25) Desesperación (Final) [Parte 5]

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[PARTE 5]

Emireth regresó con la misma luz que desapareció, y en ese mismo instante Drivn se fue.

— ¿Estás bien? —le preguntó Anne a Emireth.

Emireth vio a Anne con cara de póker y replicó:

— ¿Por qué me metiste en un libro?

— Porque el libro me dijo que lo hiciera, y como estabas peleando con Lord Khair…

El rostro de Emireth cambió, hubo un corto e incómodo silencio que cortó diciendo:

— ¿Él es el padre de los hijos de Rosemary?

Anne la miró a los ojos y asintió con la cabeza.

— Él es un desgraciado… Eso quiere decir… que Dayane… —Emireth se exaltó —. ¡Dayane!

Emireth corrió al piso de arriba, Anne la siguió rápidamente. Llegaron al cuarto de Dayane. Al abrir la puerta la niña no estaba allí.

— ¡Dayane! ¡Dayane! ¡Dayane! —gritó Emireth.

Anne se dirigió al baño y al entrar no la vio en ese lugar tampoco.

— Buscaré en el resto de la casa —dijo Emireth antes de salir disparada como una bala.

Anne se quedó en el cuarto, y algo en la cama de la niña captó su atención. Ella se acercó y tomó el papel, era una carta. Estaba escrita por Dayane.

— ¡Emireth! —llamó Anne.

Unos segundos más tarde ella apareció.

— ¿Qué pasó? —preguntó con desespero Emireth.

Anne le extendió la carta, ella la tomó con violencia e inconscientemente empezó a leer en voz alta.

“Mamá, me fui porque algo me llamó la atención. Es un camino de flores que apareció de la nada, es hermoso mami. No te molestes conmigo. La verdad es que no sé porque escribo esta carta, bueno tal vez es porque el camino es largo y me tomara mucho tiempo. Te quiero mucho, nos vemos”.

Emireth empezó a mirar el suelo en todas partes, ambas buscaban lo mismo, el rastro de flores. Anne miró a la ventana y vio que había un camino de flores marchitas.

— Emireth, allí —dijo Anne señalando la ventana.

Emireth vio donde le señalaba y por un momento se perdió.

Anne iba a decir algo pero de pronto unas imágenes golpearon su mente, era un recuerdo, lo que había sucedido con Dayane:

“Dayane dormía en su cama plácidamente, se levantó y se sentó en la cama. En ese instante flores se empezaron a formar en el suelo, llevaba un camino hacia la ventana. Ella siguió las flores y al llegar a la ventana se elevó y levitó.

Una sonrisa se formó en su rostro. Con delicadeza aterrizó al frente de la casa y más flores se formaron, Dayane corrió siguiéndolas”.

— La carta… ¿cuándo escribió la carta? —susurró Anne.

Otra imagen llegó a su mente:

“La habitación estaba vacía, hasta que una mujer se materializó en la habitación, era Rosemary. Miró a su alrededor. Llegó a la puerta como tratando de escuchar que sucedía, sonrió y luego agitó la mano. Un papel voló delante de ella y unas palabras empezaron a escribirse. Al terminar, la carta cayó a la cama y Rosemary desapareció”.

— ¡Anne! ¡Anne! —gritaba Emireth a unos escasos centímetros de ella.

Anne sacudió la cabeza y se alejó de Emireth.

— ¡¿Qué te pasaba?! —Le gritó —. ¡¿Qué estabas viendo?!

Anne vio la desesperación de Emireth. Concluyó que no podía decirle que Rosemary tenía a Dayane porque si no la ira la dominaría, y eso sería muy peligroso hasta para ella misma.

— Creo que se dónde está Dayane —dijo Anne.

— ¡¿Dónde?! —preguntó Emireth tomándola de los hombros.

La puerta sonó.

— Roman —dijo Anne.

Emireth corrió a la puerta seguida por Anne. Ella abrió la puerta.

— Hola cariño —saludó Roman.

— Hola —dijo Emireth, luego se abalanzó hacia él y lo abrazó.

— Hola Anne —saludó Roman mientras abrazaba a Emireth, Anne sonrió —. ¿Paso algo?

Emireth cortó el abrazo.

— Dayane se fue y tú debes venir con nosotras para encontrarla.

°°°

— ¿Por qué me tienes aquí? —preguntó Dayane.

— Es una pregunta fácil, es para atraer a tu madre y a Anne.

— ¿Y por qué simplemente no las llama?

— Ellas no vendrían.

— ¿Cómo se llama usted?

— Soy Justin Therexh.

— ¿Y qué tienes que hablar tú con mi madre y mi tía?

— Yo no mucho, ellas aún no me podrán reconocer, es Rosemary la que más va hablar con ellas.

— ¿Y quién es Rosemary?

— Alguien muy cercano a tu madre… y a tu tía también la verdad.

Killing You In My MindDonde viven las historias. Descúbrelo ahora