Me odio, Pero te amo

Capitulo 54

Punto de vista de Laura

Pensé que iba a morir en ese cráter. Pensé que nadie me escucharía y me quedaría hasta que no pudiera más y me caería hasta que muriera de nuevo. Pensé que moriría en un agujero gigante con un dios pez gigante. Pensé que moriría sin decir adiós a Carmilla.

Pero luego escuché pasos, y levanté la vista. Ella me escuchó, ella vino. Pude ver lo asustada que estaba. Pero ella parecía tan tranquila cuando me ayudó. Claro, ella no me ayudó físicamente hasta que estuve lo suficientemente cerca para que ella me alcanzara, pero fue su voz tranquilizadora lo que hizo que mi aterrorizado cuerpo se moviera.

Me acurruco más cerca de su cuerpo.

- Laura, por mucho que me encante esto, tenemos que volver con los demás -. Carmilla dice en voz baja mientras pasa sus dedos por mi cabello.

- Lo sé. -

Presioné mis labios con los de ella en un beso dulce pero corto. Cuando retrocedo, su boca todavía está ligeramente abierta. Me levanto, sin querer nada más que hundirme en sus brazos. Estiro mi mano y la levanto.

No necesitamos palabras porque ambas sabemos que aunque ninguna de nosotras quiere regresar, es algo que tenemos que hacer. La tomo de la mano y comenzamos a caminar.

- ¡Laura! - LaF grita cuando estamos a la vista, prácticamente abrazándome. - ¡Estas bien! - Retroceden: - ¿Qué pasó? ¿Dónde estabas? ¿Por qué gritaste? -

- Estaba tratando de encontrar a Carm cuando el suelo se fracturó a mi alrededor. Caí unos metros en el cráter -.

LaFontaine parece preocupado pero impresionado. - Bien, Hollis. Tendrás que decirme cómo saliste en otro momento. Ahora mismo, tenemos que hacer el hechizo -.

- ¿Por qué ahora? - Pregunto. Quiero decir, sé que más pronto que tarde es mejor, pero ¿por qué ahora sería necesario?

Usan su pulgar para señalar a Perry (o realmente, creo que es la Decana en este momento) está en el circulo con una expresión absolutamente asesina en su rostro. Sus manos y pies están atados por lo que ella se acuesta de lado. Por alguna razón, hay un trozo de tela en su boca.

- ¿Por qué está amordazada? - Carmilla pregunta.

- Ella comenzó a decir un lenguaje extraño que hizo que JP y Mattie vieran sus ojos en su cabeza. Cuando comenzaron a convulsionarse, Le metí uno de mis calcetines en la boca -.

- Eso es repugnante pero aparentemente efectivo-. Lo observo, estudiando a Perry.

Puedo escuchar ruidos apagados provenientes de ella antes de que su nariz se arrugue y deja de intentar hablar.

- ¿Están listos para hacer el hechizo? - Mattie dice. - Necesito cuatro vampiros en total y preferiría no usar a este -. Ella gesticula hacia JP.

Asiento, mirando a Carmilla.

- Hagamos esto, Mattie -. Confirma Carmilla.