta se había abierto con un gran estruendo y Theo sintió los ojos completamente pesados ¿ya era de mañana? Había perdido incluso la noción del tiempo ¿cuánto tiempo habían durado en aquel sitio tan oscuro y vacío?

—¡A despertarse, mariquitas! Hoy ambos tienen cita con sus psicólogos, pero especialmente tendremos cuidado contigo, Vacío —dijo el guardia a lo cual el mencionado solo gruño cuan perro rabioso—. Gruñe todo lo que quieras basura, contigo todos tenemos cuentas pendientes. ¡Raeken, levántate!

Pero el cuerpo de Theo no reaccionaba, a decir verdad, se sentía atontado como si lo hubiesen despertado de golpe. Este al no decir nada fue levantado del suelo y empujado hacia afuera, dio una última mirada a Stiles quien seguía luciendo tranquilo, ni se inmuto hacer un movimiento alguno. Una parte de él quiso gritarle que lo ayudara, que hiciera algo pero nada.

—Luego volverás con tu noviecito, Raeken. Vamos.

Insane [Stheo/Steo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora