Una esposa perfecta © - Completa

Capítulo 33

La encargada del periódico y columnista de espectáculos sociales, era una mujer muy creativa, y la única que estuvo de frente cuando el enérgico encuentro sucedió. Esa mujer tenía una gran imaginación. Ya que el día tan esperado por varias personas llegaría pronto. Aun más después del espectáculo montado por Enrique.

—No puedo creer lo que hiciste, mira esto, Quique.—Rachell tenía la cara roja, y no era gracias al vapor de su tina, ella aun en bata y Molli llenando de sales la tina—. Mira lo que tu conducta provoca.

—A ver, muestra—. Enrique tomo el periódico dado por su enana favorita y leyó el párrafo de la viuda loca de la ciudad. La columna decía:

...

Nunca nadie olvidaría el golpe que recibió lord Ethan de su pronto cuñado. Es más yo misma quede anonada, mis queridos lectores, es decir; todas y todos sabemos que el querido Enrique II,es un joven encantador, todas las damas incluida yo misma, lo amamos.
Pero me sorprendió verle tan violento, todos supusimos, incluso yo,que el joven heredero del duque, se retracto de la boda con nuestra Lady Rachell, pero no. Mis informantes me han dicho que era un simple ritual familiar. Yo misma no sé qué decir. Si mi hermano(que no tengo) golpea a mi futuro esposo, yo no estaría tan feliz.
Pero ami no me sorprende nada. El mayor de los Thresser nunca menciono nada ni estuvo presente, recordemos que pronto será papá.

Bueno mis queridos lectores no puedo dar más información, nos veremos después de este tan esperado enlace.

...

—¡Oh! Tengo un buen gancho y un muy bello perfil. Hermanita deberías encerrarme en un lugar, me pueden robar.

—Eres un cínico. Como puedes decir tremenda cosa. Ahora, hoy mismo, esa mujer me las pagara

—¿Por qué?

—Mira el día antes de mi boda, comenta tal cosa en este maldito periódico. Es una..

—¡Huy! Clama enana.

—¡No me llames así!—Rachell soltó otro impropio que fue censurado por la mirada de Molli pero también respaldado por Enrique con solo asistir de cabeza.— Ahora papá no sabe que hacer. Puedes creer que la gente se crea semejante tontería. Tú eres un irresponsable.—lo señaló muy aireada.

—¡Yo! Pero si soy muy responsable.—ella se cruzo de brazos y lo reto para que le dijera en qué— Bueno nadie sabe en sí la razón del golpe.—susurró Enrique para que Molli que ahora estaba ordenando las toallas no se entera.

Rachell muda por el atrevimiento de Enrique solo le quedo sonrojarse más.

—Señorita, ya esta el baño.

—Gracias Molli. Ahora puede irte.

—Pero y su baño...

—Enrique me ayudara, anda vamos vete.

Molli se fue no muy contenta.

—Yo no te tocare, ni loco.—con las manos enfrente Enrique se defendió y usándolas como escudo marchaba hacía a tras.

—Obvio que no, no seas tonto. Solo así se iría y podremos hablar tranquilamente, Quique.

—Para con eso, Rae. Pero si, nadie sabe por que lo golpee. Se lo merecía y me lo debía.

Ella suspiró —. Lo sé. Sabía que no te quedarías sin hacer nada, pero en la calle, vamos James, no creo que tu pensaras en eso¿verdad?

—Estaba algo tomado, le llevamos a su despedida de soltero a un burdel de allá abajo, tú sabes—él le guiño un ojo—pero el muy cabrón—Rachell jadeo—, lo siento si toque tu sensibilidad, madame.